Nuestras Memorias: poéticas, políticas y feminismos | Grupo de Investigación y Lecturas Femistas

Teresa Valdes Imagem Radio Uchile
Teresa Valdés | Imagem: Radio Uchile

A través de esta compilación de conversatorios se va hilvanando una forma de entretejer la memoria que nos invita a conocer desde la polifonía propia de la epistemología feminista. Una lógica no lineal que entrama el pasado con el presente, urdiendo –conscientes o no– el futuro cercano. Desde el mayo feminista que se toma las calles y universidades al mismo tiempo en que se realizan estos conversatorios, hasta el estallido social que se asoma como vaticinio en el discurso de algunas de estas mujeres. El ejercicio se vuelve, entonces, un gesto de evidente contraposición a la tradicional voz autorial, lineal, jerárquica y monódica de las lógicas patriarcales que monopolizan los discursos oficiales desde los distintos espacios de poder que han ostentado tradicionalmente los hombres, entre los cuales la academia ha sido uno de sus predilectos.

La construcción de esa verdad única desde voces autorizadas (mayoritariamente hombres blancos, de clase alta y heterosexuales, aunque con varias excepciones en un país tan al margen del mundo como el nuestro), ha invisibilizado de forma sistemática procesos, hechos, debates, conflictos y personas, cuya participación e injerencia proviene tanto de círculos institucionales como marginales. Parte importante de esa historia no contada fue protagonizada por mujeres diversas que se dieron a la tarea de luchar por sus derechos y de enfrentar, incluso con más gallardía que sus compañeros, la dictadura cívico militar y su aparato represor.

El Grupo de Investigación y Lecturas Feministas (GILF)1 realiza un ejercicio detallado y fiel de transcripción de los conversatorios organizados por la misma agrupación entre los meses de mayo y noviembre de 2018 con un último encuentro en abril de 2019. El resultado es este documento histórico que permite un doble gesto; por una parte nos ofrece un registro de los conversatorios realizados, que sin duda será relevante para la crítica, la historia y los movimientos feministas. Y por otra, recupera, a través de las voces de sus protagonistas, una memoria invisibilizada y muchas veces menospreciada como lo fueron los gestos/movimientos feministas en Chile y los diversos aportes de sus precursoras antes, durante y después de la dictadura.

Tres son las preguntas que gatillan las reflexiones en las invitadas: ¿Cómo llegaron al feminismo?, ¿qué hitos del feminismo destacan? y ¿qué significa ser feminista? Desde lo biográfico hacia lo político, entendiendo ese tránsito no como una dicotomía insoslayable sino más bien como capas inseparables de un mismo tejido. Interrogantes que fueron respondiendo a lo largo de estos conversatorios siete mujeres transcendentales en nuestra historia por sus aportes desde la reflexión y el activismo: Diamela Eltit, Carmen Berenguer, Nelly Richard, Gilda Luongo, Olga Grau, Lorena Fríes y Teresa Valdés. A modo de corolario, el ciclo finaliza con la lúcida y crítica exposición de Judith Butler.

Las innumerables tesis planteadas por cada una de ellas se ven complementadas con datos biográficos sin los cuales no podríamos comprender las complejidades de la relación de estas mujeres tanto con el activismo como con la academia. Espacios fluctuantes en sus experiencias vitales que las tensionan permanentemente. La reflexión en torno a los estereotipos con la que Diamela nos explica que regalar una muñeca a una niña implica peinarla, pasearla, lavarle la ropa. Es decir, regalarle su futura maternidad (p. 49) y su análisis de las brechas que actualmente perjudican a las mujeres, situándolas hoy en un escalafón social inferior al del hombre, evidenciando así que dichas diferencias no han disminuido con el paso del tiempo, sino más bien mutado volviéndose poco evidentes debido a las tecnologías actuales (p. 45) que sirven de puntada inicial en este recorrido. Carmen Berenguer nos adentra en su historia privada, política y poética, con el cuerpo tomado, recordando todas sus luchas, las de sus compañeras y las de su madre, sentenciando, al igual que Diamela, que las diferencias e injusticias se han profundizado en este modelo neoliberal (p. 37). Por su parte, Nelly Richard cierra el ciclo con la lucidez propia de su reflexión, atenta a la urdimbre simbólica de lo político y lo privado, al resurgimiento del pensamiento de Julieta Kirkwood en la contingencia del momento y a la necesidad de complementar en el feminismo tanto la reflexión teórica y la acción política como también la escritura crítica y la figuración estética para así alcanzar la necesaria reorganización de los aparatos culturales incluyendo una sensibilidad propia (p. 54).

En el segundo de estos conversatorios, Gilda Luongo nos invita a conocer su militancia política y amorosa, su incursión en los movimientos de izquierda y la toma de conciencia de la existencia del feminismo en sus procesos personales, a lo largo de su vida (p.93) instalando en el centro el amor como fuerza principal para desmantelar la perversidad y la violencia de las instituciones que privilegian la productividad capitalista (p. 101). Por su parte, Olga Grau destaca en su recorrido la obstinación feminista de instalar una lógica histórica desde una epistemología distinta, a contrapelo del discurso oficial que desconoce el componente biográfico como parte esencial de ese relato. Para Olga, se puede establecer en la mayoría de los casos que el despertar de una conciencia feminista es un gesto de rebelión ante un sistema cooptado por lógicas masculinas/patriarcales/machistas (p. 107), por lo que su origen determina su carácter revolucionario.

Finalmente, en el tercer conversatorio, Teresa Valdés plantea que una de las dificultades del feminismo en Chile y en Latinoamérica es la transferencia generacional (en palabras de Lorena Fríes: articulación, coordinación, conversaciones, cruces) permitiendo, estos conversatorios, ir subsanando ese vacío (p. 190). Para Lorena, el quiebre y la desvalorización de los cruces interdisciplinarios entre academia y activismo como consecuencia de lógicas masculinas no tienen relación con las mujeres/activistas dentro y fuera de la academia, sino más bien con las condiciones actuales de producción del conocimiento (p. 190).

Para cerrar el ciclo y a modo de corolario, el encuentro con Judith Butler le otorga al ciclo de conversatorios una síntesis de las ideas desplegadas en cada uno de estos espacios, permitiendo articular el pensamiento feminista en una serie de aspectos centrales para el trazado de estas memorias feministas. Para Judith, existen en Chile y en Latinoamérica otras desaparecidas que exceden aquellas de la dictadura. Son las desaparecidas vivas, aquellas mujeres que quedaron vivas pero que fueron marginadas, excluidas, invisibilizadas. Que escribieron y que pensaron juntas. Que formularon teorías y filosofías pero cuyas lógicas no fueron reconocidas desde la legitimidad del orden imperante (p. 233) (en lo discursivo, en lo político, en lo social). En esta línea, Judith rescata la necesidad de recuperar las memorias feministas a través de una racionalidad distinta, transitando hacia la valoración de otras formas de conocimiento, ajenas a la academia, pero que permitirán en parte romper la lógica capitalista de la academia y abrir sus puertas al mundo exterior (p. 234), promoviendo cambios en las prácticas discriminatorias y violentas que limitan y precarizan las condiciones de las mujeres en la universidad (p. 234). La claridad del análisis de Judith ante el devenir histórico en Chile y Latinoamérica le permite finalizar su intervención reconociendo una dimensión central de estas memorias feministas, expuesta en los conversatorios previos: “Creo que ustedes tienen una tradición de acción colectiva que es mucho más sólida por la resistencia a la dictadura, por la resistencia al poder corporativo, al capitalismo del norte” (p. 237).

El ejercicio del Grupo de Investigación y Lecturas Feministas, que propició estos conversatorios, y que finalmente dio forma a la compilación reseñada, se transforma en un gesto imprescindible para la recuperación y reinstalación de esas memorias, de esas poéticas y de esas políticas. La contundencia de las exposiciones y los análisis realizados (descriteriadamente sintetizados en estas pocas líneas) dan cuenta de un transitar diverso, complejo y heroico del cual debemos hacernos cargo como sociedad. El ejercicio vital de estas mujeres, junto a la determinación del grupo de investigadoras que logra instalar estos encuentros, responde también a una lógica distinta. Pensar y decir desde otro lugar es lo que permite esta recuperación ajena a los discursos oficiales. En palabras de Yesenia Alegre, preguntas “redactadas a contrapelo de la academia oficial. […] Un margen institucional que intenta no doblegarse ante el poder patriarcal y al autoritarismo universitario” (p. 224). Es este mismo ejercicio subversivo lo que finalmente desmantela las lógicas de poder que las excluyen y nos permite imaginar un mejor porvenir. Hicieron y siguen haciendo historia.

Nota

1 El Grupo de Investigación y Lecturas Feministas está conformado por académicas de diversas instituciones universitarias de la región de Valparaíso. Se conforma el año 2015 al alero del Programa de Doctorado en Estudios Interdisciplinarios sobre Pensamiento, Cultura y Sociedad, de la Universidad de Valparaíso, como un espacio de encuentro y estudio que progresivamente adquiere mayor autonomía y relevancia ante los diversos cuestionamientos que surgen tras la discusión crítica en torno a las tesis principales del feminismo y sus condiciones como mujeres/académicas en nuestra sociedad (y en esta región). Del grupo, aportaron en este proyecto: Jesenia Alegre, Carolina Campos, Verónica González, Edda Hurtado, María del Pilar Jarpa, Damaris Landeros, Claudia Montero, Sandra Navarrete y Andrea Robles


Resenhista

Mauricio Arenas Oyarce – Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Chile. E-mail: mauricio.arenas@pucv.cl


Referências desta Resenha

Grupo de Investigación y lecturas feministas (Ed.). Nuestras Memorias: poéticas, políticas y feminismos. Valparaíso: Ediciones del cardo, 2022. Resenha de: ARENAS OYARCE, Mauricio. Sur y Tiempo. Revista de Historia de América, v.3, n. 6, p. 210-213, jul./dic. 2022. Acessar publicação original [DR]

Deixe um Comentário

Você precisa fazer login para publicar um comentário.