El trabajo clínico psiquiátrico en el Buenos Aires del siglo XX | Alejandra Golcman

El libro de Alejandra Golcman El trabajo clínico psiquiátrico en el Buenos Aires del Siglo XX es el resultado de una tesis de doctorado en ciencias sociales, producto de una investigación de 5 años de duración. El texto explica principalmente cómo las prácticas de los médicos del hospital psiquiátrico de mujeres J.A. Esteves, de Buenos Aires, Argentina, fueron influenciadas, atravesadas e, incluso, modificadas por el contexto social y cultural, durante el período 1908-1971. Este trabajo se aleja de la histoedria tradicional, con foco en las grandes figuras o corrientes teóricas, y se inscribe dentro de una perspectiva de historia cultural de la psiquiatría.

Los principales aportes del libro residen, en primer lugar, en la estrategia metodológica utilizada a lo largo del texto. El planteo cuantitativo y cualitativo le ha permitido a la autora analizar, tanto la población hospitalaria en general como los casos particulares del hospital. En segundo lugar, es destacable el trabajo realizado con historias clínicas. Golcman adhiere a un enfoque donde cobra relevancia la pregunta por la cotidianeidad del trabajo clínico de los profesionales y la vida de los pacientes dentro de las instituciones psiquiátricas. La centralidad de estos aspectos en el libro resulta, entonces, su contribución fundamental. Cabe aclarar que Golcman inscribe su investigación en perspectivas que ya vienen siendo trabajadas, hace por lo menos 10 años, fundamentalmente por equipos de investigación de España y México ( Huertas, 2012 ; Ríos Molina, 2017 ) en el marco de la Red Iberoamericana de Historia de la Psiquiatría. De esta manera, en lo que se refiere específicamente al contenido del libro, la autora comienza su texto brindando una mirada sobre los diagnósticos de demencia precoz y esquizofrenia en el plano teórico, como los cuadros clínicos emblemáticos de la época, y también como los cuadros más representativos dentro de los casos clínicos analizados por la autora. Golcman realiza un abordaje de las ideas de los psiquiatras argentinos de aquel momento por medio de un análisis de artículos en revistas médicas, libros y tesis doctorales. Así, en el primer capítulo, la investigadora desarrolla el trabajo de esos autores, teniendo en cuenta las apropiaciones que ellos realizaron en el contexto local y mostrando que esas nociones también fueron redefiniéndose y reconstruyéndose con el correr de los años, en ese país.

En el segundo capítulo, la autora estudia las vivencias diarias de las pacientes internadas en el hospital, enfocando la atención en aspectos como las características de la convivencia con otras pacientes, el impacto de la inmigración y de la lengua extranjera, y los diagnósticos que aparecen en las historias clínicas. En esa parte del libro, Golcman consigue mostrar cierta homogeneidad de la cotidianeidad de la población hospitalaria, revelando también lógicas propias e independientes del contexto que tuvieron lugar en los pabellones del hospital. Este capítulo, ilustra la noción de “inercia” que Golcman (2017, p.204) propone en el libro. Ella argumenta que las descripciones encontradas en las fuentes muestran que el día a día de las pacientes en el hospital no parece haber cambiado mucho con el correr de las décadas.

Luego, en el capítulo “Los tratamientos que no curan”, Golcman (2017 , p.133) desarrolla los diferentes tipos de terapias utilizadas en el hospital, exponiendo cómo el ha sido entendido como un “laboratorio” donde se experimentaban diferentes terapias provenientes de Europa o de EEUU. Allí, la autora argumenta que los tratamientos utilizados, como la laborterapia, malarioterapia, terapias de shock y la lobotomía, utilización de psicofármacos etc., tuvieron otras intenciones más allá de la específicamente clínica. Golcman fundamenta esto en el pequeño número de pacientes que efectivamente recibieron terapias en el hospital. En este capítulo, vemos como el análisis cuantitativo que Golcman realiza resulta un recurso metodológico exitoso, ya que ilumina conclusiones sobre la existencia de una necesidad por parte de los psiquiatras, de experimentación, orden y control en el hospital, más que de una finalidad específicamente terapéutica.

En el último capítulo, el libro analiza la experiencia piloto de comunidades terapéuticas en el hospital, entre 1969 y 1971. La autora expone cómo, en uno de los 14 pabellones, convivieron diversos saberes y prácticas, provenientes no solamente de la psiquiatría, sino también del psicoanálisis y de la psicología comunitaria. En esta parte del libro, Golcman apela en primer lugar a la historiografía para comprender esas conexiones entre las distintas disciplinas en el país. Después, la autora explica puntualmente cómo se produjeron tensiones en el hospital, entre las diferentes formas de entender la cura de las pacientes en ese período histórico. La riqueza de esta parte del libro reside en que la autora desarrolla cómo esas tensiones no estuvieron desligadas de los procesos políticos del país, que se encontraba gobernado por un régimen militar.

El libro se torna, por lo tanto, en un excelente recurso para pensar el funcionamiento de este tipo de hospitales en relación a los diferentes contextos políticos de los países latinoamericanos. Estas instituciones resultan centrales en los escenarios de formulaciones de políticas de salud mental. Por ejemplo, en 2017, durante el gobierno de Mauricio Macri en Argentina, fue elaborado un proyecto de reforma de la Ley de Salud Mental, ya sancionada en 2010 y aceptada en aquel momento por diversos sectores. Por lo menos, en el plano formal la ley promovía la intención de mudar el paradigma manicomial, restituyendo los derechos para los pacientes. Después de esos avances, el actual gobierno argentino pretendió cambiar los términos de esa ley, dejando sin efecto esas propuestas. En el caso brasilero, y de forma similar, las directrices actuales de la política nacional de salud mental han sido reorientadas. En ese país, la hospitalización en manicomios se ha tornado central en el Ministerio de Salud del actual gobierno de Jair Bolsonaro.

En este sentido, tal como muestra el libro de Alejandra Golcman, se producen severas tensiones entra las distintas perspectivas de entender el funcionamiento de los hospitales psiquiátricos por parte de los actores del campo “psi”. Su libro entonces puede funcionar como “puente” entre ellos y contribuir a disminuir algunas distancias, por ejemplo, entre los investigadores de la temática con los profesionales de la salud mental de diferentes lugares. Estos y otros actores del campo “psi” tienen el derecho de solicitar y reclamar a los responsables, esto es, a los correspondientes funcionarios y gestores de cada país, que elaboren propuestas renovadoras dentro de los diferentes sistemas nacionales de salud mental. De esta manera, la investigación y el libro de la autora pueden colaborar para unir esfuerzos en esa dirección.

Finalmente, cabe destacar que si bien una de las principales fortalezas del libro reside en mostrar el panorama del accionar de profesionales (delimitando a la vez, cruces entre prácticas psiquiátricas y psicoanalíticas) y pacientes a lo largo del último siglo en el mencionado hospital, de igual forma el texto logra ofrecer herramientas teóricas y metodológicas. Este trabajo resulta de utilidad entonces para aquellos lectores que pretenden inscribir sus investigaciones, por ejemplo, en el área de los estudios históricos con perspectiva de género o basados en problemáticas de inmigración, a la vez que también resulta provechoso para quienes pretenden investigar este tipo de fuentes (historias clínicas) en otras instituciones similares en América Latina. El texto constituye entonces un recurso importante para los historiadores de la psiquiatría, para los profesionales de la salud mental y para el público en general interesado en la materia.

Referencias

GOLCMAN, Alejandra. El trabajo clínico psiquiátrico en el Buenos Aires del siglo XX. Madrid: Catarata. 2017.

HUERTAS, Rafael. Historia cultural de la psiquiatría: (re)pensar la locura. Madrid: Catarata. 2012.

RÍOS MOLINA, Andrés (Coord.). Los pacientes del Manicomio La Castañeda y sus diagnósticos: una historia de la clínica psiquiátrica en México. Ciudad de México: Instituto de Investigaciones Históricas Dr. José María Luis Mora/Universidad Nacional Autónoma de México. 2017.


Resenhista

María Eugenia González – Estudiante de postdoctorado, Universidad Nacional de Salta/ Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas. Salta – Argentina orcid.org/0000-0003-0085-798X E-mail: mgonzalez@mendoza-conicet.gov.ar


Referências desta Resenha

GOLCMAN, Alejandra. El trabajo clínico psiquiátrico en el Buenos Aires del siglo XX. Madrid: Catarata, 2017. Resenha de: GONZÁLEZ, María Eugenia. La psiquiatría en Buenos Aires en el siglo pasado: un estudio histórico sobre el trabajo clínico en el Hospital J.A. Esteves. História, Ciência, Saúde-Manguinhos. Rio de Janeiro, v.27, n.2, abr./jun. 2020. Acessar publicação original [DR]

 

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