Cinemão. Espaços e subjetividades darkroom – MAIA (REF)

MAIA Helder Tiago www youtube com Espaços e subjetividades
 MAIA H T Cinemão Espaços e subjetividadesHelder Thiago Maia / www.youtube.com

MAIA, Helder Thiago. Cinemão. Espaços e subjetividades darkroom. ., Salvador, BA: Devires, 2018. Resenha de: PERALTA, Jorge Luis. Explorando la sala oscura: el cine porno como espacio (literario) subversivo. Revista Estudos Feministas, Florianópolis, v.28 n.2 2020.

Ciertos espacios, así como los textos literarios que los representan, han sido soslayados de la investigación académica como si careciesen de la entidad suficiente para ser objeto de un análisis serio y riguroso. Los cines pornográficos constituyen un caso paradigmático de esa espacialidad marginal y marginada: asociados automáticamente con actividades sexuales furtivas y desordenadas, ocupan incluso uno de los eslabones más bajos en la jerarquía espacial de la sociabilidad homoerótica. No debe sorprender entonces el desinterés de la crítica por sus figuraciones literarias, habida cuenta de que en general son escasos los estudios sobre cómo han sido (re)construidos por la literatura los espacios frecuentados por varones que se relacionan sexual y/o afectivamente con otros varones.

Cinemão. Espaços e subjetividades darkroom se propone cubrir ese vacío analítico, en la línea de otros trabajos previos sobre espacios literarios “homosexuales”/ “gais”/ “queer”, como pueden ser el de Enrique Álvarez (2010) sobre poesía española; el de José César del Toro (2015) sobre novela mexicana o el de Jorge Luis Peralta (2017) sobre literatura argentina. La apuesta del volumen es ambiciosa en tanto considera un amplio corpus de textos de literatura latinoamericana – con un foco particular en Brasil y Argentina – y no se limita a los modos de proyección textual de los cines porno, sino que a partir de sus representaciones y significaciones artísticas despliega una reflexión sobre cómo esos espacios producen subjetividades que desbordan los marcos de la modernidad y la cisheteronormatividad. Aproximación, por lo tanto, a un tiempo estética y política, el libro dialoga con (y hace aportes a) los estudios sobre literatura y espacio / subjetividad, la teoría crítica y las investigaciones con perspectiva de género y sexualidad.

El autor, Helder Thiago Maia, es doctor en Literatura Comparada por la Universidade Federal Fluminense, investigador del grupo de investigación sobre Cultura y Sexualidad (CUS) vinculado a la Universidade Federal da Bahia y editor de la revista Periódicus. Diversos artículos publicados en revistas y el libro O devir darkroom e a literatura hispanoamericana (2014) constituyen antecedentes directos del presente volumen, en los que ya se observa el interés por explorar espacios considerados abyectos (baños públicos, cuartos oscuros, bares de sexo) a través de una metodología que combina un riguroso análisis textual con discusiones emplazadas en el campo de los debates más actuales sobre disidencia sexo-genérica.

El título del libro – Cinemão – favorece un doble sentido intraducible al castellano, por el juego entre “cinema” (cine) y “cinemão”, que es el término específico para designar los cines pornos dada su alusión a la “mão” (mano), la parte del cuerpo que juega un rol protagónico en los intercambios eróticos que se producen dentro de esos espacios. La mano sugiere también la actividad de la escritura: así, desde su mismo título, la investigación propone subrayar el peso de una memoria y una ética corporales. Hay cuerpos que practican formas alternativas de sexualidad en unos enclaves vistos como sórdidos por las mentalidades biempensantes, y hay textos que recrean esos espacios y esas prácticas: el estudio no pierde nunca de vista la interacción entre espacialidades vividas y representadas, con el cuerpo como eje vertebral de las discusiones, tanto literarias como filosóficas, que se despliegan al hilo del análisis.

El primer capítulo revisa cómo ha sido abordado concepto de “espacio” desde diferentes perspectivas, teóricas y críticas, para centrarse posteriormente en la relación específica entre espacios y subjetividades disidentes. Partiendo de la premisa de que los espacios funcionan a la manera de tecnologías del género, estableciendo jerarquías y favoreciendo o limitando determinadas prácticas y comportamientos, Maia valora modos posibles de subvertir la dominación espacial, en diálogo con teóricos clave como Giorgio Agamben, Michel Foucault o José Miguel C. Cortés. En cuanto al análisis estrictamente literario, el autor muestra que ha predominado el foco sobre el tiempo, de modo tal que son menos abundantes los estudios sobre espacialidad, y en concreto, sobre el tipo de espacialidad que se propone explorar. Un acierto de la propuesta es evitar el afán clasificatorio que suele distinguir las investigaciones en torno al espacio. Tomando como eje la noción foucaltiana de heterotopía, Maia pretende examinar cómo la literatura incorporó – y también produjo – espacios heterotópicos, en una dinámica ida y vuelta entre realidad y literatura. Los capítulos restantes están organizados de manera similar: contextualizan, proponen categorías analíticas y luego ofrecen lecturas de diferentes textos literarios, muchos de ellos poco conocidos y, en su mayoría, soslayados por la crítica literaria LGTBIQ. Hay que destacar, en este sentido, la complejidad y variedad del corpus, que evidencia un conocimiento muy amplio de la literatura latinoamericana, así como de los estudios que se le han consagrado.

En el segundo capítulo, Maia traza una historización de las salas de cine, un aspecto que, como advierte, ha sido escasamente considerado por los estudios cinematográficos, abocados, en general, al cine en sí mismo y no al espacio de su exhibición. Este recorrido le permite dar cuenta de cómo ese espacio fue inicialmente apropiado por sujetos disidentes, aprovechando sus condiciones físicas. En efecto, los guardianes de la moral no tardaron en preocuparse por las posibles inmoralidades que la oscuridad de la sala podía propiciar: en ese sentido, la figura del acomodador estuvo al servicio, en muchos casos, del control y vigilancia de los/as espectadores/as. Los cines específicamente orientados a la difusión de películas pornográficas tuvieron su apogeo entre los años 1970 y 80 y comenzaron a declinar como consecuencia de la pandemia del VIH/sida y los esfuerzos cada vez más denodados por sanear el espacio urbano. El autor caracteriza el cine porno a partir de nociones provistas por diferentes pensadores/as: profanación (Giorgio Agamben), heterotopía (Michel Foucault), pornotopía (Paul Preciado), espacios lisos y estriados (Gilles Deleuze y Félix Guattari), espacios queer (José Miguel Cortés). Una virtud del volumen es que evita el riesgo de esencializar la espacialidad que estudia: su propuesta de “espacios darkroom” (Helder MAIA, 2018, p. 151-153) – entre los que se incluyen los cine porno – apunta a lugares eróticos que son ocupados por sujetos disidentes y en los cuales la mirada está precarizada, de manera que el contacto se establece, fundamentalmente, a través del tacto. Al potenciar este y otros sentidos en lugar de la vista, los “espacios darkroom” dan lugar a la experimentación y a la producción de saberes alternativos. De la mano de esta propuesta conceptual viene otra, la de “lecturas darkroom”, una modalidad de aproximación textual disidente que no busca echar luz sobre los textos y espacios estudiados, ni decir la verdad sobre las vidas disidentes. Por el contrario, se trata de leer de manera no normativa, descartando jerarquías, percibiendo zonas oscuras y luminosas, territorializaciones y re-territorializaciones, en “una constelación de flujos poéticos que resisten la disciplina de la mirada y de la razón” (MAIA, 2018, p. 177).

El tercer capítulo, por su parte, presenta un genealogía del sujeto “perverso” que va de Richard von Krafft-Ebing a Teresa de Lauretis. El autor propone pensar la perversión no solo en relación con los personajes y narradores de los textos que analiza, sino también con el lenguaje literario y la teoría. En este sentido, el volumen no se circunscribe a lo temático, sino que articula, además, reflexiones de orden formal y teórico. Esta metodología le permite analizar los procesos de subjetivación de los sujetos “perversos” que concurren a los cines porno en y más allá de la literatura. Maia muestra que los distintos modos de sujeción – y en particular, aquellos ligados a la cisheteronormatividad – no consiguen controlar plenamente a los agentes sociales: hay siempre líneas de fuga y posibilidades de subversión. El cine porno aparece aquí como un espacio idóneo para la producción de otro tipo de subjetividades minoritarias, relacionadas no únicamente con prácticas sexuales, sino también con modos diversos de (auto)percepción. A Maia no le interesa delimitar identidades sexuales, sino explorar textos y subjetividades que pervierten los postulados de la Modernidad y la cisheteronormatividad. Su análisis se centra en dos grandes núcleos: las representaciones de cuerpos cis y trans en los cines porno – considerando textos tanto literarios como antropológicos – y lo que el autor, haciendo una lectura torcida de Spinoza, denomina “pasiones tristes” y “pasiones alegres” (MAIA, 2018, p. 254-259), es decir, encuentros corporales que pueden debilitar o fortalecer las potencias de una persona. A través de sus recorridos textuales, el libro muestra que aquellas prácticas consideradas perversas intensifican el placer y favorecen agenciamientos que desbordan los marcos corporales cisheteronormativos.

Aproximación novedosa y sustentada en un rico espectro de antecedentes teórico-críticos, Cinemão constituye una muy relevante contribución a los estudios literarios en torno al género y la sexualidad en Latinoamérica. Además de explorar espacios y textos habitualmente desdeñados por la investigación académica, el libro de Helder Thiago Maia ofrece un modelo metodológico, la lectura darkroom, válido para el abordaje de muchos otros textos desde una doble vertiente, estética y política, que evita los peligros del esencialismo y potencia, en cambio, una experiencia disidente radical en (y fuera de) la literatura.

Referências

ÁLVAREZ, Enrique. Dentro/fuera. El espacio homosexual masculino en la poesía española del siglo XX. Madrid: Biblioteca Nueva, 2010. [ Links ]

DEL TORO, José César. El cuerpo rosa. Literatura gay, homosexualidad y ciudad. Los espacios de entretenimiento de la Ciudad de México a través de la novela. Madrid: Verbum, 2015. [ Links ]

MAIA, Helder Thiago. Cinemão. Espaços e subjetividades darkroom. Salvador, BA: Editora Devires, 2018. [ Links ]

PERALTA, Jorge Luis. Paisajes de varones. Genealogías del homoerotismo en la literatura argentina. Barcelona: Icaria, 2017. [ Links ]

Como citar esse artigo de acordo com as normas da revista: PERALTA, Jorge Luis. “Explorando la sala oscura: el cine porno como espacio (literario) subversivo”. Revista Estudos Feministas, Florianópolis, v. 28, n. 2, e67890, 2020

Jorge Luis Peralta (jlperaltagaitan@gmail.com) – Es doctor en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada por la Universitat Autònoma de Barcelona. Sus áreas de investigación son la literatura argentina e hispanoamericana, los estudios de género y la teoría queer. Forma parte del proyecto “Diversidad de género, masculinidad y cultura en España, Argentina y México” (FEM2015-69863-P MINECO-FEDER). Es autor de Paisajes de varones. Genealogías del homoerotismo en la literatura argentina (Icaria, 2017). Entre sus ediciones pueden mencionarse los volúmenes Memorias, identidades y experiencias trans (Biblos, 2015, con R. M. Mérida Jiménez), Cuerpos minados. Masculinidades en Argentina (EDULP, 2017, con J. J. Maristany) y Antes del orgullo. Recuperando la memoria gay (Egales, 2019).

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