Global Classics | Jacques Bromberg

Jacques Bromberg Imagem University of Pittsburgh
Jacques Bromberg | Imagem: University of Pittsburgh

Na primeira semana de fevereiro de 2021, a The New York Times Magazine publicou um (já célebre) perfil de Dan-El Padilla Peralta, latinista estadounidense negro de origem dominicana, que escancarava os compromissos do campo de Classics – ou Estudos Clássicos, a partir de seu paralelo brasileiro – com o colonialismo e o racismo (POSER, 2021). O título da reportagem era sintomático acerca das implicações do debate: “Ele quer salvar Classics da branquitude. O campo conseguirá sobreviver?”. O texto gerou debates em diversos lugares e veículos do mundo, da imprensa grega (IOANNIDIS, 2021), acostumada a discutir a centralidade econômica do turismo histórico, a mesas redondas de antiquistas brasileiros (GT DE HISTÓRIA ANTIGA, 2021), marcados pelos intensos debates sobre o lugar da Antiguidade no ensino de História no Brasil.

O perfil e as subsequentes entrevistas de Dan-El Padilla Peralta permitiram que sujeitos de diferentes partes do mundo percebessem as tensões e contradições do (afluente) campo universitário estadounidense. Visto do Brasil, o debate tornava evidentes tanto os paralelos, como por exemplo a importância da “tradição greco-romana” na formação das elites escravistas e de uma identidade europeia, quanto os contrastes, como na quantidade de instituições universitárias e de financiamento acadêmico, ou ainda na experiência social do imperialismo a partir de posições antagônicas. Este jogo de paralelos e contrastes se explica pela história recente do Brasil. A partir da redemocratização dos anos 1980, a historiografia brasileira iniciou um movimento de revisão profunda de seus pressupostos eurocêntricos, o que motivou o surgimento de perspectivas alternativas, como as histórias dos grupos populares e subalternos, das relações de gênero, dos usos do passado ou dos processos globais de integração. O debate em torno das críticas de Padilla Peralta, então, apontava para o surgimento, nos Estados Unidos, de uma ainda marginal crítica aos compromissos eurocêntricos e elitistas do campo. Num curioso caso de “vantagem do subdesenvolvimento”, antiquistas brasileiros puderam “anacronizar” a academia estadounidense, assistindo a um debate intenso ali, mas já datado aqui. Leia Mais

Alexander von Humboldt y la globalización. El saber en movimiento | Ottmar Ette

Aunque como el propio autor nos advierte en una de las primeras páginas de su libro, siempre muy imaginativo y sorprendente, que este texto puede leerse con itinerarios alternativos que él mismo propone, para esta reseña hemos decidido seguir el itinerario clásico para no complicar la comprensión del lector ante un libro complejo y fascinante. El Eje 1 gira en torno al saber en movimiento, uno de los temas queridos por el autor, como ya demostró en su libro sobre literatura en movimiento. Comienza con la idea humboldtiana de la desprovincianización y la conciencia universal, que llevó a Humboldt a convertirse en un teórico de la globalización y la modernidad hasta llegar a su obra culminante del Cosmos, con un gran impacto universal, y a dar una nueva idea del mundo americano tras las famosas discusiones iniciadas por el conde de Buffon, Cornelius de Pauw, William Robertson, Thomas Raynal, etc., en torno a la inferioridad del Nuevo Mundo, que estudió en su día Antonello Gerbi. Ette describe magistralmente la idea de Humboldt y su pensamiento pluridisciplinar en torno a las fuerzas interactivas en la naturaleza, su pensamiento sobre la creación y circulación del conocimiento, tan de moda en la actualidad desde la presentación de los trabajos de Kapil Raj, así como su vocación cosmopolita, muy apreciable hoy en día y a veces incomprendida desde las visiones nacionalistas más cerradas. En este sentido, hay que compartir la afirmación de Ottmar Ette de que Alexander von Humboldt y su ciencia (llamada humboldtiana) son en cierta medida precursores de los estudios en red, que nos parecen tan contemporáneos. Leia Mais

Impresiones de China: Europa y el englobamiento del mundo (siglos XVI-XVII)

Impresiones de China trata un tema ancho y clásico: cómo se configuró el imaginario oriental en la cultura europea entre 1550 y 1680, y en concreto, el relativo al Imperio del Centro. En aquel encuentro Europa descubrió progresivamente la lejana China, conforme sus actores ─misioneros, comerciantes, historiógrafos─ ensancharon los límites del mundo conocido. Su autora es la prestigiosa historiadora Antonella Romano, directora de estudios en el Centro Alexandre Koyré, EHSS (París), y una de las mejores conocedoras de la historia de las ciencias y los conocimientos misioneros durante la Edad Moderna. Con esta cuidada traducción al castellano de Alicia Martorell ─siempre difícil en este tipo de estudios histórico-científicos─, Marcial Pons acerca al lector hispanohablante un estudio fundamental para el conocimiento de las relaciones entre Asia y Europa, esta vez, desde el enfoque de la construcción de los saberes.

Como comenta Romano en la introducción de su libro, la existencia de China ya era conocida en Europa mucho antes de que los comerciantes portugueses o los misioneros jesuitas comenzaran sus actividades en Asia Oriental. Gracias a la continuidad geográfica del continente euroasiático, las poblaciones europeas tuvieron noticias de la lejana y mítica Catay a través del testimonio de viajeros como Marco Polo. Sin embargo, la llegada de comerciantes y los misioneros ibéricos durante los ss. XVI y XVII produjo un auténtico proceso de descubrimiento del Imperio del Centro, cuya imagen fue emergiendo y ocupando un lugar cada vez más destacado en las letras europeas. En el discurso que nos ofrece la autora, descubrir este lejano lugar significó para Europa ir más allá de los meros esbozos de conocimiento para pasar a reconocerla sobre el terreno e integrarla en sus saberes: en otras palabras, fue pasar de Catay a ‹‹la China››. Leia Mais

Os impérios ibéricos e a globalização da Europa (séculos XV a XVII) | BartoloméYun Casalilla

1 El autor, que desde hace varias décadas ha investigado sobre la historia del Imperio español, aborda ahora una comparación entre los dos primeros poderes globales: los imperios español y portugués. El libro está basado en ideas expuestas en su Marte contra Minerva (Madrid: Crítica, 2004), a las que se añaden discusiones teóricas más recientes. Esta edición en portugués es una traducción de una versión en inglés publicada en 2019. Esta historia global de los imperios ibéricos gira en torno a tres temas principales: (i) una evaluación de la leyenda negra; (ii) una crítica de recientes explicaciones neoinstitucionales; (3) la globalización vista desde los mundos ibéricos. Estos tres temas guían al autor en su interpretación del ascenso de los estados ibéricos a la preeminencia global, y las consecuencias que este proceso desencadenó en los equilibrios domésticos. El autor examina algunas narrativas que atribuyen a España y Portugal una imagen de atraso económico. Además, busca explicar el ascenso de las potencias ibéricas no como casos excepcionales, sino como vías alternativas a la modernidad. En esta línea, Yun ofrece explicaciones alternativas sobre los procesos de construcción del Estado desde la perspectiva del sur de Europa. Leia Mais

O Brasil resiliente: estímulos criativos para sua reconstrução | Manoel José de Miranda Neto

Manoel José de Miranda Neto – membro do Instituto Histórico Brasileiro, do Instituto Histórico e Geográfico do Rio de Janeiro, do Instituto Histórico e Geográfico do Pará, da Academia Paraense de Letras e da Academia Paraense de Jornalismo, participante ativo de Congressos e Seminários sobre “Globalização, Cidadania e Qualidade de Vida” e autor de renomados livros de pesquisa histórica, como por exemplo, o conceituado A Utopia Possível: Missões Jesuíticas e seu suporte econômico-ecológico, publicado em Brasília, pela Funag, em 2012 – traz à luz neste ano de 2021 seu último trabalho de fôlego: O Brasil Resiliente. Estímulos criativos para sua reconstrução.

A obra em tela possui 332 páginas, dividida em três partes temáticas: I – Colonização Séculos XVI e XVII; II – Consolidação Séculos XVIII e XIX; III – Globalização Séculos XX e XXI. As seções temáticas são desenvolvidas em treze capítulos cronologicamente contextualizados e enriquecidos com notas explicativas que remetem às referências bibliográficas completas. O autor apresenta, também, os Créditos das Ilustrações e as instituições basilares da documentação pesquisada – Arquivos, Fundações, Institutos Históricos – abrindo caminho epistemológico para futuras pesquisas e orientações para outros pesquisadores. Leia Mais

Histórias(s) do presente. Os mundos que o passado nos deixou | Miguel Bandeira Jerónimo e José Pedro Monteiro

Logo no início de Histórias(s) do Presente. Os mundos que o passado nos deixou, Miguel Bandeira Jerónimo e José Pedro Monteiro, ambos investigadores do Centro de Estudos Sociais da Universidade de Coimbra, deixam claro que “o cepticismo é uma forma sã de viver cívico, não apenas um inabalável princípio científico”. Na introdução do livro, os autores interrogam o passado e procuram pistas para interpretar com rigor a atualidade, observando que “o conhecimento da história não é um elixir contra a maldade ou contra o desvario” (JERÓNIMO; MONTEIRO, 2020, p. 12). A dinâmica, observam, vai mesmo em sentido contrário, já que os usos da história serviram quase sempre “propósitos bem pouco edificantes”. A atestá-lo, está o facto de o conhecimento não impedir o ódio. Dessa forma, induzir dúvidas onde só parece haver certezas, como propõem na Introdução da obra, será já uma tarefa e tanto (JERÓNIMO; MONTEIRO, 2020, p. 12).

O livro agrupa, numa versão atualizada, a série de trabalhos dados à estampa no jornal diário português Público, em 2017 e 2018, (12 ensaios e 12 entrevistas a reputados especialistas internacionais) sobre eventos e processos históricos que marcaram o nosso passado, e sobre os legados que nos deixaram. Neste rol, encontram-se quase todos os assuntos que preenchem a atualidade informativa de há anos a esta parte: a crise dos refugiados, o racismo, a globalização, os nacionalismos, os usos dos véus, as fake news, os abusos da história. Através da exploração das histórias plurais saídas dos campos de concentração, da emergência de um discurso dos direitos humanos ou das políticas do medo e da histeria coletiva organizada, hoje tão presentes, convida-se o leitor a tentar perceber como se chegou até aqui, propondo-lhe um olhar do que aconteceu de forma a poder imaginar-se um futuro melhor. Leia Mais

América y otros mundos. Itinerarios particulares y vínculos globales em la Edad Moderna (siglos XVI-XVIII) | Trashumante – Revista Americana de Historia Social | 2020

En las últimas décadas la historiografía ha intentado concretar enfoques trasnacionales, asumiendo que la comprensión de los procesos históricos requiere de una amplitud de miras incompatible con las demarcaciones geográficas, cronológicas y temáticas administradas desde esquemas nacionales. Asimismo, la complejidad en la construcción y exploración de nuevos objetos de conocimiento histórico ha conllevado la necesidad de ampliar las formas de estudiar el pasado. Por una parte, resulta necesario trascender los compartimentos estancos en que la historiografía especializó la disciplina durante el siglo XX. Fenómenos como la circulación de personas, de objetos, de saberes y valores imbrican aspectos sociales, políticos, culturales, económicos que no pueden soslayarse siempre que se busque comprender los fenómenos en su integridad. Por otra parte, las herramientas de la historia y su método de trabajo solo pueden alcanzar mayores cotas de análisis y reflexión si se emplean en diálogo con otros lenguajes, otras disciplinas. Leia Mais

African Thought in Comparative Perspective – MAZRUI (HU)

MAZRUI, Ali. African Thought in Comparative Perspective. Cambridge, Cambridge Scholars Publishing, 2013. 369 p. OLIVEIRA, Silvia. Pensamento africano em perspectiva comparada. História Unisinos, 23(3):475-477, Setembro/Dezembro 2019.

Assente no profissionalismo e na crítica científica, a presente obra traz a público, num único volume, uma coletânea de artigos publicados por Ali Mazrui ao longo da sua carreira, onde apresenta não só os resultados das suas pesquisas enquanto historiador, pesquisador, professor, analista e cientista político, mas igualmente as suas ideias e convicções enquanto cidadão africano, como o mesmo faz questão de se identificar. Apesar de ser pouco abordado no espaço lusófono, a sua experiência, o seu intelecto, o seu carisma, a sua defesa do pan-africanismo e a sua dedicação à causa africana fazem dele um “dos mais prolíficos escritores africanos do nosso tempo” (p. xi), assim como uma referência na produção de conhecimento sobre África, nas suas múltiplas dimensões, com destaque para a pesquisa sobre o Islão e os estudos pós-coloniais.

African Thought é um livro realista e, ao mesmo tempo, apaixonante na medida em que, ao lermos, vemos o cenário de África ser descortinado, ampliando, desse modo, a compreensão do leitor em relação ao continente e aos africanos, de um modo geral, mostrando igualmente que, ao contrário da “irrelevância histórica para a qual foi relegado” (Mazrui, 2013, p. 10), este é detentor de um “repertório intelectual riquíssimo” (Mazrui, 2013, p. XII) que precisa de ser explorado, compreendido, explicado e valorizado. A riqueza das temáticas abordadas e analisadas, que vão desde o “legado dos movimentos de libertação, a convergência e a divergência africana, o pensamento islâmico e ocidental, ideologias nacionalistas, o papel da religião na política africana e o impacto da filosofia clássica grega na contemporaneidade” (Mazrui, 2013, p. XI), visa precisamente cumprir estes pressupostos. Dada a complexidade do objeto de estudo, os editores organizaram este volume em cinco secções autónomas, cada uma delas dividida em capítulos.

A primeira secção – Africanidade comparada: identidade e intelecto – apresenta as teorias e os preconceitos “meio-diabólicos” (Mazrui, 2013, p. 4) que alimentaram, durante séculos, a exploração e a colonização do continente e dos africanos, caracterizados como “crianças imaturas” (Mazrui, 2013, p. 5), “pré-históricos” (Mazrui, 2013, p. 8), “cultural e geneticamente retardados” (Mazrui, 2013, p. 10), posicionados como os menos civilizados na escala evolutiva estabelecida pelo próprio ocidente, catalogações que serviram de pretexto e justificativa para o tráfico de escravos e alimentaram ideias e teorias como o darwinismo social e as conhecidas teorias da modernização e da dependência. Segue-se uma abordagem sobre a legitimação e reconhecimento da filosofia africana enquanto fonte de sabedoria, sendo identificadas três escolas filosóficas, nomeadamente a) escola cultural, também conhecida como etnofilosofia, que assenta na tradição oral e é classificada pelo autor como uma escola de massas, abrangendo os períodos pré-colonial, colonial e pós-colonial; b) ideológica, que reúne as ideias dos ativistas políticos e seus líderes, abrangendo sobretudo o período colonial e pós-colonial, cuja caraterística principal passa pela utilização das línguas ocidentais, sendo por isso considerada mais elitista; c) crítica ou racionalista, composta essencialmente pelos filósofos académicos, enquadrados nas universidades.

Posteriormente, Mazrui identifica as cinco maiores tradições do pensamento político em África, nomeadamente, a) conservadora, ou solidariedade tribal, assente na continuidade (da tradição) em detrimento da mudança. Esta engloba três subtradições: the elder tradition (o respeito pelos mais velhos), the warrior tradition (a tradição dos guerreiros) e the sage tradition (a sabedoria); b) nacionalista, que surge parcialmente como resposta à arrogância da colonização branca, podendo assumir diferentes dimensões, nomeadamente, nacionalismo linguístico, religioso, rácico, pan-africanismo, etnicidade (unidade tribal), nacionalismo civilizacional; c) liberal-capitalista, com ênfase no individualismo económico, na iniciativa privada, assim como na liberdade civil; d) socialista, e) internacional ou não alinhamento. O autor salienta ainda o papel e a importância da memória coletiva identificando, para o efeito, quatro funções da mesma, nomeadamente: preservação, seleção, eliminação e invenção, bem como a questão dos arquivos africanos que assentam sobretudo na tradição oral.

Ao alertar para a necessidade de compreensão e distinção entre relativismo histórico (diferença entre épocas históricas) e relativismo cultural (diferença em termos de valores entre sociedades) no início da segunda secção, o autor introduz a temática sobre a presença do Islão no mundo e em África, constituindo este, a par da africanidade e da influência ocidental, uma das suas heranças, denominada pelo autor de triple heritage (tripla herança). Posteriormente, Mazrui apresenta a sua teoria sobre a existência de cinco níveis de pan-africanismo: 1) Subsariano, que congrega a união dos povos negros ao sul do Sara; 2) Trans-Subsariano, a unidade do continente como um todo, tanto ao norte como ao sul do Sara; 3) Transatlântico, que engloba igualmente a sua diáspora pelo mundo; 4) Hemisfério Ocidental, união dos povos descendentes de africanos e que se encontram no ocidente; 5) Global, a conexão de todos os negros e africanos pelo mundo. É feita ainda referência à Negritude como movimento cultural, no qual o autor distingue duas categorias, nomeadamente: a literária, que inclui não só a literatura criativa, mas igualmente aspetos da esfera política e social, e a antropológica que corresponde a um estudo romantizado de uma comunidade tribal africana por um etnógrafo africano.

É a partir da filosofia e da construção do conhecimento que Mazrui reflete sobre a influência que a filosofia ocidental exerce(u) sobre os africanos, sobretudo sobre os nacionalistas. Composta por seis capítulos, a terceira secção é dedicada à construção do nacionalismo africano e às suas diferentes manifestações. O autor defende que a herança greco-romana foi utilizada pelo ocidente com propósitos sombrios, servindo como justificação para a colonização, sendo o exemplo belga na República Democrática do Congo (RDC) o mais pragmático de todos. Assim sendo, o autor defende que a Negritude não é mais do que “a resposta do homem negro à mística greco-romana” (Mazrui, 2013,p. 146). Mas é igualmente essa mesma filosofia que influencia o pensamento africano, em particular os nacionalistas, tornando-se eles próprios, de certa maneira, filósofos, ao beberem e defenderem, posteriormente, as teorias de Hobbes, Rousseau e Lénin, entre outros autores, que estarão na base da luta pela igualdade e libertação do continente, constituindo por isso três formas de resistência, nomeadamente, 1) tradição guerreira: assente na cultura indígena; 2) resistência passiva: técnica utilizada por Gandhi; 3) revolução marxista, tendo como exemplo os casos das ex-colónias portuguesas, nomeadamente, Angola, Guiné-Bissau e Moçambique.

No entanto, a luta não se circunscreveu às fronteiras do continente, sendo que a diáspora também arregaçou as mangas e deu o seu contributo; exemplos dessa luta são Frederick Douglas e Du Bois. Outros aspetos igualmente importantes para a compreensão da dinâmica política contemporânea do continente prendem-se com a questão do religioso, da tradição, da cultura e, consequentemente, da ética, na análise dessas temáticas. E o autor chama a atenção para a sua importância na quarta secção, a mais curta de todas as secções. De uma forma bastante simples, porém, completa, são-nos apresentadas as características do religioso em África, nomeadamente, a) étnicas, b) não expansionistas, c) universalistas, d) ausência das sagradas escrituras, tendo como base a tradição oral, e) língua nacional, f) não separação dos assuntos terrenos e espirituais, ou seja, não se assentam na fé. Outras peculiaridades culturais que fazem do continente aquilo que ele é, como o casamento, os casamentos inter-raciais, a poligamia, entre outras, são igualmente analisadas por Mazrui, que alerta para a exercem no quotidiano dos africanos ainda na contemporaneidade e pelo fato de nos ajudarem a perceber a atual situação do continente, funcionando igualmente como pressupostos de análise do pós-colonial.

Nos seis capítulos que compõem os Ensaios Conclusivos, o autor traz a debate temáticas mais contemporâneas, que têm levado a uma continuidade da ideia periférica que se construiu e se continua a construir sobre o continente, nomeadamente, pós-colonialismo, multiculturalismo, modernidade, democracia, globalização, entre outras. Ao alertar para a necessidade de pensarmos e debatermos o pós-colonial ou o que “Said chamou de orientalismo e Mudimbe chamou otherness” (Mazrui, 2013, p. 287), Mazrui relembra a tripla herança africana e aponta para os diferentes instrumentos de que o ocidente tem feito uso para manipular o discurso que vai contra a visão do mundo implantada pelo próprio ocidente, monopolizando e perpetuando, deste modo, os seus próprios paradigmas em relação ao “Outro” (Mazrui, 2013, p. 288), numa tentativa de continuar a dominar, mostrando a sua supremacia, da qual a globalização se apresenta como o exemplo mais flagrante.

Apesar da obra estar disponível apenas em língua inglesa, o que constitui uma condicionante para os não falantes dessa língua, não podemos deixar de realçar que, pela riqueza de informações e pela crítica científica que serve de base para a sua análise, estamos em presença de material de consulta obrigatória para qualquer ramo do saber, não só direcionado para a área dos estudos sobre África, mas igualmente sobre a temática da produção do conhecimento sobre o pós-colonial, numa perspetiva macro. Com efeito, uma das suas inovações é precisamente a transdisciplinaridade do autor na análise dos diferentes temas com destaque para a sistematização teórica do pensamento político africano, a sociedade africana, filosofia, multiculturalismo, globalização, bem como a visão global que emprega nessa análise, levantando mais questões do que dando respostas às interrogações iniciais. Por outro lado, a sua riqueza bibliográfica dá-nos igualmente pistas para futuras leituras e pesquisas sobre as diferentes temáticas, alimentando desse modo o debate científico e abrindo caminhos futuros de pesquisa.

Pela sua importância, não podemos igualmente deixar de referir aspetos que a podem fragilizar, como o fato do autor não aprofundar o debate sobre a responsabilidade das elites africanas pela atual situação em que se encontra o continente, as falhas no processo de construção da democracia, assim como em relação à realidade que enfrentam os africanos na contemporaneidade, os desafios e expectativas em relação ao futuro. Talvez seja esse o propósito, ou seja, despertar em cada um dos leitores outras interrogações que conduzam à produção de mais conhecimento sobre o continente, desmistificando, deste modo, a ideia preconcebida e obscura que se foi construindo ao longo dos séculos.

Notas

2 A partir dessa parte da resenha, os trechos em itálico são grifos presentes no livro.

Silvia Oliveira – Universidade Estadual Paulista (UNESP), campus de Assis, Avenida Dom Antonio, 2100 – Parque Universitário, 19.806-900 Assis, São Paulo, Brasil. Bolsista da Fundação de Amparo à Pesquisa do Estado de São Paulo (FAPESP). E-mail: slviadeoliveira9@gmail.com.

L’età del disordine. Storia del mondo attuale 1968-2017 – DETTI; GOZZINI (BC)

DETTI, T.; GOZZINI, G. L’età del disordine. Storia del mondo attuale 1968-2017. Bari-Roma: Laterza, 2018. 210p. Resenha de: PERILLO, Ernesto. Il Bollettino di Clio, n.11/12, p.190-192, giu./nov., 2019.

Cinque anni nel cuore del Novecento trasformano il XX secolo: dal 1968 al 1973 si manifestano o accelerano in modo significativo mutamenti strutturali che, spesso in modo graduale e in parte inavvertito, danno forma al mondo attuale. Questa è la tesi dei due autori: in quegli anni si sono poste le radici di uno stravolgimento economico, sociale e culturale che ha generato un grande disordine planetario, vissuto spesso con ansia e paura; una congiuntura che richiede l’elaborazione di coordinate orientative, al fine di affrontare le sfide globali che ci sovrastano: migrazioni, disuguaglianze, clima, finanza, povertà.

Lo shock petrolifero del ’73 pone per la prima volta in modo drammatico l’Occcidente di fronte al problema delle fonti di energia; il ciclo economico innescato determina un lungo periodo di stagnazione e di inflazione, accelerando processi ancora in atto. La globalizzazione acutizza fenomeni capaci di trasformare radicalmente gli equilibri mondiali. È l’”incubo dei nostri tempi”? Forse sì, se pensiamo alla finanza, quella “bolla di carta” sempre più svincolata e distante dalla ricchezza tangibile. Ma la globalizzazione, scrivono Detti e Gozzini, non è un complotto, è l’insieme dei movimenti internazionali di merci, persone, capitali e informazioni ed è tanto velleitario pensare di annullarla quanto necessario provare a controllarla. Certamente, tra le sue conseguenze ci sono l’approfondirsi del dislivello di ricchezza tra le parti del mondo industrializzato e le altre, così come disoccupazione e sotto-occupazione nei Paesi ricchi, migrazioni, sfruttamento incontrollato e distruzione dell’ambiente in quelli poveri. Tuttavia, i dati evidenziano che è condizione necessaria, anche se non sufficiente, per un possibile processo di convergenza. Riforme agrarie, scolarizzazione di massa, qualificazione, innovazione tecnologica hanno una forte potenzialità nell’aumento del reddito e nell’uscita dalla povertà: in Asia le grandi carestie sono state sconfitte; dal 1980 in poi i poveri di tutto il mondo sono considerevolmente calati. Permangono, però, forti fragilità nell’Africa subsahariana ed equilibri instabili sul piano sociale ed economico sia all’interno di un Paese, sia fra Paesi diversi. Ne sono emergenze ben visibili le tragedie umanitarie del Terzo mondo, la povertà persistente fra gli anziani e nelle famiglie numerose dell’Occidente avanzato, ma anche quel mutamento antropologico, indotto dai media e dai consumi, che si manifesta nell’individualismo acquisitivo di massa e nel prevalere delle ragioni della libertà economica sulla giustizia.

Nel ’68 si accesero i riflettori internazionali sulla prima grande crisi umanitaria nella regione nigeriana del Biafra, a seguito di una guerra civile. Migrazioni, carestie e profughi si sono drammaticamente replicati con andamento altalenante: segno che la politica e la diplomazia possono fare molto per contenerli e per indirizzare verso la pace, ma anche che raramente questa volontà si manifesta in maniera concorde nelle nazioni più potenti.

Le migrazioni sono, infatti, attualmente uno dei maggiori fattori di ‘disordine’ mondiale. Certo, è difficile e fuorviante accordare le tendenze demografiche con i tempi brevi dei cambiamenti economici e politici. Tuttavia, le legislazioni restrittive adottate l’indomani della crisi petrolifera del 1973, finalizzate a fornire risposte a un’opinione pubblica spaventata dalla recessione, hanno inciso sulle caratteristiche e sulla visione pubblica del fenomeno: da arrivo favorito dal bisogno di forza lavoro cento anni fa, a viaggi di fortuna e ingressi illegali e osteggiati, spesso sostenuti dalla delinquenza organizzata. L’andamento ondulatorio dei flussi è un segno che le crisi si possono limitare, se sono coordinate sul piano internazionale e se si elabora la complessità economica e sociale del problema: “Abbiamo di fronte esseri umani non interessati a prendere le nostre terre, ma alla ricerca di un futuro migliore. Ci si può intendere, basta che ci sia una politica con l’intento di farlo”.

Il quinquennio 1968-1973 si apre con un ciclo di mobilitazioni studentesche che, per la prima volta nella storia, assume una dimensione globale; una massa critica di giovani con aspirazioni e speranze molto maggiori di quelle dei genitori si scontra con una realtà che non corrisponde alle loro aspettative: società tradizionalista, strutture universitarie inadeguate, docenti distaccati e retrogradi. I loro sogni spesso si frantumano, ma nello stesso tempo si affermano due processi nuovi correlati: il potenziamento dei media, ancorché inegualmente distribuiti, tendenzialmente al servizio del potere e generatori di conformismo, ma dotati di dirompente potenzialità: “Ci furono foto pubblicate sui giornali che contribuirono a cambiare la storia”; la svolta sui diritti sociali e civili delle donne: sale percentualmente in modo significativo l’occupazione femminile, aumenta l’impiego in settori qualificati, crescono le iscrizioni all’Università. Negli anni Settanta, gli stessi movimenti rivendicano la parità ma chiedono il riconoscimento della differenza tra uomini e donne e la valorizzazione delle specificità. Si avvia così l’elaborazione del concetto di gender, una categoria interpretativa che supera il determinismo biologico di quella di sesso e privilegia gli aspetti sociali e culturali, storicamente variabili nello spazio e nel tempo.

Altri processi toccano il sistema politico democratico. Si afferma, in quegli anni, una forte proliferazione del numero degli Stati, ma si ridimensiona la loro sovranità a seguito dell’avvento di una governance sovranazionale. La speranza che il nuovo sistema riesca ad assicurare definitivamente una diffusione della democrazia, però, si rivela presto un’illusione: la democrazia appare un processo evolutivo, conflittuale e reversibile. Ne sono testimonianza i golpe in Uruguay e Cile, lo stato d’emergenza in India, la primavera di Praga, la rivoluzione dei garofani in Portogallo. Ma lo spirito dei tempi sembra decisamente a suo favore: molti regimi autoritari si rivelano incapaci di legittimarsi come modelli alternativi e migliori. Altrettanto lacerata è l’area mediorientale, dove, a seguito dello shock petrolifero del ’73 che rilancia il ruolo di alcuni Paesi esportatori di petrolio (in particolare l’Arabia Saudita), ha inizio un’era islamista. Nel difficile contesto della decolonizzazione, emergono gravi contraddizioni e si radica il fondamentalismo; l’11 settembre 2001 aprirà lo scenario a una serie di prolungati conflitti nel mondo musulmano, incapace di garantire benessere e libertà, che dimostrano quanto sia difficile la transizione di queste società alla democrazia.

Globalizzazione, disordine, democrazia: la dialettica fra i tre termini lancia numerosi spunti di riflessione e costituisce una buona base di partenza per comprendere il nostro tempo. Certo – scrivono Detti e Gozzini – la globalizzazione contemporanea non è molto diversa da quella di cento anni fa, quando movimenti umani, di merci e informazioni si spostavano in misure altrettanto consistenti. Allora la politica la fermò con i nazionalismi e due guerre mondiali, al prezzo di settanta milioni di morti. Per non ripercorrere quella strada c’è bisogno di una nuova politica che non ceda.

Enrica Dondero Acessar publicação original

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21 lecciones para el siglo xxi – HARARI (I-DCSGH)

HARARI, Y.N. 21 lecciones para el siglo xxi. Barcelona: Debate, 2018. Resenha de: OCHOA PELÁEZ, Vanessa. Íber – Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia, n.94, p.83-84, jan. 2019.

21 lecciones para el siglo xxi nos revela los principales agentes que están hoy presentes en el tablero de juego de nuestra sociedad global, con objeto de poder plantear así los problemas a los que el género humano nos enfrentaremos a lo largo de este milenio, y que nosotros mismos estamos creando.

Yuval Noah Harari (Israel, 1976) consiguió un gran número de lectores y lectoras con sus dos anteriores libros: Sapiens, un relato sobre la historia de la humanidad, y Homo Deus, que nos transporta a nuestro futuro como especie. En esta ocasión, sin embargo, Harari nos invita a conocer el presente con el fin de vislumbrar hacia dónde nos dirigimos en el porvenir más cercano.

La obra se divide en veintiún capítulos, y en ellos se exponen las diversas problemáticas planetarias a las que habrá de hacer frente la comunidad global: trabajo, religión, justicia o terrorismo, entre otras. Buena parte de estos capítulos son ensayos filosóficos acerca de algunas de las cuestiones más preocupantes hacia las que nos aproximamos, como el uso de la inteligencia artificial, el auge de los nacionalismos o el papel de la religión hoy en día. Al respecto, el propio autor refiere que esta obra es fruto de diferentes ensayos y artículos que ha ido publicando en otros medios, «en respuesta a preguntas que le dirigieron los lectores, periodistas o colegas».

Resalta su forma de reflexionar: a partir de los datos históricos analiza cómo se comportó con anterioridad el ser humano en distintas épocas, a fin de inferir así unas predicciones concluyentes, un método historiográfico en el que se percibe el eco de los estudios de historia que cursó en la Universidad de Oxford.

La sinceridad tiñe todo el texto. Así, el autor no duda en sacar a colación aspectos de su vida personal y reflexionar acerca de los dogmas recibidos durante su propia educación. No obstante, Harari es capaz de distanciarse de este fondo subjetivo, recapacitar y someterlo a crítica, objetivando tales problemas.

La portada del libro –un ojo que todo lo ve– nos sugiere la visión tiránica del Gran Hermano de la novela 1984 de George Orwell, un modelo de totalitarismo al que quizá poco a poco nos dirigimos.

Al igual que en esta famosa ficción, está en juego perder nuestro libre albedrío, sobre todo a causa de factores como la «tecnología disruptiva». Sin embargo, ese gran ojo también nos invita a ser la mirada de los espectadores que contemplamos el nuevo mundo que estamos implantando.

Para ello, el autor propone una única forma de conseguirlo: profundizar en nosotros mismos de forma personal.

Precisamente por ello, los docentes de ciencias sociales debemos prestar un especial interés a las lecciones que Harari nos imparte. Nos corresponde investigar los fenómenos que nos rodean, para poder comprender el mundo. Sobre nuestra profesión recae la responsabilidad de presentar a los estudiantes el medio en el que habitarán: cada uno de ellos recogerá el testigo, y cada uno de ellos habrá de decidir si será o no un constructor de ese nuevo escenario.

Tan relevante es para el autor este cometido que incluso dedica uno de los capítulos a la educación, afirmando que «el cambio es la única constante» y especificando que «las escuelas deberían dedicarse a enseñar las cuatro C: pensamiento crítico, comunicación, colaboración y creatividad», es decir las habilidades de uso general necesarias para la vida cotidiana. Así, este libro nos ayudará a presentar a los estudiantes los problemas a los que se enfrentarán durante sus vidas adultas, los cuales quizá podamos introducir con ayuda de muchas de las metodologías activas ya implantadas en las aulas.

Harari culmina la obra dedicando el último de sus capítulos a la meditación, una práctica muy extendida en la actualidad junto con otras terapias de tercera generación como el mindfulness, muy presentes entre los miembros de Silicon Valley. Al respecto, el autor afirma que medita durante dos horas al día y realiza un retiro de dos meses al año en completo silencio. Y es que, como ya anuncian varios medios de comunicación, entre ellos la BBC, Harari se está convirtiendo «en el gurú involuntario de Silicon Valley».

A través de la meditación, este pensador israelí nos invita a conocernos a nosotros mismos, a considerar el momento presente para poder observar con nitidez cada uno de los acontecimientos que estamos presenciando. No en vano, Harari sostiene que su intención es aportar luz al mundo, pues «la claridad es poder». Está en nuestras manos decidir cómo utilizarla.

Vanessa Ochoa Peláez – E-mail: vaann8a@gmail.com

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What Is Sexual History? | J. Weeks

In 1974, when I announced to my faculty adviser that I intended to do a dissertation on some aspect of the history of homosexuality, the decision represented an act of faith on my part. At that point, there was no “gay history,” the phrase I would have then used among my peers. The year before, I had met Jonathan Ned Katz, who, together with me and a few others in New York, founded the Gay Academic Union as an effort to bring researchers of various sorts together to explore how our skills could be used to support the gay liberation movement. Katz had already written a play, Coming Out!, whose script was drawn entirely from documents he had discovered related to the history of homosexuality in the United States. He was continuing to pursue that research, and it would culminate in the massive documentary collection, Gay American History, that he published in 1976.1 Gay American History was a groundbreaking—indeed, revolutionary—piece of work. But, to me, still in the early stages of dissertation research, documents that stretched across 350 years of history on a broad range of topics— law, culture, science, social life, and more—did not necessarily demonstrate the feasibility of writing the kind of tightly knit, focused monograph that a history department expected from a graduate student. Leia Mais

Abbiamo ancora bisogno della storia? Il senso del passato nel mondo globalizzato – GRUZINSKI (Nv)

GRUZINSKI, S. Abbiamo ancora bisogno della storia? Il senso del passato nel mondo globalizzato. Milano: Raffaello Cortina, 2016, p. 11. Resenha de: FAZZI, Patrizia. Novecento.org – Didattica dela storia in rete, n.8, febbraio, 2018.

UN INCIPIT STORICO-DIDATTICO: LA DRAMMATIZZAZIONE

Serge Gruzinski, invitato da un docente di storia del Lycée Jean Rostand di Roubaix, la sua città natale situata nella Francia settentrionale, è positivamente colpito dallo spettacolo teatrale messo in scena dagli studenti di età compresa tra i quindici e i sedici anni. I materiali utilizzati sono tratti da una sua precedente opera non concepita a tale scopo: L’Aigle et le Dragon, una ricerca specialistica, che si presenta poco fruibile a livello didattico[2]. Tuttavia due vicende storiche, che si sono sviluppate parallelamente all’inizio del Cinquecento: la conquista del Messico da parte degli spagnoli, l’Aquila, e il tentativo di penetrazione dei portoghesi in Cina, il Dragone, sono scelte per allestire lo spettacolo nel teatro di Pierre-de-Roubaix.
Nell’ambito del curricolare corso di storia di seconda in materia di “Nuovi orizzonti geografici e culturali degli europei in epoca moderna”, rielaborando documenti e carte geografiche, gli studenti hanno messo a confronto le colonizzazioni iberiche: due contesti analoghi quanto ad aggressione da parte dei due imperi europei, ma profondamente diversi quanto a protagonisti, contesti ed esiti. La prima impresa è terminata con l’annessione all’Europa di un’area del mondo da cui è nata l’America latina meticcia, la seconda con la sconfitta della potenza europea da parte dell’impermeabile Cina.

DAL TESTO AL CONTESTO A PARTIRE DA DOMANDE CHIAVE

Nel corso della realizzazione del progetto, gli studenti sono diventati cinesi o aztechi, portoghesi o spagnoli, hanno inventato dialoghi di incontro e scontro tra gli europei e i loro ospiti, progettato scenografie e costumi che hanno consentito loro di prendere gradualmente dimestichezza con altri universi, con storie, società e tradizioni molto diverse tra loro. Un processo di mondializzazione mobilita sempre una pluralità di attori che infrange la dualistica contrapposizione vinti-vincitori e supera lo schematismo dei discorsi sull’alterità, poiché l’orizzonte globale diversifica le posizioni e i confronti. Sollecitati dal docente, i giovani interpreti hanno risposto a domande chiave per collocare le vicende nello spazio e nel tempo: chi sono i cinesi incontrati dai portoghesi che sbarcano a Canton? Chi sono gli indiani che affrontano i castigliani in America? Ma chi si trovano davanti? Con chi si scontrano cinesi e amerindi?
La drammatizzazione si è rivelata, dunque, un efficace incipit per tematizzare le origini della mondializzazione e ha costituito un vero e proprio esempio di narrazione multiforme per educare gli studenti, in maggioranza stranieri in una città dell’antica provincia delle Fiandre francesi, alla scoperta della “cultura mista” attraverso attività di finzione che hanno messo in sintonia tempi apparentemente estranei gli uni agli altri.

SUL DIALOGO FRA PASSATO E PRESENTE

Per dare corpo alla storia nel presente, lo storico francese riconsidera le sovrapposizioni e le contaminazioni nate agli albori dell’età moderna, in una dialettica conflittuale dalle molteplici sfaccettature. Da una parte, si pone in veste critica nei confronti di quelle abitudini accademiche che considera alla base della parcellizzazione delle discipline storiche in settori a compartimenti stagni indeboliti e poco dialoganti, che coinvolgono cerchie di specialisti destinate ad assottigliarsi a mano a mano che ci si allontana dai mondi contemporanei. Dall’altra, nel superare l’eurocentrismo, la prospettiva prevalente per comprendere le storie del passato, non risparmia critiche nei confronti degli studi postcoloniali, poiché il ruolo storico dell’Europa ha costituito quel denominatore comune imprescindibile, seppur controverso e circoscritto nel tempo, per meglio comprendere il mondo globalizzato. Ma come recuperare parti consistenti del passato e opporsi a quell’appiattimento sul presente, esito inevitabile della globalizzazione? Come fare dialogare i passati del nostro pianeta con i suoi presenti sempre più multiculturali e multietnici?

NUOVI PERCORSI TRA LOCALE E GLOBALE

La strada maestra, per rispondere a questi interrogativi, consiste nella ricerca di storie parallele in grado di coniugare “locale e globale”, nell’individuare parentele inaspettate, insolite e singolari. Si può procedere con la ricostruzione di analogie e differenze attraverso fonti poco frequentate o ricorrendo alle molteplici culture della contemporaneità: dalla musica all’arte, dal cinema al teatro, di cui l’autore fornisce una vasta quanto dettagliata disamina. Mettendo in guardia su quelle produzioni dell’industria di intrattenimento, che raramente propongono innovative chiavi di lettura di un mondo globalizzato e cancellano le specificità locali, lo storico si sofferma sui numerosi presenti e sui frammenti accumulatisi nel tempo. Si spazia dai venditori di strada di dvd “piratati” di film asiatici venduti sulle rive del fiume Tapajós a Santarém, seconda città dello Stato di Pará, ai viaggi di scoperta dell’ammiraglio cinese Zheng He, che nel XV secolo tentò di “connettere il mondo”, dai film di Zhang Yimou ai documentari di Aleksandr Sokurov, dalle opere fotografiche dell’artista Kader Attia, che “afferra il presente” dalle antiche rovine di Tazoult, alle opere del brasiliano Carlo Gomes, rappresentate con successo sia a Città del Messico sia nei teatri italiani.
Si tratta in prevalenza di strumenti di comunicazione che possono diffondere buone pratiche, se il docente è in grado di riconoscere il passato “riciclato”, che propone raramente chiavi interpretative, e collega la fascinazione delle immagini del passato alla corretta riflessione storiografica.

ALLA RICERCA DI CONNESSIONI GLOBALI

L’attento lavoro ruota intorno all’ibridazione e al “meticciato”, che costituiscono l’ambito dentro il quale l’autore colloca la specificità dei fenomeni coloniali intesi come processi di scambio, seppur diseguale, di dominio e sopraffazione ma anche di contaminazioni reciproche, che determinano quelle stratificazioni culturali e mescolanza di componenti tali da mettere in discussione ogni forma di idealizzazione o purezza nativista. Nell’agile volume non troviamo dunque movimenti unidirezionali che dall’Europa o dall’Occidente giungono alle periferie del mondo, ma traiettorie più complesse e meno evidenti che si diramano da centri diversi, anche molto distanti tra loro; si reinquadrano storie locali, che costituiscono quell’eredità con cui lo storico è chiamato a confrontarsi, pur nella consapevolezza che una loro ricalibratura non è un’operazione storiografica sufficiente a configurare lato sensu una “storia globale”.
Nell’intento di definire una nuova storia da insegnare nel XXI secolo, si seguono trame narrative nate dalla connessione di diversi punti di vista locali che si confrontano con la pluralità delle realtà globali in una prospettiva di lungo periodo che invita a ricontestualizzare i passati dei popoli che abitano il pianeta.

PER UNA “COSCIENZA-MONDO”

Abbiamo dunque ancora bisogno della storia, secondo Serge Gruzinski, ma di una storia in grado di riconnettere realtà globali e di travalicare quei confini nazionali che troppo spesso la storiografia non ha osato oltrepassare. Le connessioni e i nuovi piani di comparazione storica devono mettere in relazione fatti e problemi, ma da angolature plurime, non a partire da un unico modello eurocentrico come termine di confronto obbligato da cui ricavare permanenze e cambiamenti. È necessario ridimensionare l’eurocentrismo, senza tuttavia limitarsi a una inversione di prospettiva da cui inquadrare la “visione dei vinti”, poiché lo schematismo binario è di fatto riduttivo.
«La globalizzazione, la rivoluzione digitale, lo sgretolarsi della supremazia dell’Occidente, il risveglio dei mondi islamici, il ritorno della Cina, l’affermazione dei nuovi paesi emergenti stanno modificando in modo irreversibile i nostri orizzonti. Senza dimenticare, in contesti a noi più vicini, i processi di ricomposizione delle popolazioni europee, palpabili tanto nelle campagne del Nord Italia e nelle città olandesi quanto nei quartieri fino a qualche tempo fa proletari di Roubaix-Tourcoing[3]».
L’Europa è parte del mondo e si comprende solo tenendo conto del mondo, ricostruendone la complessità e riconoscendo quelle connessioni che delineano la fitta trama tra le diverse parti che lo compongono, seguendo una cronologia che non può essere unica, poiché la sovrapposizione dei tempi crea inevitabilmente discordanze e anacronismi. E la pluralità dei tempi è tanto orizzontale quanto verticale: tempi estranei gli uni agli altri si materializzano, entrano in sintonia e mostrano sul piano locale il corso della globalizzazione.

Note

[2] Gruzinski S., L’Aigle et le Dragon. Démesure européenne et mondialisation au XVIsiècle, Fayard, Paris 2012.

[3] Cfr. Gruzinski S., Abbiamo ancora bisogno della storia?, op. cit., p. 7.

Patrizia Fazzi

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Introduzione alla World History – VANHAUTE (BC)

VANHAUTE, Eric. Introduzione alla World History. Bologna: Il Mulino, 2015. 268p. Resenha de: GUANCI, Enzo. Il Bollettino di Clio, n.5, p.61-63, giu., 2017.

Per segnalare questo bel libro di storia cominceremo dalla fine, dall’ultima pagina. Qui E. Vanhaute conclude la sua chiara illustrazione della world history, affermando che in buona sostanza, con la sua moltitudine di scale e di paradigmi, essa ha l’ambizione di spiegare, dandole un senso, la presenza umana sul pianeta; e lo fa inquadrando la storia dell’umanità in un “contesto sempre più vasto, coordinato e organico”. La parola-chiave è appunto “contesto”. La storia, infatti, viene compresa quando si riesce a coglierne l’essenza e ciò è possibile quando si riesce a guardare gli umani muoversi nel mondo, nel mondo intero. Per secoli così non è stato. Vanhaute, citando Braudel, ricorda che “avendo inventato il mestiere dello storico, l’Europa se n’è avvalsa a proprio vantaggio”, costruendo una storia eurocentrica.

Ancora oggi che disponiamo di un patrimonio di conoscenze sterminato, molto più vasto che nel passato, la storia della non-Europa stenta a farsi, a causa della disparità a favore della civiltà occidentale nella distribuzione di conoscenza.

L’abbandono del modello eurocentrico non significa, però, la ricerca di un altro “centro”. La wh non adotta un’unica scala di spazio e di tempo, da cui far scaturire tutte le altre. Ogni scala ha una sua autonomia, anche se parziale, in quanto interdipendente da tutte le altre. Le società umane, ricorda Vanhaute, sono sempre collegate tra loro per mezzo di una molteplicità di sistemi: sistemi economici, sistemi migratori, sistemi ecologici, sistemi culturali. Mediante analisi comparate dei sistemi e delle loro interconnessioni in un quadro transnazionale si può riuscire a fornire qualche risposta alle domande basilari della wh, che sono:  

In che modo i gruppi delle popolazioni appartenenti a differenti contesti spazio-temporali conseguono obiettivi simili con mezzi diversi (la riproduzione del sé fisico, del lavoro, delle conoscenze e delle scoperte a cui sono giunti, dei modelli sociali e culturali e, infine, della loro società)? Quali fattori (esterni, ossia ecologici; interni, e dunque sociali) producono risultati simili o dissimili?  In che modo le popolazioni sviluppano le loro società? E in che modo i sistemi sociali cambiano in seguito al contatto, all’interazione o al conflitto con altre società? Fino a che punto determinati sistemi sociali convivono fianco a fianco o prendono il sopravvento su altri sistemi?” (p.29).

Tre sono le dimensioni in cui si articolano le scienze umani e sociali: quella spaziale, quella temporale e quella tematica. Tutte e tre sono sempre frutto di scelte culturali: le scale spaziali, le periodizzazioni temporali, le unità di analisi tematiche. A tale proposito vale la pena di ricordare cosa non è (o non è soltanto) la wh. Essa non è:

“una storia universale o totalizzante: la storia di «tutto»;  una storia internazionale: non è solo la storia dei rapporti tra le «nazioni»;  una storia della civiltà (occidentale): è più di una storia dell’ascesa di una civiltà (occidentale);.

la storia del non-Occidente (in precedenza chiamata storia «coloniale» o «d’oltreoceano»: è più di una storia del mondo al di fuori dell’Occidente);  una storia sociale comparata: è più di una storia comparata delle società;  una storia della globalizzazione: il suo campo d’indagine è ben più vasto rispetto a quello della storia della globalizzazione.” (p. 27)

Vanhaute fa bene a sottolineare che le storie “universali” non costituiscono un’invenzione recente, anzi. Le narrazioni storiche che vanno oltre i confini spaziali del proprio paese hanno una lunga tradizione in Cina, Giappone, Asia sudoccidentale, nel mondo islamico, oltre che nella cultura occidentale. Ma sempre la concezione è teleologica: la propria civiltà costituisce il naturale punto di partenza e di arrivo, a dimostrazione della naturale propria superiorità. Le maggiori religioni monoteiste hanno elaborato un proprio specifico mito della creazione, mescolando predestinazione divina, mito e linguaggio simbolico con eventi realmente accaduti, con l’obiettivo di presentare una “verità generale, universale e spesso eterna”.

Vale la pena di ricordare due tra gli esempi riportati da Vanhaute: il De civitate Dei di sant’Agostino, la cui storia teleologica e senza tempo della città dell’uomo e della città di Dio fonda la tradizione dell’historia universalis del cristianesimo e le Storie nelle quali Erodoto cerca e descrive differenze e somiglianze dei popoli non-greci (barbaroi) con i greci.

Da segnalare, infine, la breve cronologia della storia umana proposta dall’autore all’inizio del volume, dopo aver precisato che il computo del tempo, pur rifacendosi al calendario cristiano, utilizza la dicitura “avanti e dopo era volgare”, «a.e.v.» e «d.e.v.», invece di «a.C.» e «d.C.» in quanto più neutra, così come vengono evitate categorie eurocentriche come «antichità», «Medioevo», «Rinascimento», «età moderna»:

Se questa è la scansione temporale delle principali trasformazioni che segnano i periodi della storia dell’umanità a scala mondiale, i temi presentati e sviluppati sono: la trasformazione demografica (un mondo umano), l’ecologia (un mondo naturale), l’alimentazione (un mondo agrario), le sovranità e i poteri (un mondo politico), le culture e le religioni (un mondo divino), l’Occidente e il resto del mondo (un mondo diviso), globalizzazione o globalizzazioni? (un mondo globale), sviluppo e povertà (un mondo diviso), unità e frammentazione (un mondo frammentato).

Sedici pagine di bibliografia e sitografia forniscono indicazioni di studio generale e tematico per una nuova storia dell’umanità.

Enzo Guanci Acessar publicação original

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A águia e o Dragão – Portugueses e Espanhóis na globalização do século XVI | Serge Gruzinski

Velho conhecido dos estudiosos que se dedicam às investigações no campo das mentalidades, o historiador Serge Gruzinski, ratifica o seu interesse pelas sociedades coloniais da América e pelo intenso encontro de culturas que têm lugar neste cenário, e traz à público mais uma instigante análise na qual se debruça sobre as dinâmicas sociais e culturais que se engendraram no contexto da colonização ibérica na América com o seu novo livro, lançado no Brasil em 2015, intitulado A águia e o dragão – ambições europeias e mundialização no século XVI. O historiador francês, caudatário da Escola do Annales, tem alinhado suas pesquisas à uma perspectiva multidisciplinar da História, trabalhando em conjunto com outros campos das ciências humanas, como por exemplo a Antropologia, e incorporando à sua análise não só as fontes escritas, mas também as iconográficas, como podemos constatar em seus últimos volumes publicados, tais como: Les Quatre parties du monde. Histoire d’une mondialisation; Quelle heure est-il là-bas ? Amérique et islam à l’orée des temps modernes; L’Histoire, pour quoi faire ?.

Devemos ainda ressaltar que o seu trabalho critica a concepção eurocêntrica da historiografia tradicional e se ancora na perspectiva da Conected Histories [1], rechaçando qualquer tipo de comparação simplista que se apegue ao local em detrimento do total. Sua tentativa, portanto, seria a de demonstrar a convivência entre as múltiplas realidades sócio-culturais e suas mais variadas dinâmicas de interação, sem perder de vista a relação entre micro e macro. Diante disso, A águia e o dragão, se propõe a entender a inserção dos ibéricos no processo de mundialização, através da análise comparativa entre a atuação do embaixador de Portugal na China do imperador Zhengde e a atuação de Hernan Cortés no México-Tenochtitlan, junto à Montezuma e, portanto, pode ser considerada uma obra vinculada à perspectiva da História Global, já que tenta “juntar as peças do jogo mundial desmembradas pelas historiografias nacionais ou pulverizadas por uma micro-história mal dominada” (p.354).

O livro desvenda os caminhos de portugueses e espanhóis naquilo que o autor chama de “globalização do século XVI”, perscrutando as dinâmicas internas da China e do México no alvorecer do século e analisando como se deu o contato desses povos com os ibéricos. Com efeito, o autor defende que a maneira como os acontecimentos se desencadearam contribuiu, decisivamente, para que fosse fundado o “ocidente euroamericano”, e afirma que embora a presença dos ibéricos nos territórios referidos não tenha sido de fato programada, também não foi ao acaso e deve ser vista como fruto de uma dinâmica comum ao contexto da época, que inseria os reinos na lógica da expansão marítima com vistas na exploração das “molucas”, as conhecidas ilhas de especiarias. Além disso, o autor desmistifica a ideia de que os pioneiros no processo da expansão marítima europeia tenham se lançado rumo ao desconhecido e afirma que, embora houvesse grande confusão nas noções de Ocidente e Oriente, já havia, nessas sociedades, uma certa percepção do espaço marítimo, tanto devido à experiência acumulada com as navegações desde o final do século XV, quanto devido ao conhecimento dos escritos de Marco Polo.

Posto isto, podemos dizer que a tese do autor é a de que o comportamento e as atitudes políticas de Tomé Pires junto ao império de Zenghde, bem como de Hernan Cortés junto ao império de Montezuma, simultaneamente ao posicionamento e contexto das autoridades locais da China e do México, foram determinantes para que o primeiro empreendimento incorresse em fracasso e o segundo tivesse sucesso. Assim, essa conjuntura teria traçado o destino da China e, nesse caso, a falência do projeto colonizador português na área, bem como teria delineado a sorte do Méxicotenochtitlan, que seria dominado e colonizado pelos espanhóis. Portanto, o autor defende que a interação entre esses povos acabou sendo responsável pelo destino que lhes aguardava e que as condições locais que se engendraram a partir desse contato foram responsáveis pelo triunfo ou derrota dos objetivos dominantes, objetivos estes, vale ressaltar, amplamente voltados para o comércio de especiarias. Nesse sentido, para Gruzinski, essas teriam sido as circunstâncias fulcrais que levaram ao processo de interligação dessas partes do mundo – Ásia, América e Europa – através de circuitos comercias que as ligariam intensamente e que marcariam a viragem dos europeus para o Oeste e a fundação do que ele chama de “ocidente euroamericano”.

Nessa perspectiva, o livro em questão se trata de um profundo e estimulante estudo a respeito das características das sociedades chinesa e mexicana do século XVI e da interação do mundo ibério com estas populações. O autor consegue, à medida que vai demonstrando a sua tese, explorar a forma de organização e administração da China e do México, explicando como o contato inicial desses povos com portugueses e espanhóis, respectivamente, foi pacífico e logo descambou para o conflito e o que ele chama de “choque de civilizações”, resultando no domínio e colonização no caso dos mexicas e na resistência e expulsão, no caso dos chineses. Ao percorrer este caminho, o autor consegue esclarecer o processo de decodificação do outro nesse espaço de convivência, afirmando que enquanto os chineses não tinham nenhum interesse em identificar o intruso que para eles se tratava de mais um bando de piratas de nacionalidade desconhecida, os mexicas, por outro lado, tinham urgência em compreender o seu agressor, pois disso dependia, em certa medida, a sua capacidade de resistir.

Em contrapartida, os ibéricos tentavam distinguir o outro para melhor concretizar seus anseios de conquista e, segundo o autor, comprovaram que a falta de conhecimento inicial não se constituía como uma barreira intransponível e, nesse sentido, se esforçavam para se adaptar à língua, ao clima, à alimentação e etc, na tentativa de construir atalhos que facilitassem a compreensão da lógica social e cultural daquelas sociedades. Uma vez que esses aspectos foram mapeados e resultaram na consciência das fraturas políticas do adversário, os ibéricos se aproveitaram deles na tentativa de concretizar o domínio. No México, a identificação das intensas rivalidades entre as cidades devido à falta de unidade política foi decisiva para que o domínio e colonização tivesse sucesso, já na China, o diagnóstico do descontentamento local devido à rigidez do sistema imperial não foi suficiente para que a empreitada ibérica tivesse êxito.

Obviamente, este diagnóstico não se resumia às questões políticas, econômicas e sociais, havia também o espantoso encontro de culturas completamente distintas, que a partir dali iriam se misturar e se modificar simultaneamente. Esse encontro deu margem para que os estranhos mundos se representassem concomitantemente, daí uma série de conhecimentos serão difundidos na Europa acerca dessas civilizações, tanto a chinesa, quanto a mexicana. O autor, ressalta, porém, que enquanto as informações sobre o México são divulgadas desde o início do processo de colonização, aquelas referentes à China só irão se propagar pela Europa a partir de meados do século XVI. Segundo o autor, esse fenômeno poderia ser atribuído, entre outras coisas, ao fato de que a China não era completamente desconhecida por parte dos ibéricos, devido às relações comerciais existentes naquela região, já o México é um mundo completamente novo a se descortinar e causou grande reboliço ao ser descoberto, acabando por motivar imenso fascínio. Os documentos escritos que cumprem o papel de nos dar um retrato daquilo que seriam a China e o México no limiar do século XVI são: a Suma Oriental de Tomé Pires e as cartas de Hernan Cortés.

Segundo o autor, os ibéricos ficaram espantados ao perceberem que, tanto na China quanto no México, os povos contavam com a existência do livro, e isso teria sido determinante para que se moldasse uma imagem positiva na Europa sobre esses povos, já que o livro, para as culturas letradas, é um marcador de civilização. Do outro lado, porém, existe uma notável dificuldade para invocar representações da Europa feitas por estes povos, em primeiro lugar, no caso da China, devido à sua pouca abertura, pela falta de interesse em conhecer o seu inimigo, considerado apenas como um forasteiro. Já no caso do México, mesmo com o grande interesse e curiosidade pelos europeus, por não haver testemunhos escritos de uma visão pessoal do ameríndio, estes, se um dia existiram, não sobreviveram ao tempo.

Dessa maneira, se constituíram as imagens que se firmariam ao longo do tempo como fundadoras daquilo que viriam a ser as civilizações mexica e chinesa. As cartas de Cortés seriam amplamente divulgadas e, segundo o autor, familiarizariam a cristandade com os esplendores do México e com a representação das glórias da conquista, estas serão eternizadas no imaginário universal. Em contrapartida, embora não tenham sido alvo de larga divulgação, a descrição feita por Tomé Pires acerca da China, traz uma visão, de acordo com Gruzinski, mais assertiva a respeito das características dessa sociedade, pois seria um diagnóstico feito do interior dessa sociedade, enquanto que o relato de Cortés seria uma visão panorâmica e, portanto, superficial. Ainda assim, o fato é que mesmo diante de todas estas questões “a epopeia dos conquistadores e o destino fatal do império Asteca continuariam a fascinar, enquanto a descoberta da China dos Ming e o fracasso de Tomé Pires nunca interessaram muita gente” (p.106).

Acreditamos que a obra ultrapassa os limites de sua tese central e acaba por se transformar num manual de história do México e da China, ao qual se pode recorrer para sanar dúvidas pontuais a respeito da organização e administração política, social e cultural dessas sociedades. Nesse sentido, acreditamos que o livro não só cumpre com o seu objetivo precípuo, como também transborda erudição. Para aqueles leitores que não têm grande formação a respeito do Oriente, a quantidade de informações novas pode representar alguma dificuldade, mas com o desenrolar das páginas o leitor passa a se familiarizar com os nomes e os acontecimentos analisados no texto e, ao final da leitura, percebe-se o ganho de uma noção panorâmica acerca das civilizações em questão. O livro consegue ir além da temática do choque cultural entre portugueses/chineses e espanhóis/mexicas e nos leva por outros caminhos dessa história, pelos meandros da organização interna dessas sociedades.

Como não poderia deixar de ser, a obra traz uma discussão bem fundamentada, ancorada, como já afirmamos aqui, nas perspectivas da Connected Histories e da História Global e, assim sendo, rejeita a historiografia tradicional que concebe a Europa como centro do mundo, procurando demonstrar que esse papel protagonista no processo de globalização do século XVI – embora, paradoxalmente, não possa ser negado, visto que foram os ibéricos os atores principais – não se deu simplesmente devido à graça e talento destes homens, mas foi sim, em grande medida, impulsionado e delimitado pelos contextos e dinâmicas que se apresentavam na época. Diante disso ao autor afirma que “a imagem de um avanço inevitável dos europeus, quer se enalteça as suas virtudes heroicas e civilizadoras, quer o votemos ao desprezo, é uma ilusão que teima em persistir. Decorre de uma visão linear e teleológica da História, que continua associada à pena do historiador e ao olhar do seu leitor” (p.40).

Isto posto, vale salientar ainda que, o autor trava diálogo com a historiografia clássica e a mais atualizada, tradicionalmente competente e de referência na temática pertinente à Expansão Ultramarina europeia. Entre os autores com os quais dialoga estão Francisco Bethencourt, Sanjay Subrahmanyam e Charles Boxer. As fontes elencadas permitem demonstrar a sua tese. Ele recorre às cartas e aos relatos de viagem de homens como Cristovão Colombo, Pietro Martire d’Anghiera, Bernal Diaz del Castillo e, obviamente, Hernan Cortés e Tomé Pires, entre outros. Contudo, ao longo do texto, o próprio Gruzinski, deixa claro a deficiência de sua obra no que diz respeito às questões da representação europeia feita pelos indígenas e/ou chineses, afirmando que para tal estudo não existem fontes, pois estas, quando existem, são limitadas pela influência direta do domínio europeu e até da conversão ao cristianismo e, portanto, não exprimem uma visão pessoal a respeito dos ibéricos. Ou, nos demais casos, sequer existem, pois não resistiram ao tempo. Esse obstáculo não prejudica o trabalho, visto que o seu debate central não está circunscrito a esta temática especificamente.

Com efeito, uma outra característica que contribui efetivamente para o alcance dos objetivos do livro, é, sem dúvida a organização de sua estrutura. O autor, opta por uma estrutura que não separe as análises referentes à China, daquelas referentes ao México, pelo contrário, ele dispõe as discussões de maneira a fazer com que o leitor perceba que elas são complementares e a sua visão em separado acarretaria em prejuízo no entendimento total da obra. Os capítulos, por sua vez, são dispostos de modo a guiar o leitor através dos labirintos dessa história, dando-lhe, de maneira impecável, não só a nítida compreensão do argumento defendido pelo autor, mas também um excelente panorama sobre história das culturas chinesa e mexicana. Nesse sentido, não utiliza a conclusão de seu texto para expor sua tese – esta fica evidente ao longo das 373 páginas escritas – mas apenas para ratificar o seu argumento. Dessa maneira, facilita o trabalho do leitor e não abre margens para confusões.

Por último, cumpre dizer que a obra em discussão não está desconectada do tempo e do espaço e encontra lugar na produção historiográfica atual. Sua perspectiva de análise, já discutida aqui, tem notável eco na História que vem sendo desenvolvida desde finais do século passado. Nesse sentido, o autor demonstra sua capacidade de aclimatação e desenvolve um estudo que fortalece seu elo com a História da América Latina, numa análise comparada profunda e densa sobre os aspectos culturais, econômicos e sociais da China imperial e do México-Tenochtitlan, nos dando uma verdadeira lição de como se faz História em tempos de prateleiras abarrotadas de romances históricos acríticos e fantasiosos.

Nota

1. SUBRAHMANYAM, Sanjay. “Connected Histories: Notes towards a Reconfiguration of Early Modern Eurasia”, Modern Asian Studies, v. 31, n. 3, 1997, pp. 735-762.

Duarte Izabel Maria dos Santos – Mestre em História da Arte, Património e Turismo Cultural pela Universidade de Coimbra. Atualmente é doutoranda em História pela Faculdade de Letras da Universidade de Coimbra.


GRUZINSKI, Serge. A águia e o Dragão – Portugueses e Espanhóis na globalização do século XVI. Trad. Pedro Elói. Lisboa: Edições 70, 2015. Resenha de: SANTOS, Duarte Izabel Maria dos. CLIO – Revista de pesquisa histórica. Recife, v.35, n.1, p.296-301, jan./jun. 2017. Acessar publicação original [DR]

 

A invenção da terra | Franco Farinelli

Em capítulos curtos, de forma poética, o geógrafo Franco Farinelli discorre sobre os principais conceitos da ciência geográfica: a forma da Terra, suas medidas, sua representação cartográfica, a paisagem, a economia, a globalização dos territórios e das nacionalidades, o espaço e as redes. O que mais chama a atenção é a forma como realiza essa construção, acompanhando as diversas aproximações humanas e seus discursos a respeito da realidade: mitos, narrativas, literatura de viagens vão sucedendo-se nos diversos momentos da História da Humanidade e, em cada um deles, o conhecimento do real suplanta a necessidade de metáforas para justificar o que não se sabe, chegando-se, com Kant, ao conhecimento científico. Leia Mais

The Fourth Revolution: The Global Race to Reinvent the State | John Micklethwait e Adrian Wooldridge

John Micklethwait and Adrian Wooldridge are categorical: Democracy is at crisis. Governments are overloaded and bloated. The average share of government spending in thirteen rich countries has climbed from 10% at the beginning of the XX century to around 47% nowadays. People have unreal expectations and contradictory demands. To win elections, politicians act irresponsibly by making false promises or by offering more benefits.  The vicious circle is quite clear. The more responsibilities the state assumes, the worse it performs and the angrier people get. And they react with even more demands. The same mechanism that allows democracy to function is leading it to a collapse. By listening to the general public and trying to cope with their expectation of what should be done, politicians are increasing spending, overstretching regulations and turning opposition ever more radical in the process. The combination of state’s inefficiency, political paralysis and people’s dissatisfaction feeds disbelief. For a political system that bases its legitimacy in representation and trust, that’s a very bad sign.

According to the authors, the Western world is living an apparent paradox. The state is on a mission to give people evermore of what they want. Yet, no one seems happier. America has gotten into a fiscal mess. The debt is rising while the government is stuck with gridlocks. Democracy everywhere faces cynicism. No one trusts politicians anymore. Just 17% of Americans say they trust the federal government and Congress has only 10% of approval rating. By contrast, 85% of the Chinese people approve their government’s decisions. Europe is also in trouble. As predicted by Milton Friedman, the monetary union is leading to political disunion. European Union accounts for 7% of the world’s population and 50% of its social spending. The moderates’ inability to solve problems is making the extremists gain popularity. Besides all, demography is against everybody. The aging of the populations will be an additional weight on overloaded societies. In short, the welfare fantasy is coming to an end and the state is going to start to take things away. Leia Mais

Atlantic Ports and the First Globalisation, c.1857-1929 – BOSA (LH)

BOSA, Miguel Suárez  (Cord.). Atlantic Ports and the First Globalisation, c.1857-1929. Cambrige Imperial and Post-Colonial Studies Series (col.): Palgrave MacMillan, 2014. pp.203. Resenha de: FERNANDES, André. Ler História, v.67, p.194-196, 2014.

1 A obra em apreço, coordenada por Miguel Suárez Bosa (Universidade de Las Palmas de Gran Canaria), propôs-se a aprofundar o conhecimento sobre a Primeira Globalização (1857-1929). Em particular sobreas transformações dos portos do Atlântico Sul, no contexto da revolução tecnológica e subsequente expansão do comércio internacional ocorrida na segunda metade do século XIX: a evolução das infra-estruturas portuárias, as características de cada porto, os tráfegos, a administração e a actividade portuária, contam-se entre os vários aspectos analisados. Para o efeito, os nove capítulos que constituem a obra seguem uma abordagem comum que, não descurando as especificidades dos diferentes espaços portuários e dos factores determinantes das suas metamorfoses, nunca perde de vista a sua compreensão no quadro de uma matriz relacional determinada (i) pela organização do sistema económico mundial, (ii) pelo desenvolvimento tecnológico e industrial, e (iii) pelos novos fluxos migratórios e de mercadorias.

2 Com uma particularidade interessante que apela à originalidade da obra. Ao invés do enfoque nos grandes portos metropolitanos, o trabalho debruça-se sobre um conjunto de portos periféricos, a saber: Casablanca (Marrocos), Dakar (Senegal) e Lagos (Nigéria), em África, a que acrescem os portos das Ilhas Canárias e o Porto Grande de S. Vicente (Cabo Verde) nas ilhas da Macaronésia; Santos (Brasil) e La Guaira (Venezuela) na América do Sul; e, o porto caribenho de Havana (Cuba).

3 No capítulo introdutório, Miguel Suárez Bosa procede à contextualização e sistematização da abordagem adoptada, ensaiando uma proposta de modelo interpretativo dos portos do Atlântico Sul, centrando-se em três dimensões analíticas, transversais aos capítulos subsequentes: as reformas portuárias e a globalização; as transformações tecnológicas; e, os modelos de gestão portuária. Sobre este último aspecto, e pela sua relevância e oportunidade, não é possível deixar de salientar a discussão em torno da adequação das classificações tradicionais de modelos de gestão portuária, assim como da dificuldade destas em captar a complexidade das situações reais. Algo que o autor questiona tendo como suporte os contributos decorrentes dos estudos de caso aprofundados no livro, que colocam em evidência, entre outros factores, o papel dos condicionalismos sociais na escolha do modelo gestão de cada porto.

4 De seguida, Luis Cabrera Armas (Universidade de La Laguna) aborda a evolução funcional dos portos das Ilhas Canárias. Começando por destacar o posicionamento geoestratégico deste território – factor impulsionador da sua constituição como nó fundamental da navegação a vapor e como importante plataforma de articulação intercontinental –, o autor analisa as grandes transformações determinadas pela necessidade de adaptação às modificações tecnológicas no transporte marítimo (com destaque para as fontes de energia, dimensão dos navios e especialização do transporte). Ainda no contexto dos portos das Ilhas da Macaronésia, Ana Prata (Instituto de História Contemporânea da Faculdade de Ciências Sociais e Humanas da Universidade Nova de Lisboa) analisa a actividade portuária no Porto Grande de S. Vicente. Uma análise que para além de correlacionar os ciclos de desenvolvimento e declínio deste porto com a evolução do comércio de carvão, interpreta com grande rigor e detalhe as transformações na actividade portuária que estão subjacentes a este processo.

5 O Capítulo 4, redigido por Miguel Suárez Bosa e Leila Maziane (Universidade Hassan II Mohammedia/Casablanca), transporta o leitor para a África Continental, mais precisamente até ao Porto de Casablanca, aquele que se constituía à data como o principal porto de Marrocos. Neste capítulo, os autores apresentam uma análise detalhada das opções que estiveram subjacentes ao desenvolvimento desta infra-estrutura, debruçando-se ainda sobre a gestão do porto e sobre a actividade portuária, dimensão em que enfatizam, entre outros aspectos: (i) a relação com o seu hinterland, enquanto porta de entrada e de saída de mercadorias e como rótula de articulação modal entre os transportes marítimos e os transportes terrestres; e, (ii) o seu papel enquanto importante entreposto comercial. Ainda em África, Daniel Castillo Hidalgo (Universidade de Las Palmas de Gran Canaria) analisa, no Capítulo 5, o Porto de Dakar, dando particular atenção ao modelo de gestão portuária e ao processo de modernização tecnológica do porto. Abordagem semelhante é aplicada por Ayodeji Olukoju (Universidade de Lagos) ao Porto de Lagos, destacando o seu papel regional alicerçado nas relações estabelecidas com o hinterland através da laguna. Meio que facilitou o transporte de diversos produtos, tais como o óleo de palma ou a borracha.

6 Rumando ao continente americano, Francisco Suárez Viera (Universidade de Las Palmas de Gran Canaria) apresenta-nos o Porto de Havana, “the gate way of Cuba”. A análise desenvolvida pelo autor é estruturada em três partes interconexas: (i) a complexa evolução do porto, entre os finais do século XIX e o princípio do século XX; (ii) a transição e consolidação de Havana como porto de importação-exportação; e, (iii) a história da gestão do porto, com enfoque nas infra-estruturas, serviços e transportes. Mais a Sul, Catalina Banko (Universidade Central da Venezuela) analisa, no Capítulo 8, o Porto de La Guaira, dando particular destaque às mudanças ocorridas na administração portuária e à sua influência nas transformações verificadas no porto. Por fim, no Capítulo 9, Cezar Honorato (Universidade Federal Fluminense) e Luiz Cláudio Ribeiro (Universidade Federal do Espírito Santo) debruçam-se sobre as transformações nas infra-estruturas e na gestão do Porto de Santos, o grande porto de exportação de café do Brasil, aquando do seu processo de emergência e desenvolvimento, entre os finais do século XIX e as vésperas da Primeira Grande Guerra. Uma investigação que não deixa ainda de levar em linha de conta as relações estabelecidas pelo porto com o seu hinterland, suportadas pela acessibilidade ferroviária.

7 Em suma, estamos perante uma obra de grande interesse, que lança um novo olhar, que reinterpreta a partir de uma perspectiva diferenciada, as relações comerciais no Atlântico aquando da primeira globalização, focando primordialmente as transformações funcionais e a gestão portuária num conjunto de portos da periferia. Isto através de um difícil exercício que, captando em profundidade a natureza, características e especificidades de cada porto, não descora a contextualização do seu papel, do seu posicionamento e da sua actividade no quadro da matriz relacional supra enunciada (i.e. organização do sistema económico mundial, desenvolvimento tecnológico e industrial e novos fluxos migratórios e de mercadorias).

André Fernandes – IHC-FCSH/UNL

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Parcerias Estratégicas do Brasil: os significados e as experiências tradicionais | Antônio C. Essa e Henrique A. de Oliveira

Com o advento da globalização e o concomitante processo de expansão das relações internacionais após o término da Guerra Fria, tornou-se imperativo que muitos países revejam suas estratégias de inserção internacional, de modo a universalizá-las e desconcentrá-las de sua base regional. Isso gera uma ampliação do número de parcerias detidas por um país, o que induz à necessidade de evidenciar a relevância de determinados relacionamentos face aos demais, ou seja, de singularizar determinadas parcerias enquanto especialmente relevantes para o cumprimento dos objetivos entendidos como prioritários relativamente à consecução do interesse nacional.

Ganha-se, portanto, cada vez mais espaço no discurso diplomático a utilização, embora ainda de forma vaga e vulgarizada, do conceito de “parcerias estratégicas”. Especialmente no que tange aos estudos sobre os movimentos recentes da política externa brasileira, torna-se mister a necessidade de melhor entender esse conceito, de forma a facilitar a compreensão das prioridades delineadas pela diplomacia brasileira. Leia Mais

China Goes Global: The Partial Power | DAvid Shambaugh

Today’s debate about the future of global order is marked by a near-certainty that China’s economy will overtake that of the United States within the next decade. Most analysts also believe that as a consequence, China will be able to challenge and eventually supplant the US as the global hegemon. We are heading, the story goes, towards a ‘Chinese world’.

David Shambaugh, Director of the China Program at George Washington University, disagrees. He argues that China “has a very long way to go before it becomes – if it ever becomes – a true global power.” According to him, “China will never rule the world.” The reason, according to the author, is not merely economic. The book argues that China lacks close friends or allies, and that China is not normatively integrated into the community of nations. It lacks a military network similar to that of the United States. Furthermore, its reactive foreign policy keep it from taking the initiative, leaving its diplomatic footprint smaller than its economic weight would suggest. Above all, China has no soft power – its cultural products fail to set global trends like that of the United States. Leia Mais

Pensar históricamente en tiempos de globalización – LÓPEZ FACAL et al (I-DCSGH)

LÓPEZ FACAL, R., et al. (coords.). Pensar históricamente en tiempos de globalización. Universidad de Santiago de Compostela Santiago de Compostela, 2011. Resenha de: BARRIGA, Elvira. Íber – Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia, n.73, p.114-116, abr. 2013.

El libro Pensar históricamente en tiempos de globalización son las Actas del I Congreso Internacional sobre Enseñanza de la Historia celebrado en Santiago de Compostela entre el 30 de junio y el 2 de julio de 2010.

Las conferencias y debates, expuestos a lo largo del evento, tenían como objetivo retratar la situación y las transformaciones de la enseñanza y el aprendizaje de la historia por parte de los investigadores y el profesorado del área de ciencias sociales.

La publicación está dividida en dos partes. En la primera, destacan algunos textos de autores extranjeros y españoles: Charles Heimberg (Suiza); Maria Repoussi (Grecia); Stéphane Lévesque (Canadá); F. Javier Merchán Iglesias (España); Gonzalo de Amézola (Argentina), Mostafa Hassani Idrissi (Marruecos) y Verena Radkau García (Alemania). Mientras que en la segunda parte se nos presentan los resúmenes de las comunicaciones, estructuradas en tres secciones diferenciadas: enseñanza y aprendizaje de la historia y las ciencias sociales; experiencias y propuestas para la enseñanza de la historia, y, por último, genealogía, presente y futuro de la enseñanza de la historia.

Para finalizar, la recopilación se complementa con un CD que reúne todas las comunicaciones presentadas con formato pdf en texto completo.

La edición del libro está a cargo de Ramón López Facal, Luis Velasco Martínez, Víctor Santidrián Arias y Xosé Armas Castro. El primero de ellos, profesor titular de didáctica de ciencias sociales en la Universidad de Santiago de Compostela, abre el volumen con el capítulo «Pensar históricamente en España en tiempos de globalización: La investigación e innovación en la enseñanza de la historia». Ramón López Facal pone de manifiesto el desgaste de la enseñanza tradicional en el sistema educativo y la oportunidad de repensar mejoras para alcanzar una nueva sociedad que actualmente está calificada en situación de crisis.

Maria Repoussi inicia su discurso recordando el novedoso resurgir de las investigaciones en las actividades de la didáctica de la historia, y nos señala su veloz progreso en el ámbito teórico y práctico. Para seguir avanzando sugiere la necesidad de aclarar conceptos básicos y no descuidar el cooperar internacionalmente.

El modelo multicultural canadiense es un ejemplo de integración, como se indica. Stéphane Lévesque apunta a la idea de que el alumnado se siente más conectado a la historia cuando ésta es analizada de forma personal e íntima, y se le invita a experimentar mediante la participación, dejando de lado las divisiones lingüísticas, étnicas o culturales.

F. Javier Merchán Iglesias examina las experiencias innovadoras, los cambios desarrollados en el sistema y los métodos empleados para enseñar historia en la etapa 1970-2010. Enlazando con otra de sus aportaciones, nos pone de relieve el uso práctico del libro de texto durante la enseñanza en las aulas de historia. De las propuestas de cambio e innovación se desprende un gran sobreesfuerzo y dificultades para el profesional. El autor nos invita a preguntarnos: «¿Por qué se requiere más esfuerzo, siendo que en otros campos de la actividad humana la innovación contribuye precisamente a facilitar el trabajo?».

Son especialmente significativas las reflexiones de Verena Radkau García sobre cómo ha de responder la enseñanza de la historia al estímulo de la sociedad de la inmigración. La didáctica de la historia alemana se desarrolla tratando de aproximarse a dos objetivos básicos: aprender a manejar «lo ajeno» y ubicarse a sí mismo dentro de una situación de heterogeneidad y diversidad.

De la obra se extraen varias conclusiones, fruto de las conferencias y mesas redondas que tuvieron como objetivo dar respuesta a problemas a partir de las investigaciones e innovaciones en el aula. Por un lado, se contribuye a la organización de la diversidad de trabajos sobre la materia de didáctica de la historia en ámbitos de investigación. Por otro, se identifican las aportaciones más destacadas en metodología y práctica del estudio profundo de esta apasionante materia.

Uno de los temas recurrentes por los autores es el desconocimiento de lo que realmente se realiza en las aulas, a pesar de que los resultados de las investigaciones reflejen que tan sólo un pequeño porcentaje de los docentes llevan a cabo innovaciones en las mismas. Enseñar historia pasa por impartirla desde una perspectiva integradora y renovadora.

Como consecuencia, se nos advierte que debemos estar alerta para evitar que en tiempos de globalización se avance en el camino hacia la historización y universalización de los hechos históricos gratuitos, alejados de un aprendizaje histórico significativo.

En definitiva, el volumen es muy aconsejable ya que nos explica de manera interesante las principales líneas de investigación y debates actuales. A su vez reubica al lector, ya sea investigador o profesional, a afrontar el futuro con los conocimientos necesarios, proporcionando una amplia y detallada bibliografía, con el objetivo de conseguir una nueva y mejor sociedad.

Elvira Barriga

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Atlantic Ports and the First Globalisation, c.1857-1929 | Miguel Suárez Bosa

En este libro se estudia la gestión y gobernanza de los puertos del Atlántico Medio en el periodo llamada Primero Globalización (mediados del siglo XIX-primer tercio del XX). Desde mediados del siglo XIX y principios del XX se construyeron infraestructuras portuarias de notable importancia en el ámbito atlántico, entre ellas destacan los puertos analizados en esta publicación: los insulares de las islas macaronésicas (Las Palmas, en la isla de Gran Canaria, y el de Mindelo en Cabo Verde), los africanos de Casablanca en Marruecos, el de Dakar en Senegal y el de Lagos en Nigeria o los latinoamericanos de La Habana, Río de Janeiro y La Güira. Todos están situados en territorios de la periferia del mundo capitalista, en el denominado Sur Global, concepto que hace referencia a las regiones que participan en la denominada Primera Globalización, aunque en una posición de dependencia de las grandes potencias imperiales del Norte industrializado. Leia Mais

Relações Internacionais e Política Externa do Brasil: a diplomacia brasileira no contexto da globalização | Paulo Roberto de Almeida

O livro “Relações Internacionais e Política Externa Brasileira: a diplomacia brasileira no contexto da globalização” traz uma herança de outros tempos para as pesquisas atuais em política externa. Tanto que, na primeira parte da obra, é apresentado ao leitor o tratamento dado ao estudo das relações internacionais no Brasil, que segundo Almeida, é um campo ainda não totalmente mapeado.

Os anos 1980 foram palco do crescimento notável dos estudos de relações internacionais no Brasil, principalmente, com a criação de vários cursos de graduação nessa área. Porém, no período em que ainda era estudante, Paulo Roberto de Almeida, aprendeu a compreender o meio internacional estudando-o na prática, por conta própria. Como jovem diplomata pôde consolidar essa ampla formação através de sua atuação no exterior. Leia Mais

Constructing patriotism: Teaching History and memories in gobal worlds – CARRETERO (I-DCSGH)

CARRETERO, M. Constructing patriotism: Teaching History and memories in gobal worlds. Charlotte: Information Age Publishing Charlotte (EE.UU.), 2011. Resenha de: MARTÍNEZ, Luis Velasco. Íber – Didáctica de las Ciencias Sociales, Geografía e Historia, n.71, p.114-115, jul., 2012.

Mario Carretero presenta un nuevo libro en el que revisa algunos aspectos ya abordados en su anterior trabajo Documentos de identidad: la construcción de la memoria histórica en un mundo global, editado en Buenos Aires en 2007 por Paidós.

Tras una introducción del catedrático de historia de los movimientos sociales y políticos José Álvarez Junco en la se que nos presenta la utilidad y vigencia historiográfica de la tesis expuestas en el libro, Carretero nos plantea una serie de cuestiones relacionadas con la enseñanza de la historia a lo largo de los últimos siglos, centrándose de manera detallada en los procesos de enseñanza paralelos a los de construcción nacional. Éstos, desde el siglo XIX, ayudaron a forjar la construcción de imaginarios nacionales a partir, entre otras muchas herramientas, de la enseñanza y el aprendizaje de los relatos históricos nacionales configurados durante el siglo XIX como elementos de legitimación política de carácter histórico-organicista.

En su discurso, las relaciones entre historia, memoria y enseñanza serán constantes, planteándole al lector que son campos estrechamente ligados y que conviene analizarlos en conjunto a la hora de intentar abordar los retos que tiene la enseñanza de la historia en un siglo XXI donde los viejos paradigmas deben enfrentarse a un mundo que se encuentra en un proceso constante de globalización y de disolución, más o menos acusada, de algunas de las referencias de identidad adscritas tradicionalmente al proceso de enseñanza de la historia. Un escenario para el que los viejos planteamientos de carácter orgánicohistoricista no parecen tener validez ni utilidad.

Para intentar demostrar como válidos estos planteamientos, Carretero enfrenta su tesis a un estudio de caso múltiple, en el que buscará los contenidos puramente históricos en las formas de enseñar los procesos de construcción nacional propios en Rusia, Estados Unidos, Alemania, Japón, España y México, comparando los seis discursos educativos entre sí, destacando sus diferencias y coincidencias.

A través de esta metodología pretende resolver cuáles son las vías a través de las que el conocimiento histórico es asimilado y entendido por los estudiantes, así como su influencia en la propia identificación de éstos con los imaginarios nacionales, producto del eterno proceso de nacionalización al que son sometidos los individuos a través de múltiples vías. Así, Carretero analiza el papel que el proceso educativo y la enseñanza (reglada y no reglada) de la historia tiene a la hora de construir patriotas y patriotismos en diferentes lugares del mundo.

Cómo colofón, el autor también aborda nuevas visiones de la enseñanza de la historia, y de la propia historia, a las que cita como posibles alternativas frente a los procesos de enseñanza tradicionales.

Nos encontramos con un título especialmente interesante a la hora de abordar las problemáticas actuales relacionadas con los procesos de construcción nacional y de arraigo social de los imaginarios nacionales en sus perspectivas historiográfica y educativa, abordando la temática desde un punto de vista eminentemente práctico e interdisciplinario, recurriendo a una gran variedad bibliográfica dentro de la que destacan autores internacionales adscritos a un amplio elenco de áreas científicas. Quizá de esta universalidad e interdisciplinariedad pueda derivar alguna de las posibles críticas a su trabajo, ya que por esas mismas razones puede que su estudio sea entendido como poco específico a la hora de plantear conclusiones o, siendo muy arriesgados, alternativas reales a algunas de las prácticas expuestas en el libro.

Luis Velasco Martínez

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Capital and the debt trap: learning from cooperatives in the global crisis – SANCHEZ; ROELANTS (NE-C)

SANCHEZ, Claudia; ROELANTS, Bruno. Capital and the debt trap: learning from cooperatives in the global crisis. Hampshire: Palgrave Macmillan, 2011. Resenha de: SINGER, Paul. O capital e a armadilha da dívida. Novos Estudos CEBRAP, São Paulo, n.93, Jul, 2012.

Em Capital and the debt trap: learning from cooperatives in the global crisis, Claudia Sanchez e Bruno Roelants analisam a transformação que o capitalismo sofreu pela globalização da economia mundial que coincidiu com o triunfo da contrarrevolução neoliberal no chamado Mundo Livre, num momento em que a Guerra Fria se aproximava de seu auge e também do seu fim, no final dos anos 1970. Os autores também oferecem uma análise da presente crise econômica internacional à luz das mudanças trazidas pela Terceira Revolução Industrial – a da informática e da internet -, que tornaram possível a hegemonia do capital financeiro em plano mundial, matriz de crises sucessivas que lhe são inerentes. O que aparece às classes dominantes como “sociedade do conhecimento” se torna exclusão, principalmente pelo desemprego, para os trabalhadores.

Enquanto a série de crises iniciada em 2007 tem atraído todas as atenções, um capitalismo de novo tipo surge da penumbra, produto da desregulação do capital financeiro e de nova onda de privatização dos principais serviços públicos que, por sua essencialidade para a sobre vivência dos mais pobres, serviços sociais porque deveriam ser acessí veis a todos. A sua privatização, agora justamente nos países mais afetados pela crise e, portanto, pelo desemprego, exclui do uso desses serviços os menos aquinhoados, aprofundando a desigualdade e, por tanto, a injustiça social o que explica a expansão mundial dos “indignados”, em sua maioria jovens que percebem que o capital financeiro, simbolizado por Wall Street, e suas crises lhes roubam um futuro que as conquistas democráticas das gerações anteriores deve riam ter-lhes assegurado.

A redução dos controles nacionais das trocas comerciais e da movi mentação dos capitais especulativos entre os países afiliados à omc e ao fmi removeu os obstáculos à centralização global dos capitais. Atualmente, cadeias internacionais de produção e distribuição de bens e serviços, interligadas por conglomerados financeiros, dominam segmentos inteiros da economia mundial, o que explica a subserviência de governos nacionais democraticamente eleitos às exigências do capital financeiro global, representado por agências intergovernamentais como o fmi e o Banco Central Europeu.

O livro procura descrever a trajetória que está sendo construída pelas crises sucessivas, implicando maior destruição do que geração de riqueza. Essa trajetória é composta por três armadilhas que se fecham sequencialmente, aprisionando os que se endividaram porque acreditaram que a oferta de crédito pelos bancos jamais seria interrompida.

A primeira armadilha é a do consumo. Nos EUA, a renda da população trabalhadora estagnou, sem interrupção, no entanto, do crescimento do consumo. Entre 1992 e 2000, o crescimento do pib se baseou principalmente no aumento das compras a crédito de moradias e automóveis. Em 1990, a soma das dívidas das famílias nos EUA era igual a 85% de sua renda;dez anos depois a soma das dívidas já era igual a 101% de sua renda. Em 2007, quando estourou a crise, as dívidas das famílias comprometiam 139% de suas rendas. A desregulamentação financeira permitiu que o povo “prosperasse” enquanto o país se desindustrializava. Quando a demanda por imóveis e automóveis naturalmente se esgotou, a armadilha do consumo aprisionou milhões de famílias, muitas das quais foram duplamente punidas: perderam o trabalho e os bens adquiridos.

A segunda armadilha é a da liquidez. Quando a crise se desencadeia, os empréstimos cessam, inclusive entre os bancos, porque ninguém mais confia em que eles serão pagos no vencimento. A quase bancarrota dos maiores bancos acarreta a paralisação do crédito, ou seja, quase todas as compras têm de ser pagas imediatamente com dinheiro. Ora, como ninguém tem dinheiro porque a crise acarreta forte queda das atividades com as quais os consumidores ganham seu dinheiro, o volume de compras se contrai. Os que ainda ganham tratam de guardar o seu dinheiro em casa, embora lá ele não renda:o pânico sobrepuja a cobiça. O meio circulante é entesourado, portanto deixa de circular, exceto o pouco dinheiro gasto com compras de bens e serviços indispensáveis.

Os efeitos conjugados das armadilhas do consumo e da liquidez compõem a terceira armadilha: a da dívida. São suas vítimas não só os consumidores que se endividaram, mas todos os outros que tomaram empréstimos para investir. Nos EUA, a hegemonia financeira fez com que o recurso às dívidas se generalizasse:a informática tornou a participação nas operações da Bolsa muito fácil, de modo que a especulação financeira virou um esporte de massas. “Pela primeira vez na história da humanidade”, afirmam os autores, “a especulação é a principal fonte de geração de renda. As firmas de Wall Street haviam assumido dívidas num total equivalente a 32 vezes o seu capital próprio. ”

A financeirização (isto é, o crescimento não só do volume de dinheiro manipulado pelo setor financeiro como também da influência e, sobretudo, do poder econômico e político dos bancos e fundos de investimento) deslocou o controle das empresas dos diretamente interessados – acionistas, assalariados, gerentes, fornecedores e clientes – para os credores, que frequentemente assumem o papel de controladores do capital acionário da empresa. Os credores, no entanto, não participam diretamente da vida da firma e tampouco têm interesse em sua continuidade. Quando se tornam controladores, o seu único objetivo é recuperar o que emprestaram e o máximo de ganhos adicionais. Por causa disso, o controle de empresas da economia real – industriais, agropecuárias, comerciais e prestadoras de serviços à população – pelo capital financeiro acarreta muitas vezes o seu fechamento prematuro.

O processo se acentuou em 1992, quando o governo dos EUA pediu aos fundos de pensão (que estavam subcapitalizados) que tratassem de reestruturar e extrair o máximo de lucro de qualquer empresa no exterior em que haviam investido. A ocasião era propícia, pois a crise do endividamento externo nos países em desenvolvimento, particularmente nos da América Latina, os havia forçado a abrir suas economias e suas empresas recém-privatizadas à aquisição por estrangeiros. Os bancos da tríade EUA, Europa e Japão participaram ativamente dessa globalização, engajando-se em fusões e aquisições. Os bancos que não se lançaram nessas empreitadas logo foram adquiridos por outros1.

Criou-se assim uma nova contradição:a concentração do capital, frequentemente por iniciativa do capital financeiro, fez com que surgisse uma nova classe de firmas consideradas grandes demais para falir. São firmas de tal forma interligadas financeiramente que se alguma das maiores falir leva consigo todas as demais. Isso se verificou na prática em setembro de 2008: a quebra do banco Lehman Brothers contagiou os maiores bancos de investimento, fazendo com que a crise financeira, até aquele momento restrita aos EUA, se alastrasse pelo resto do mundo. A epidemia de falências só não ocorreu porque os governos nacionais injetaram trilhões de dólares nos bancos para salvá-los.

A submissão de uma parte cada vez maior das empresas a capitais financeiros, para os quais elas não passam de veículos para a obtenção de ganhos especulativos de curto prazo, as torna mais vulneráveis às crises produzidas pelo fechamento das armadilhas do endividamento. Para o bem comum, no entanto, toda empresa deveria ser controlada

por aqueles diretamente interessados em sua continuidade e em sua robustez produtiva, comercial e financeira. Um indício dessa mudança de opinião é a recente concessão do Prêmio Nobel de Economia a Elinor Ostrom, notória defensora da tese de que a administração dos recursos que são propriedades comuns da coletividade deve ser confiada a quem está realmente interessado em sua preservação, ou seja, à própria coletividade. Ela constata que “falta uma teoria adequadamente especificada da ação coletiva pela qual um grupo de interessados pode se organizar voluntariamente para reter os resultados de seus esforços”.

Sanchez e Roelants oferecem elementos para a construção dessa teoria mediante o estudo de quatro cooperativas, que são exemplos representativos de ações coletivas voluntariamente organizadas e que obtêm êxito em se resguardar das crises engendradas pelos excessos especulativos dos capitais financeiros. Embora distintos, os quatro casos são bastante representativos de diferentes facetas do cooperativismo contemporâneo.

O primeiro é o de uma cooperativa de mergulhadores e pescadores localizada em Natividad, uma pequena ilha na costa do México, em que moram cerca de oitenta famílias, que vivem da captura de abalones, um marisco muito raro e valioso. Criada em 1942, a cooperativa explora áreas marítimas por concessão do governo. Nos anos 1980, a corrente marítima El Niño aqueceu as águas nessas áreas, o que reduziu o estoque de mariscos, levando à superexploração das reservas de abalones tanto pela cooperativa como pela pesca ilegal de gente de fora. No fim da década a cooperativa conseguiu controlar as práticas predatórias e evitar se envolver numa corrida por ganhos em curto prazo. Adotou uma abordagem científica ambiental e contratou um biólogo. Durante a crise, a assembleia de sócios da cooperativa decidiu fechar uma zona marítima à pesca por quatro anos. Graças à cessação da pesca, os abalones se reproduziram. Quando a pesca nessa zona foi retomada, a cooperativa obteve mais benefícios do que havia sido esperado.

O biólogo da cooperativa propôs que ela investisse em reservas marítimas, tendo em vista assegurar que no futuro houvesse disponibilidade de abalones, pepinos-do-mar e caracóis marítimos. A proposta foi aprovada e a cessação da pesca em determinado espaço reduziu a receita anual da cooperativa em 300 mil dólares, mas os membros esperam que o sacrifício seja compensado no futuro. As concessões de pesca deverão ser renovadas em 2012, e os membros da cooperativa têm bons motivos para esperar que consigam a renovação, o que lhes permite planejar a longo prazo a preservação das áreas de pesca e o desenvolvimento da cooperativa.

O segundo caso estudado é o da Ceralep, uma empresa francesa de pequeno porte fundada em 1921 que produz isoladores de cerâmica. Em 1973 ela se fundiu com outro importante produtor e desde então se tornou a única companhia na França que produz isoladores cerâmicos muito grandes. Em 1989, a Ceralep foi adquirida pela firma suíça Laufen, que a revendeu em 1993 à austríaca Ceram. Essas transações sucessivas fizeram a Ceralep passar por três controladores de diferentes nacionalidades no espaço de vinte anos. Tanto os suíços como os austríacos tentaram debalde se apoderar da tecnologia dos isoladores cerâmicos.

Em 2001, a Ceralep passou a ser controlada pela firma estadunidense ppc Insulators, que começou a agir de forma estranha:demitiu o diretor, mas atendia sem hesitação os pedidos de aumentos salariais dos empregados. A produção caiu muito e os trabalhadores não tinham o que fazer, o que os envolveu num clima extremamente desmoralizante, que se agravou quando os empregados descobriram que a ppc Insulators planejava fechar a Ceralep. É preciso compreender que o fechamento de uma firma que funcionava com êxito há oitenta anos deve ter sido um evento trágico para seus empregados, muitos dos quais passaram grande parte de suas vidas nela e certamente não viam qualquer perspectiva de emprego em outra firma2.

Os operários decidiram resistir à liquidação da empresa. Impediram diversas tentativas de remoção de máquinas bloqueando a entrada de caminhões na fábrica. Estas ações impediram efetivamente os controladores de fechar a firma, levando-os a entregar, em 2003, uma petição de falência, o que possibilitou mais tarde a compra da massa falida pelos empregados. Estes imediatamente escreveram uma carta aberta ao promotor distrital, ao síndico da falência e ao prefeito do departamento de Drôme denunciando que a administração e os acionistas tencionavam quebrar a empresa e condenar os 150 operários e o tecido econômico e social do distrito de Saint-Vallier.

Começou então uma batalha para evitar a destruição da Ceralep. Os trabalhadores se mantiveram unidos e contaram com a ajuda da União Regional de Cooperativas Operárias e da gente simples da comunidade: 802 pessoas doaram um total de 50 mil euros para integrar o capital de giro da futura cooperativa; o fundo francês Socoden de solidariedade das cooperativas operárias emprestou 100 mil euros; o banco cooperativo Crédit Cooperatif também contribuiu até que o milhão e meio de euros necessário para estabelecer a cooperativa fosse reunido.

Os apoios obtidos que ajudaram a impedir o fechamento da Ceralep e asseguraram sua continuidade na forma de um empreendimento cooperativo autogestionário confirmam a veracidade das afirmações contidas na carta aberta dos trabalhadores: a ameaça do fechamento da Ceralep de fato condenaria não só os 150 operários da empresa como também o tecido econômico e social da região.

Todas as autoridades públicas da região, da municipalidade e a associação de municipalidades apoiaram o projeto dos operários, dando-lhe uma ajuda substancial. A racionalidade da Ceralep foi distorcida por investidores absenteístas em ininterrupta sucessão, que se tornaram controladores à distância e trataram a firma como uma ficha trocável numa cadeia global de suprimentos. Esta racionalidade levou a firma à bancarrota. Uma vez removida a causa, a companhia na forma de cooperativa está indo bem, pois o controle foi entregue aos diretamente interessados.

O terceiro caso estudado no livro em exame é o do Grupo de Cooperativas de Crédito Desjardins, que é a mais importante instituição financeira da província canadense de Québec e a sexta maior do Canadá. Com ativos no valor de us$ 155,5 bilhões, é um dos principais atores financeiros e econômicos da nona maior economia do mundo. Desjardins é também o maior empregador privado de Québec com 39 mil empregados e está entre os maiores empregadores do Canadá, com um total de 42 mil empregados no país. Apesar de todo esse poderio econômico, financeiro e empresarial, Desjardins não procura maximizar o retorno sobre o investimento dos acionistas, mas assegurar serviços satisfatórios para os seus 5,8 milhões de membros proprietários, dos quais 5,4 milhões em Québec, que constituem 70% da população da província.

O Grupo Cooperativo Desjardins, criado há 110 anos para atender às necessidades financeiras de pequenos agricultores, produtores e assalariados, é formado por 481 cooperativas de crédito locais autônomas, que em conjunto o possuem e controlam. Os autores se detêm na história do Grupo Desjardins porque se trata de um dos maiores conglomerados financeiros do mundo que, num período em que o capital financeiro se globaliza e conquista incontrastável hegemonia na economia capitalista mundial, se mantém fiel à sua missão cooperativa e a seus membros-clientes pertencentes às classes trabalhadoras, sem com isso perder a competitividade.

O Grupo Desjardins conseguiu democratizar e descentralizar os serviços financeiros, tornando-os acessíveis a todas as classes e os difundindo pelas comunidades locais de Québec. Fez com que várias gerações de quebequenses aprendessem a agir coletivamente para desenvolver suas economias locais e adquirissem através de suas caisses scolaires os conhecimentos básicos de como poupar. Atualmente, 6 258 presidentes e membros de diretorias das cooperativas de crédito locais aprenderam como um banco funciona e são responsáveis pela sua supervisão.

O grupo desenvolve uma oferta integrada de crédito a meio milhão de negócios, que são seus clientes. Para alcançar tais resultados, teve de construir delicado equilíbrio entre as imposições da concorrência financeira e os seus objetivos sociais e entre a segurança financeira de longo prazo de seus membros e as aspirações de curto prazo de seus membros dos mesmos. Ao fazer isso, Desjardins se opõe às armadilhas do consumo e da dívida analisadas acima. Na realidade, não gera risco sistêmico, mas apoia o desenvolvimento econômico e social de longo prazo e promove a igualdade e a confiança.

A estruturação das caisses num agrupamento horizontal desencadeou um forte potencial econômico e social; em vez de permanecerem estruturas isoladas, como eram no começo e poderiam ter permanecido, as cooperativas de crédito locais do Grupo Desjardins conseguiram criar um dos maiores grupos financeiros da América do Norte, sem perder sua capilaridade e continuando totalmente dedicadas à prestação de serviços ao cidadão local e aos negócios locais. A tendência a um excesso de fusões foi controlada, o perigo de que as subsidiárias – seguradoras, fundos de capitalização e fundos de investimentos regionais – pudessem aumentar sua influência em termos de gestão tecnocrática foi igualmente evitado por uma série de reformas de governança sucessivas que incrementou o controle sobre as subsidiárias.

Ao expandir a lógica cooperativa de priorizar a base das cooperativas locais para um sistema tão amplo como a província de Québec, com seus quase 8 milhões de habitantes, Desjardins foi o promotor de uma mesoeconomia, tendo sido por mais de um século um dos principais atores no desenvolvimento de comunidades locais em Québec, além de ter desempenhado um papel-chave na estabilidade financeira do Canadá. Além disso, contra as assimetrias de informação, que muitos interessados sofrem, como é o caso de clientes de grandes instituições financeiras, onde a confiança dos clientes está sendo superada por arranjos opacos e segmentados de contrapartes, Desjardins não apenas nutre a noção de um movimento de proprietários-clientes ao qual se dedica, mas fornece aos últimos informações sobre o grupo de negócios, textos de discussão para ajudá-los a formar opinião na tomada de decisões e lhes oferece treinamento para ajudá-los a administrar suas cooperativas locais. A história de Desjardins também demonstra que crises sucessivas, como a Grande Depressão de 1929, várias crises nos anos 1980 e 1990, e a atual crise global, em vez de ameaçar a existência do grupo de fato a reforçaram, além de lhe dar oportunidade de realizar inovações institucionais e melhorar sua missão fundamental: a de servir seus membros.

O quarto e último caso teve por objeto o Grupo Corporativo Mondragon. Trata-se de um grupo horizontalmente integrado por mais de 110 cooperativas industriais, de serviços, finanças, distribuição, educação e pesquisa, centrado na cidade de Mondragon, na região basca da Espanha. Em 2010, era um grande conglomerado produzindo eletrodomésticos, máquinas-ferramentas, componentes de computadores, mobília, instalações de escritório, materiais de construção, transformadores, componentes de automóveis, moldes para ferro fundido, sistemas de resfriamento, equipamento médico, alimentos e outras manufaturas. Desenvolve uma série de atividades de serviços como engenharia, urbanismo, pesquisas em setores industriais, nanotecnologia, e compreende uma grande cadeia de supermercados, um banco e uma universidade. É considerado o maior complexo cooperativo do mundo, sendo a maior organização empresarial do País Basco e a sétima da Espanha.

A criação do Grupo Corporativo Mondragon foi inspirada pelo padre José Maria Arizmendiarreta, que em 1941, aos 26 anos, tornou-se pároco de Mondragon, dois anos após a guerra civil que havia ensanguentado a Espanha, na qual combateu ao lado dos republicanos. A pobreza reinava em Mondragon, cuja única grande empresa era uma metalúrgica que oferecia uma escola profissional para os filhos de seus operários. O jovem pároco tentou convencer a família proprietária da empresa a abrir a escola aos demais jovens da cidade, mas não teve êxito. Partiu então para a fundação de outra escola profissional, aberta a todos os moradores de Mondragon. Para obter os recursos necessários o padre promoveu uma campanha bem-sucedida de contribuições entre a população, recebendo apoio de 15% de seus moradores.

A nova Escola Politécnica foi a matriz do complexo cooperativo: cinco ex-alunos adquiriram – também com a ajuda da população – uma empresa falida, que se tornou a cooperativa ulgor, fundada em 1956. O padre ajudou na empreitada e desde então passou a ser uma espécie de orientador espiritual da cooperativa. Um dos princípios adotados foi limitar o tamanho da cooperativa para que a autogestão da mesma pudesse contar com a participação consciente de todos os sócios. Quando a ulgor passou a crescer, estimulada pela demanda por seus produtos, partes dela se separaram e foram transformadas em novas cooperativas: a Arrasate, fundada em 1958, fabrica máquinas-ferramentas; fundadas em 1963, a Copreci produz componentes de fogões domésticos e industriais e a Ederlan produz peças fundidas. As três eram parte da ulgor e continuaram vendendo quase toda sua produção para esta última.

As cooperativas desmembradas foram unidas à cooperativa matriz, formando todas uma cooperativa de segundo grau; nesta os excedentes das cooperativas singulares são somados e redistribuídos por igual a cada uma, o que facilita a formação dos preços que as cooperativas fornecedoras cobram da cooperativa matriz pelos produtos que lhe fornecem. Quarenta e cinco por cento dos excedentes são colocados em um fundo de reserva destinado principalmente a financiar novos investimentos3.

Essas regras colocam os interesses da coletividade claramente acima dos interesses individuais, tanto das cooperativas singulares como dos sócios. A elas deve ser atribuída a notável coesão que permitiu ao grupo se desenvolver notavelmente ao longo dos últimos 55 anos. Com o aumento do número de cooperativas, o grupo criou instituições de apoio, na forma de cooperativas de segundo grau cujos sócios são as cooperativas singulares. Em 1959, por insistência do padre Arizmendi, foi criada a Caja Laboral Popular – uma cooperativa de crédito que hoje é o grande banco do grupo, cuja divisão empresarial incuba as novas cooperativas4.

Os órgãos de direção de cada cooperativa de segundo grau são formados por representantes dos trabalhadores da própria cooperativa e dos trabalhadores das cooperativas singulares, geralmente em proporções iguais. Em 1969, a Caja promoveu a fusão de nove pequenas cooperativas de consumo, dando origem à Eroski, hoje a maior empregadora do grupo e uma das maiores redes de supermercados da Espanha. Enquanto cooperativa de consumo, sua direção é partilhada por igual por representantes dos consumidores associados a ela e dos trabalhadores que nela atuam.

O tema central do estudo de Mondragon é o efeito das crises sobre o grupo cooperativo e de que modo este as enfrentou. Em 1986, a Espanha aderiu ao Mercado Comum Europeu, abrindo o seu mercado interno às importações dos outros integrantes do Mercado Comum. A entrada dessas mercadorias no país captou boa parte da clientela que antes comprava os produtos da indústria nacional, inclusive das cooperativas do grupo de Mondragon. A crise se manifestou na forma de aguda queda das vendas, obrigando as cooperativas atingidas a reduzir a produção, deixando parte dos seus sócios sem trabalho.

O grupo cooperativo enfrentou a crise priorizando a preservação dos empregos. O caso de cada cooperativa atingida pela crise era estudado pela Caja em conjunto com a Lagun Aro, a cujo cargo estava o pagamento de seguro-desemprego aos associados. O salvamento dessas cooperativas geralmente exigia mudanças da linha de produção ou da estrutura de marketing, corte dos salários e/ou reforço do capital da cooperativa mediante contribuições dos trabalhadores. Apenas em casos extremos exigia-se redução de postos de trabalho. As propostas de medidas para o enfrentamento da crise eram submetidas a extensas consultas aos membros das cooperativas ameaçadas e naturalmente surgiam contrapropostas, o que exigia votações sucessivas até a formação de um consenso.

O êxito econômico inegável de cooperativas de modestos ceramistas, como no caso da Ceralep, ou de não menos modestos pescadores e mergulhadores, como os da cooperativa de Natividad, combina perfeitamente com a pujança de extensos complexos ou corporações, como demonstram os casos de Desjardins e de Mondragon. Em pequena ou grande escala, as cooperativas são viáveis mesmo quando enfrentam circunstâncias inóspitas das crises provocadas pelo capital financeiro desregulado. Sua capacidade de resistir a quedas inesperadas da demanda é notável, resistência que é fruto sobretudo da solidariedade entre membros das cooperativas e das comunidades em que as cooperativas se localizam, como evidenciam os casos de Ceralep e Mondragon. É difícil exagerar a oportunidade e a importância desta obra. Ela merece a leitura atenta e o debate engajado de todos que se preocupam com os perigos e as oportunidades que a presente crise apresenta.

Notas

1 “Só em 1997 houve 599 fusões bancárias nos EUA, reduzindo o número total de bancos de cerca de 14000 para 9143.”
2 Um deles se suicidou na fábrica, deixando uma carta em que revelou que não suportava mais a pressão, muito provavelmente decorrente da espera inerte pelo fim de tudo que dava sentido a sua vida.
3 Esse fundo é indivisível, ou seja, jamais poderá ser dividido entre os sócios. Fundos indivisíveis são criados para garantir a sobrevivência da cooperativa, nos casos em que sócios resolvam se retirar dela. Estes têm direito a receber sua parte do patrimônio não indivisível. O dinheiro depositado no fundo indivisível continuará pertencendo aos sócios que permanecem na cooperativa. Os outros 55% dos excedentes são dos sócios, mas só lhes será entregue anos depois que deixar em a cooperativa.
4 Ainda em 1959, foi criada a Lagun Aro, a entidade de previdência do grupo. Na época as cooperativas estavam excluídas do sistema previdenciário oficial.

Paul Singer – Professor titular da fea-usp e titular da Secretaria Nacional de Economia Solidária (SENAES).

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O Mundo em 2050: como a Demografia, a Demanda de Recursos Naturais, a Globalização, a Mudança Climática e a Tecnologia Moldarão o Futuro | Laurence Smith

Editado recentemente pela Editora Elsevier, o livro do geocientista americano, especialista em impactos geofísicos da mudança climática e consultor do governo dos Estados Unidos Laurence C. Smith, com o título em português O Mundo em 2050. O Futuro de Nossa Civilização, a partir do próprio título deixa o leitor curioso a respeito do seu conteúdo.

Smith não se concentra somente em um setor, como o crescimento populacional, ou mesmo, o futuro das fontes energéticas. Ele procura mostrar, com a ajuda da Geografia e da História, como as condições atuais de tratamento da Natureza, deixarão marcas duradouras no futuro.

Para isso, se utiliza de modelos computacionais altamente sofisticados, pois, como se sabe, essas forças – demografia, demanda de recursos, globalização e mudança climática – estão intimamente interligadas, tendo o poder de moldar o nosso futuro. Daí, com a ajuda desses modelos, o cientista acredita ter condições de analisar tendências, convergências e possíveis paralelos entre elas. Pretende, através de uma base científica, formalizar uma ideia do que poderá ocorrer nos próximos 40 anos, a partir das tendências atuais, uma vez que estas poderão ser previstas e extrapoladas para o futuro.

Nas suas pesquisas, Smith chegou à conclusão que o aquecimento ampliado do clima começou no Norte, daí, faz as seguintes perguntas: qual o significado disso para os povos e ecossistemas da região? Quais as suas tendências políticas e demográficas? O que isso representaria no que diz respeito aos vastos depósitos de combustíveis fósseis que se acredita haver abaixo do leito dos seus oceanos? De que maneira se transformaria, por pressões ainda maiores que vem se acumulando ao redor do mundo? Que aconteceria se, como sugerem muitos modelos climáticos, nosso planeta for assolado por ondas de calor insuportáveis, secas e a consequente queda da produção agrícola? Será que haveria a possibilidade de surgir novas sociedades humanas em lugares que, hoje, nos parecem inóspitos?

São essas as questões que o autor tenta responder ao longo da discussão que, como vemos pelo próprio título da obra, trata do futuro do planeta. No diagnóstico desse futuro, o autor analisa, por exemplo, os gases do efeito estufa e a oferta de recursos naturais. O autor tem, ainda, a preocupação de projetar quarenta anos no futuro, estudando de perto o que se passa hoje na natureza e o porquê dos fatos.

Para discutir o futuro é preciso entender o passado. Assim, em ordem histórica de importância, o autor analisa as quatro forças globais que há séculos vem, em processo, contribuindo para moldar o nosso mundo em 2050: a demografia, a demanda por recursos naturais, a globalização e a mudança climática.

Ao tratar da primeira força, a demografia, o autor traz uma série de números a respeito do crescimento populacional, desde o advento da agricultura, quando “havia talvez um milhão de pessoas no mundo”, até os dias de hoje, quando a população mundial chegou aos “sete bilhões em 2011” (p.9). A crescente demanda por recursos naturais e serviços, resultante de uma população mundial que não para de crescer também é motivo de sua análise. O fenômeno da globalização é visto pelo autor, como um conjunto de processos econômicos, sociais e tecnológicos, que está tornando o mundo mais interconectado e interdependente – aí ele percebe implícita uma política cultural e ideológica.

No que tange às mudanças climáticas, faz um histórico do desenvolvimento do efeito estufa que, já em 1820, teve sua existência deduzida pelo matemático francês Joseph Fourier (que deduziu que a terra estava muito mais quente que costumava ser, dada a sua distância em relação ao sol). Smith não deixa de citar, neste sentido, o papel da tecnologia, considerada por ele a quinta força, que pode servir de capacitador ou freio para as quatro forças globais, na medida em que tem condições de corrigir problemas.

A partir desta introdução o autor passa a fornecer ao leitor dados e tendências essenciais que ajudam a entender a dinâmica do desenvolvimento que engendrará a imagem do ano 2050. Para isso, recorre ao debate que os cientistas vêm fazendo em nível mundial e que diz respeito à substituição de combustíveis fósseis por tipos de energias renováveis, assim como a possibilidade de reciclagem e poupança dos citados materiais. Abalizando os prós e contras da utilização de diferentes tipos de energia e matérias primas, Smith não descarta o grande potencial de conflito que poderá se desenvolver na exploração de recursos naturais, como água, petróleo e gás natural.

Nesse sentido, de onde viriam essas novas fontes de energia, em 2050? Através do hidrogênio como nos filmes de ficção científica? Dos biocombustíveis (etanol, a partir da cana ou da beterraba)? Da energia nuclear com seus riscos a saúde pública? Da energia hidrelétrica que gera atualmente 16% da eletricidade do mundo? Da energia eólica ou solar, setores em crescimento, sobretudo em países de altitudes médias e altas?

O autor é conclusivo no que diz respeito ao aumento de fenômenos climáticos extremos ou a elevação do nível do mar, mostrando como a mudança climática conduz a tempestades devastadoras.

Nesta perspectiva, cita a catástrofe que se abateu em 2008 sobre o estado de Iowa, que se destacou como a segunda maior em 136 anos. Em maio do mesmo ano, um tornado de categoria f5 atingiu o estado, além de outros 48 menores, todos eles com vítimas fatais. Enquanto isso, em 4 de junho do mesmo ano, o governado Arnold Schwarzneger anunciou uma grande seca no estado da Califórnia, grande produtor de produtos agrícolas dos EUA. Assim, de repente, a Califórnia se viu em meio a uma crise econômica histórica que atingiu o setor da habitação e os mercados de crédito globais, na eminência de perder mais de 80 mil empregos e U$$ 3 bilhões em receitas agrícolas.

Secas excepcionais castigaram países no mundo inteiro, ameaçando a agricultura e provocando incêndios (p.70), como os que alcançaram a Austrália, matando 200 pessoas. Em Chattisgarh, na Índia, 1.500 agricultores cometeram suicídio porque, com a seca, tiveram suas terras confiscadas pelo não pagamento das dívidas.

Para Smith, o problema central no futuro é que uma parcela crescente da população mundial viverá em locais onde a água, sem dúvida, será escassa. Na página 75, o autor comenta que,

enquanto 8 em cada 10 pessoas tem acesso a algum tipo de água melhorada, essa media global mascara intensas discrepâncias geográficas. Alguns países como Canadá, Japão e Estônia fornecem água potável a todos os seus cidadãos. Outros, especialmente na África, oferecem água potável a menos da metade da sua população. (SMITH, 2011, p. 75)

Outro fato aterrorizante, discutido pelo autor, é que já se pode constatar que cada vez mais multinacionais estão privatizando e consolidando os sistemas de abastecimento de água. Cita três exemplos destas: Suez Veolia Enviromental Services (ex- Vivendi) e Thames Water, que, expandindo-se, transformaram-se em empresas de comercialização de água em todo o mundo em desenvolvimento. Em 2009 a Siemens pagou um U$$ bilhão pela U.S Filter, maior fornecedor de produtos e serviços para tratamento da água da América do Norte. A General Eletric e a Dow Chemical também estão entrando no ramo da água (p.77) ao lado da Nalco, ITT e Danaher Corporation.

Contrariando o senso comum, o crescimento populacional e a industrialização representam, para o suprimento de água global, um desafio ainda maior que a mudança climática. O fornecimento de uma quantidade adequada de água para essa produção, a expansão dos parques industriais e, paralelamente, a necessidade de manter a água limpa nesse processo, será, para o autor, o grande desafio do século.

Ao considerar as mudanças climáticas o autor se concentra na análise da elevação das temperaturas no Norte, fato que está ocorrendo mesmo no período do inverno e em altíssimas altitudes. Ele afirma que qualquer processo de mudança climática “é errático ao longo do tempo” (p.104). A mudança climática apresenta ainda um segundo fato: a sua geografia nem sempre é global e nem sempre tende ao aquecimento. A mudança climática não é apenas errática no que diz respeito ao tempo, mas também em termos geográficos. Outro fato é que a mudanças climáticas ocorrerão diferentemente no globo, assim como as situações a elas ligadas: quando existe um aumento de temperatura em um local, não significa que em todos os lugares do globo ela sofra o mesmo aumento. Em alguns locais poderá ocorrer um aumento mais acentuado e em outros poderá ocorrer até mesmo um resfriamento.

O segundo cenário considera igualmente uma população mundial estabilizada e uma pronta adoção de novas técnicas de produção de energia, advindas tanto dos combustíveis fósseis como de combustíveis não fósseis. O terceiro cenário pressupõe um mundo heterogêneo, com forte crescimento populacional, um lento desenvolvimento econômico e uma lenta transição para novas tecnologias que produzam energia.

Smith mostra, ainda, de forma clara, que a mudança climática será bem mais pronunciada na região Norte. Em 2007 foi comprovado que 40% da calota polar derreteu, desaparecendo em questão de meses. Os modelos climáticos existentes não haviam previsto um fenômeno como esse, até pelo menos em 2035. Tais modelos não acompanharam a rapidez que o fenômeno se deu de fato. A fauna e a flora também sofreram o impacto dessa mudança de temperatura.

O autor mostra a mudança de comportamento do urso polar cujo lar é o gelo flutuante, onde caça, dorme e se acasala. O urso polar não hiberna no inverno. No verão, quando o gelo se desintegra e diminui, eles são forçados a migrar para a terra, por conseguinte sendo forçados a jejuar até a volta do gelo. Com isso, em 2004, foram confirmadas pelos biólogos três ocorrências em que ursos polares caçaram e comeram uns aos outros. O que significa dizer que a cadeia alimentar como um todo – do microscópico fitoplâncton ao urso polar –, que está intrinsecamente associada à presença do gelo oceânico está sendo prejudicada.

Não se pode esquecer que seres humanos também dependem do gelo, como os esquimós que vivem no litoral do Oceano Ártico, caçando focas, ursos polares, baleias, e outros peixes, onde já se vê uma mudança de hábitos. Milhares de quilômetros de distancia, nem por isso se entregam ao desespero. Toda essa discussão precedente levará o autor ao ponto principal, ou seja, as consequências dessa situação de aquecimento global e esgotamentos das fontes de energia tradicionais para os oito países que estão na zona do ártico: Rússia, EUA, Canadá, Islândia, Noruega, Finlândia, Dinamarca e Suécia, que terão possibilidades de se beneficiar, haja vista as riquezas do subsolo da região e outros valiosos recursos naturais. A partir dessas novas previsões, esses países estão, pelo menos, avaliando a implementação de novos esquemas na região.

Ampliando suas análises a respeito de 2050 o autor calcula que: a) a população mundial terá aumentado neste ano quase 50%, formando aglomerados urbanos próximos as latitudes mais baixas e quentes do planeta; b) estão surgindo países com grande potencial econômico como China, Índia e Brasil; c) grande parte da população viverá nas cidades e estará mais velha e mais rica; d) a água em muitos locais se tornará escassa; e) cidades sofrerão com a elevação do nível do mar; f) a agricultura irrigada praticamente não existirá.

Comprovadamente, o livro de Laurence C. Smith vale a pena ser lido. Escrito de modo fascinante o livro mostra metodologicamente as consequências socioeconômicas que derivam das mega-tendências do desenvolvimento mundial até o ano 2050, se valendo, para tanto, de dados respaldados em estudos econômicos, sociológicos, ecológicos e geológicos. O livro impressiona ainda pela abundancia de dados apresentados de forma clara e inteligente, numa leitura leve que não cansa o leitor (apesar das interligações feitas entre passado, presente e futuro). É leitura obrigatória para aqueles que se preocupam com a história ambiental e o futuro do planeta.

Ana Maria Barros dos Santos – Doutora pela Universidade Friedrich Alexander Erlangen-Nurnberg (Alemanha). Professora do Departamento de História da Universidade Federal de Pernambuco. AMBS/UFPE.


SMITH, Laurence C. O Mundo em 2050: como a Demografia, a Demanda de Recursos Naturais, a Globalização, a Mudança Climática e a Tecnologia Moldarão o Futuro. Trad. Ana Beatriz Rodrigues. Rio de Janeiro: Elsevier, 2011. Resenha de: SANTOS, Ana Maria Barros dos. CLIO – Revista de pesquisa histórica. Recife, v.30, n.1, jan./jun. 2012. Acessar publicação original [DR]

Globalização e as consequências humanas / Zygmunt Bauman

O livro “Globalização e as consequências humanas” é um livro de perguntas e não de respostas. Não é intenção de Zygmunt Bauman dar respostas ou fazer previsões das condições contemporâneas de nossa civilização. Nas palavras do autor este livro é: “… antes e acima de tudo, um exercício de formulação de questões e estímulos ao questionamento…”.

Há no livro uma proposta de ir além da semântica que permeia o senso comum quando este se refere ao termo globalização. Percebe-se uma proposta de tratar com clareza a condição humana na atualidade. Para isso o autor procura revelar as raízes, bem como as consequências sociais do processo globalizador.

A legibilidade e a transparência do espaço tornaram-se o grande desafio do Estado moderno para a soberania de seus poderes. A reorganização do espaço foi decisiva para a subordinação do espaço social. A necessidade de medir o espaço objetivamente para a arrecadação de tributos fez surgir à imposição de padrões de medidas obrigatórias. Isso impediu a outras medidas locais.

A estrutura espacial ao fim da guerra pelo espaço deveria além de ser completamente legível para o poder estatal, deveria estar livre de toda a semântica por seus usuários ou vítimas.

Segundo Bauman, o modelo do panóptico construído por Michel Foucault, apoia-se numa suposição semelhante, ou seja, por ser um espaço construído de propósito, com assimetria visual, ele permitia manipular conscientemente e rearrumar intencionalmente a transparência do espaço como relação social. Mas em vez de se embrenhar nos ideais panópticos, os Estados modernos optaram pelo mapeamento do espaço, ou seja, despojaram os habitantes locais de suas referências e meios de orientação e empreenderam uma guerra pelo espaço.

A procura da objetividade levou a introdução da noção de perspectiva. A noção de perspectiva está a meio caminho entre a visão de espaço firmemente assentada em realidades coletivas e individuais e seu posterior desenraizamento moderno. O olho do observador era o ponto e partida tal qual anteriormente, mas agora o olho humano era um olho impessoal, que se colocava em um determinado ponto para a observação, retirava se a força as qualidades do observador de homem social e colocava-o numa localização quantificável, culturalmente indiferente e impessoal.

Segundo Bauman, a concepção de perspectiva realizou um duplo feito, atrelou a natureza praxeomórficas da distância às necessidades da nova homogeneidade promovida pelo Estado moderno. A perspectiva ao mesmo tempo em que reconheceu a relatividade subjetividade dos mapas de espaço, simultaneamente neutralizou o impacto dessa relatividade. A busca da transparência e da legibilidade do espaço propiciou o surgimento da objetividade. E a objetividade significava impessoalidade.

Os mapas anteriormente registravam as formas do território. Na tentativa e dar mais legibilidade ao espaço, os territórios é que passaram a refletir os mapas. Tornou-se necessário remodelar ou modelar o espaço.

A visão utópica moderna foi a que mais se adequou a essa exigência. As cidades planejadas eram meticulosamente traçadas, todas foram resultado de planejamentos prévios, estrito e detalhado do espaço. Na busca da transparência do espaço das cidades planejadas, os utopistas modernos permitiram o futuro invadir o presente, em que a disposição lógica das cidades e da arquitetura criou as condições de transparência estabelecidas pela razão impessoal.

Bauman diz que tanto para os teóricos como para os praticantes a cidade do futuro era uma encarnação espacial da liberdade. Do ponto de vista da administração, era muito difícil intervir em uma cidade cuja história já estivesse assentada. Constituída de camadas históricas, as cidades palimpsesto não eram espaços cuja intervenção dos arquitetos pudesse alcançar o monopólio da arquitetura. Para estes utopistas a cidade ideal devia surgir do traçado das pranchetas, as realidades urbanas não estariam à mercê da história, mas na elegância da cartografia impessoal. Cada malha, cada rede social ocuparia o lugar previamente definido pelos planejadores.

Essa condição ideal sonhada para o monopólio da arquitetura modernista teve como principal representante Le Corbusier. Este proferiu uma sentença de morte as cidades existentes, para ele elas não eram funcionais, eram insalubres e ofendiam o senso estético. Para Le Corbusier, tanto a lógica como a estética pede clareza funcional a todos os aspectos da cidade. O espaço é separado de acordo com esta lógica, separam-se os locais com funções domésticos, com funções de trabalho, de lazer.

Esses grandes sonhos arquitetônicos, segundo Richard Sennet, “mostrou que uma cidade para ser boa deve dar às pessoas condições de assumir responsabilidades por seus atos numa sociedade histórica e imprevisível e não em um mundo onírico de harmonia e ordem predeterminada”. É preciso estar atento ao fato de que, antes de operar com os princípios da estética e da razão, os homens não se tornam bons seguindo as boas ordens ou os bons planos de outro. A responsabilidade só é desenvolvida com a alteridade ela precisa do desconhecido e da incerteza da diferença e variedade.

Existe Vida depois do Panóptico? Com essa pergunta Bauman traça uma leitura da metáfora mais perfeita, segundo ele, da transformação moderna, a moderna redistribuição dos poderes de controle. O modelo do panóptico não permite um espaço privado livre de controle. As técnicas panópticas que desempenharam um papel crucial na passagem dos mecanismos de integração de base local, para a integração supralocal não são mais suficientes para explicar a percepção da natureza da mudança atual. Os desafios de hoje são diferentes, não se baseiam no propósito de instalar a disciplina, a igualdade, a fixação do espaço, ao contrário do panóptico, que tem essas premissas como objetivos a serem alcançados. O panóptico serviu ao poder moderno, pois o mesmo preferia a sombra e não o espetáculo, como na pré-modernidade.

Bauman faz uma diferenciação entre o poder panóptico e pós panóptico. Para isso ele faz uma diferenciação entre Banco e dados e o panóptico.

O banco de dados, que para alguns seria uma espécie de panóptico, é tratado por Bauman como uma versão diferenciada, na verdade as semelhanças entre panóptico e banco de dados são superficiais. Enquanto o panóptico laçava seus internos e exigia uma conduta monótona e rotineira, o banco de dados registra os consumidores dignos de crédito. O panóptico era uma arma contra a diferença, a opção e a variedade; o banco de dados trabalha com empresas de crédito que consulta seus arquivos para confirmar a credibilidade do cliente. A principal função do panóptico era garantir a permanência do indivíduo no espaço vigiado. Para o banco de dados, quanto mais informações sobre você, mais livremente você pode circular, ele é um veículo de mobilidade, desde que se seja aceito.

No mundo pós-panóptico, Bauman, a partir de Mathiesen identifica uma nova forma de poder, em que é invertida a relação de poucos vigiarem muito, denominado de Sinóptico.

Ao contrário do panóptico, um estabelecimento local, que com suas regras objetivava a imobilização e, a vigilância visava impedir movimentos autônomos e erráticos, o Sinóptico é global, transporta-se o tempo todo pelo ciberespaço. Os alvos do sinóptico deixam de ser os vigiados e passam a ser os vigilantes. Mesmo parados fisicamente, eles viajam pelo ciberespaço. Enquanto o panóptico usa a força para vigiar, o sinóptico usa a sedução para a vigilância.

O autor se propõe a compreender essas transformações da condição humana a partir do binômio tempo/espaço. Para Bauman, a compreensão da relação cambiante tempo/espaço evidencia as causas e as consequências da transgressão em que o tempo moderno se tornou, antes e qualquer coisa, uma arma na conquista do espaço. “Na moderna luta entre tempo e espaço, o espaço era o lado sólido e impassível, pesado e inerte, capaz apenas de uma guerra defensiva, o espaço era uma obstáculo ao avanço do tempo. O tempo era o lado dinâmico e ativo, a força invasora conquistadora e colonizadora.”

Na modernidade líquida as principais técnicas do poder são agora a fuga, a astúcia, enfim a rejeição a qualquer confinamento territorial. Mover se leve e não mais se aferrar às coisas por sua confiabilidade e solidez é hoje recurso de poder. Fixar se ao solo não é tão importante se o solo pode ser alcançado e abandonado a qualquer momento, à vontade. Assim, fixar-se muito fortemente, estabelecer vínculos pode ser prejudicial dada à possibilidade de oportunidades surgirem em outros lugares. Segundo o autor, é a velocidade atordoante da circulação, da reciclagem, do envelhecimento, do entulho o que traz o lucro hoje, e não a durabilidade e confiabilidade do produto como na modernidade pesada. O poder é cada vez mais móvel, leve e fluido, por isso ele precisa ter liberdade de fluir, o mundo deve estar livre de cercas, qualquer rede densa de laços sociais enraizada em um território é um obstáculo a ser eliminado.

Os capitalistas e os corretores da modernidade recente encontram poucos limites remanescentes para a circulação livre do capital. O capital não fixa raízes territoriais, ele não busca a alteridade. Ao contrário, o capital sendo flexível pode se locomover para uma estrutura mais suave. Na modernidade líquida, o capital não luta para minar resistências, ele se move em favor de uma necessidade menos dispendiosa e cansativa. Ele evita o confronto.

Sem determinação espacial, sem necessidade de localidade para investir, o capital não tem responsabilidade com as consequências sociais, há uma desconexão entre o poder e a localidade. Não há responsabilidade com as consequências sociais, há uma espécie de não obrigação do poder com as obrigações sociais. O capital é livre da obrigatoriedade de contribuir com a perpetuação da comunidade, e com a vida cotidiana da mesma. Sem amarras e sem obrigações o capital flutua livremente, “os custos de se arcar com as obrigações não precisam, agora, ser contabilizados”.

Segundo Bauman, a velocidade do movimento e o acesso a meios mais rápidos de mobilidade chegaram aos tempos modernos à posição de principal ferramenta do poder e da dominação. No mundo atual, denominado pelo autor como modernidade líquida, as condições sociais, sob as quais a política e a vida são levadas, pressupõem um arranjo no qual há uma mudança radical nas formas e convivência humana, pois o esforço para acelerar a velocidade do movimento chegou ao seu limite. O poder pode se mover com a velocidade de um sinal eletrônico. O tempo tornou se instantâneo. O poder é agora extraterritorial, não mais limitado e nem desacelerado pela resistência do espaço. As pessoas que operam as alavancas do poder podem se livrar do alcance a qualquer momento, elas são voláteis, elas vivem a experiência da não terrestrialidade, elas não precisam de nenhuma ligação com seu ambiente terrestre para formar ou fundamentar seu poder. O que elas precisam é isolar-se da localidade, que na modernidade líquida está despojada de significado social, a localidade é reduzida a mero espaço físico.

A desterritorialização do poder caminha lado a lado com a estruturação cada vez mais estrita do território. Assim a extraterritorialidade da elite supra-local se serve dos espaços proibidos para se isolar materialmente e corpórea em relação à localidade. Os espaços proibidos, espaços que não podem ser confortavelmente ocupados, não podem ser utilizados de forma despercebida, se tornam fisicamente inacessíveis para aqueles que não disponham de senhas de entrada. Desse modo a cidade vai se tornando um aglomerado de espaços proibidos, os espaços em que as pessoas se encontram face a face vão sendo desintegrados, as ágoras estão cada vez mais restritas. Os espaços públicos estão sendo suplantados por espaços de produção privada.

A elite paga pela sua segurança, os que não têm condições de pagar são guetoizados, e no processo de guetoização eles também erguem suas placas de “não ultrapasse”, seja ela pela vestimenta, atitudes e desafios à lei e a ordem. O espaço urbano torna-se um território semelhante a um campo de batalha de motins internos. A nova fragmentação do espaço da cidade, o encolhimento do espaço público, a desintegração da comunidade urbana, a segregação e a extraterritorialidade da nova elite são realidades na definição do espaço na modernidade líquida.

Ao contrário da extraterritorialidade da elite, há a territorialidade dos outros, segundo Bauman estas pessoas estão confinadas a uma espécie de prisão. A localidade, além de produzir a imobilidade, no mundo da alta velocidade imobiliza o indivíduo, despoja o território do espaço público, não permite a criação de normas, não há confrontação e nem negociação de valores. Os veredictos podem se tornar desligados da vida local. A vida local, confinada é invadida pelas determinações extraterritoriais, elas aparecem de forma caricatural expropriando os poderes éticos dos habitantes locais, despojando-os de todos os meios para limitar o dano. A localidade no mundo global significa amarras, significa sofrer consequências danosas de um processo de exclusão do espaço criado pelo ciberespaço. Não há espaço para opiniões locais.

A exemplo disso estão às redes da WEB, a elogiadíssima interatividade do novo veículo é um exagero. A rede de interatividade não é para qualquer um, e jamais virá a se abrir totalmente para qualquer um. Os que participam da rede são da elite internacional, sistematicamente das camadas sociais mais elevadas, com poder na vida política, na indústria privada e na burocracia estatal, além dos intelectuais. Porém, mesmo aqueles que têm acesso são obrigados a escolher entre um provedor e outro, entre um pacote e outro. Os que não têm acesso à rede são abandonados às redes de TV sem qualquer simetria na relação entre os dois lados da tela cabem a eles a observação da vida dos poucos vigiados do Sinóptico, as celebridades.

No sinóptico os locais observam os globais, os globais não pertencem ao mundo dos locais, mas eles se encontram pelas telas de TV, os globais são admirados e tem o estilo de vida cobiçado pelos locais. Os ecos do encontro abafam os sons locais que são refletidos pelos muros da localidade revelando e reforçando a impenetrável solidez.

Eloísa Pereira Barroso – Professora Adjunta do Departamento de História da UnB.


BAUMAN, Zygmunt. Globalização e as consequências humanas. [?] Resenha de: BARROSO, Eloísa Pereira. Em Tempo de Histórias, Brasília, n.19, p.78-83, ago./dez., 2011. Acessar publicação original. [IF].

Construyendo lo Global. Aportes al debate de las Relaciones Internacionales – GODOY et al (M-RDHAC)

GODOY, Horacio J.; ARANA, Roberto González; OROZCO, Gabriel A.. Construyendo lo Global. Aportes al debate de las Relaciones Internacionales. Barranquilla: Edicifones Uninorte, 2011. 456p. Resenha de: ARANDA, Gilberto. Memorias – Revista Digital de Historia y Arqueología desde el Caribe, Barranquilla, n.15, jul./dez. 2011.

A menudo las investigaciones y reflexiones académicas acerca de la globalización y sus implicancias para el Sur nos llegan desde el Norte. La primera novedad con que nos sorprende la obra colectiva “Construyendo lo global: Aportes al debate de las Relaciones Internacionales” es dar un giro a la referida práctica por medio de una selección rigurosa y multidisciplinar que desde la óptica de diversos autores se esmera en pensar la configuración contemporánea de la arena internacional, y sus planteamientos para Sudamérica y Colombia. Aun así, en sociedades marcadas por la interdependencia, el movimiento de bienes, servicios y capitales y la transferencia de tecnología, este libro no deja de lado tópicos cruciales como la migración de contingentes humanos o la integración regional multidimensional brindando un aire siempre renovador para el debate de las Relaciones Internacionales contemporáneo. Sólo se echa de menos en su repertorio temático el tema medioambiental, ausencia que se entiende por los contenidos registrados en el evento que inspiró la obra, el congreso colombiano de la disciplina realizado el segundo semestre de 2009, con presencia de invitados internacionales.

El libro referido corresponde a un aporte de la Universidad de Norte de Barranquilla para una disciplina que en América Latina ha tenido proyección teórica desde el enfoque de la dependencia en los años sesenta, bajo una edición preparada y cuidadosamente presentada por tres de sus profesores del departamento de Historia y de Relaciones Internacionales, Horacio Godoy, Roberto González Arana y Gabriel Orozco Restrepo. Los investigadores imprimen su sello en cada una de las tres partes que contiene la obra. Aunque el título puede parecer para los neófitos un tanto ambicioso, los editores obtienen un resultado equilibrado de las disciplinas, temáticas y propuestas esbozadas en el texto. Adicionalmente, -hay que decirlo- es posible advertir cierta inclinación por los tópicos económicos y de gobernabilidad, especialmente sensibles y atingentes para este país caribeño, pacífico y andino. Lo anterior sin olvidar los elementos contextuales de su inserción internacional.

La primera parte se concentra en el mega proceso de globalización, comprendió en su despliegue de larga duración y multi dimensionalidad. Desde esta perspectiva destaca la evaluación acerca de la vigencia la Doctrina Monroe, con casi 200 años de enunciación, para las relaciones intra hemisféricas actuales. Pero también justifica la presencia de diversos artículos que enfatizan la lógica centro periferia en las relaciones inter-estatales entre el norte y el sur. A este último respecto destaca la mirada alusiva al Estado Nación y sus construcciones comparadas en América Latina y Europa, así como las posibilidades de gobernanza en un contexto de globalización. Se trata de un catálogo temático que atiende a los problemas de la denominada agenda global desde los niveles macro y meso, como atiende las cuestiones referentes al movimiento de personas más allá de las fronteras estados y al interior de las mismas. Para dicha sección también es relevante entonces explorar el proceso de toma de decisiones para enfrentar desde el Estado y la Sociedad Civil problemas cuya resolución involucran a más que el actor gubernamental.

La segunda parte aborda desde una óptica multi-temática varias cuestiones diversas, destacando los tópicos de seguridad, comercio e integración con un inequívoco énfasis regional, complementado por la trayectoria preformativa de la multiplicidad de nuevos actores (trans) internacionales que emergen en el referido contexto globalizado. La idea dominantes de estos últimos que como afectan/potencian la gobernabilidad de un sistema internacional, aún regido por ciertos Estados, aunque con gravitación creciente de otros actores no estatales. Los temas de integración abordados son particularmente pertinentes en momentos que una malla -madeja en ocasiones- de acuerdos inter-intra-sub-regionales se establecen para el área, creándose nuevas instituciones y planteamientos que no pocas veces replican otras existentes. El afán por integrar en múltiples velocidades y procesos aparece con una tonalidad confusa para el observador lego que los artículos de esta parte contribuyen a esclarecer. La seguridad, en cambio, adopta una perspectiva regional examinando con parsimonia académica las teorías vigentes. Aun cuando los conflictos limítrofes forman parte de la relación vecinal de América Latina, la presencia de artículos acerca de terrorismo destaca la relevancia del tópico para Colombia así como el carácter preventivo que tiene dicho estudio en la región.

Finalmente al tercera parte está centrada principalmente -aunque no exclusivamente-en las diferentes opciones del estado colombiano y su sociedad civil para desplegarse e insertarse en el ámbito internacional, enfatizando sus nexos con la región. La capacidad de afectar a Colombia y su ambiente -léase Sudamérica y el Caribe-por parte de las políticas específicas de potencias como Estados Unidos, Rusia y el gigante regional, Brasil, constituye otro de los aportes de la obra colectiva.

Uno de los principales méritos e este trabajo es que sin abdicar de los estudios de caso -del que es especialmente pródigo- contiene relevantes implicancias para estudiosos e investigadores del campo multidisciplinar de los Estudios Internacionales, atendiendo por cierto a Colombia y las implicancia de sus decisiones en política exterior para su papel y posición en los asuntos regionales e internacionales. Esta obra, en definitiva, es un ejemplo práctico de la utilidad académica del establecimiento de redes de investigadores al servicio de la reflexión profunda en torno a una disciplina, en este caso las Relaciones Internacionales.

El texto completo se puede consultar directamente desde la base de datos “Digitalia”

Gilberto Aranda – Profesor Instituto de Estudios Internacionales. Universidad de Chile.

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Por uma outra globalização: do pensamento único a consciência universal | Milton Santos

A obra por uma outra globalização tem como objetivo principal discutir o atual processo de globalização, abordando questões que trata da constituição da globalização; quais indivíduos de fato esta atual globalização beneficia? E se é possível dar novos rumos a atual história social no período da globalização?

O livro é organizado em seis partes, todas subdivididas em capítulos. A primeira parte é a introdução. Nesta compreende-se que o autor procurou introduzir os três eixos temáticos do livro, sendo a possibilidade de considerarmos pelo menos três mundos em um só: a Globalização como fábula; a Globalização como perversidade e a Globalização tal como pode ser, sendo esta pautada na solidariedade humana. Leia Mais

A história da destruição cultural da América Latina: da conquista à globalização | Fernand Báez

A história da destruição cultural da América Latina: da conquista à globalização é um dos estudos mais completos sobre o continente americano. O autor aborda em 390 páginas a saga da conquista e da submissão dos povos nativos ao modelo politico europeu.

É uma obra intensa, fundamentada em fontes primárias, coletadas em arquivos europeus e latino-americanos. Fernando Báez analisa criticamente a destruição dos bens culturais, tradições e costumes dos povos nativos e assinala aspectos paradoxais da conquista europeia na América, como a construção do Novo Mundo. Segundo Báez, para o êxito da obra da conquista foi necessário destruir e saquear as sociedades nativas.

A proposta do autor é apresentar a invasão das terras americanas e a destruição das sociedades nativas por meio do ‘genocídio cultural’. Dessa forma, Báez tece considerações sobre a ética da conquista e o sucateamento do Novo Mundo durante os séculos XVI aos dias atuais.

O livro é bem construído metodologicamente. A coleta de dados em arquivos, bibliotecas, acervos particulares, além do apoio de estudiosos e familiares, é apresentada no início da obra, quando Báez estende seus agradecimentos a todos que o auxiliaram durante quatro anos de pesquisa. Pela intensidade da pesquisa, o livro já é um referencial teórico para a história da América.

Deve-se destacar também nesse estudo a construção de novos conceitos para explicar a trajetória da ‘conquista e destruição cultural da América Latina’ e os percalços acadêmicos enfrentados pelo pesquisador como entraves burocráticos para a consecução de uma obra instigante que se confronta com teorias já cristalizadas sobre a história do Novo Mundo. Por fi m, deve-se salientar o fragmento do brilhante discurso de Tácito sobre o sentido de devastação das culturas e a ação dos predadores do mundo.

A obra é elaborada em três partes temática se um Apêndice. Cada parte é composta de capítulos. Na primeira parte, Báez discorre sobre o saque da cultura americana, apontando as causas do ‘etnocídio’, desde o assassinato da memória, quando a estátua da deusa Coatlicue, detentora da vida e da morte dos homens, é encontrada em 1790 e levada para o pátio da Universidade do México. Naquela ocasião, após uma análise ligeira, foi sugerido que deveria ser novamente enterrada para que sua presença não despertasse a recordação da religião antiga entre os ‘indígenas insensíveis à bondade do cristianismo (p.55)’. Em 1804, o barão alemão Alexander von Humboldt, após examinar aquela arte indígena, mandou que a enterrassem. Apenas em 1982 o governo mexicano permitiu que fosse exposta ao público. O mesmo ocorreu com a descoberta da Pedra do Sol, um gigantesco monólito com um calendário asteca, encontrada na Plaza Mayor, e guardada na Catedral Metropolitana. Só a pressão popular conseguiu que a Pedra do Sol fosse levada para o Museu.

Assim como a estátua de Coatlicue e a Pedra do Sol, a memória coletiva e os imaginários astecas foram arrancados da história dos antigos mexicanos.

A História da destruição cultural das sociedades americanas estava apenas começando. Associada à ação predatória dos símbolos materiais, a Igreja inicia o processo de dessacralização da religião indígena para ressacralizar a vida espiritual através evangelização e da força da Inquisição.

Ainda na primeira parte, Báez trata da grande catástrofe que resultou na transição colonial, na censura intelectual e espiritual, além da aplicação de um programa de transculturação definitiva. Este consistiu na aplicação da educação escolástica, através dos princípios rígidos da Contrarreforma para apagar os vestígios da educação indígena dos Calmecacs, no México e dos Amautas, nos Andes. Não se esqueceram, nessa perseguição insana, da cultura africana, abatida da mesma maneira durante os longos séculos de devastação.

A segunda parte do livro focaliza do saque cultural, as guerras, comércio e a implantação do império. Báez discorre sobre os estragos, os primeiros butins e alcança o século XX com o saque nazista. Lembra o Holocausto, a aniquilação sistêmica de milhares de judeus e, sobretudo, o memoricídio, quando milhões de bens culturais tangíveis e intangíveis foram destruídos em expurgos inimagináveis (p.208).

Báez traça um paralelo com a destruição mundial e lembra os saques dos chineses, as questões da Palestina a Sarajevo, além dos ataques à Bamyane à Bagdá.

Na terceira parte, o autor discute a Transculturação e o Etnocídio na América Latina, enfatizando a fatalidade da memória, os esquecimentos e sobretudo, a identidade cultural. No capitulo III apresenta os novos conceitos introduzidos para análise da destruição cultural da América Latina, destacando etnocídio, memoricidio, aculturação e transculturação. Enfatiza também a estratégia do predador, assinalando que a primeira coisa que se ataca numa guerra, entendidas como contenda, confusão e discórdia, é a memória coletiva. Assim, analisa guerra como a arte de confundir o inimigo (p.300) e complementa que qualquer guerra fica incompleta se não causar desconcerto por meio do ataque aos símbolos de identidade, que são fundamentais para a resistência. Dessa forma, a hegemonia, entendida como a supremacia de um estado ou grupo sobre o outro, requer a aniquilação dos motivos principais da resistência do adversário com propaganda ou destruição indireta ou direta (ataque psicológico ou cultural), explica Báez.

O autor conclui, em sua análise sobre a destruição cultural da América Latina, que:

  • O saque cultural foi um etnocídio e memoricídio premeditado para mutilar a memória histórica e atacar a base fundamental da identidade das populações
  • Com essa estratégia perderam- -se 60% do patrimônio tangível e intangível da região.
  • A transculturação produziu uma operação bem sucedida de alienação.

Maria Teresa Toribio Brittes Lemos.

 


BÁEZ, Fernando. A história da destruição cultural da América Latina: da conquista à globalização. Rio de Janeiro: Editora Nova Fronteira, 2010. Resenha de: LEMOS, Maria Teresa Toribio Brittes. Revista Maracanan. Rio de Janeiro, v.7, n.7, p.199-201, 2011. Acessar publicação original [DR]

 

Globalização, Democracia e Terrorismo – HOBSBAWM (CTP)

HOBSBAWM, Eric. Globalização, Democracia e Terrorismo. São Paulo: Companhia das Letras, 2007. Tradução de José Viégas. Resenha de: SILVA, Karla Karine de. Sobre a Globalização, a Democracia e o Terrorismo. Cadernos do Tempo Presente, São Cristóvão, n. 01 – Outubro de 2010.

Em seu mais recente livro, Globalização, Democracia e Terrorismo (Tradução José Viegas. São Paulo: Companhia das Letras Ed. 2007, R$ 36,00), o historiador egípcio Eric Hobsbawm reúne uma coletânea de palestras e conferências pautadas em alguns dos temas mais atuais da contemporaneidade. Dividida em dez capítulos, sua obra analisa fatos e situações focadas principalmente nos séculos XX e XXI. Hobsbawm aborda diferentes e relevantes problemas, como os impérios hegemônicos estabelecidos por Estados Unidos e Grã-Bretanha e suas diferenças; o fim da Guerra Fria e suas conseqüências; a democracia em suas diversas particularidades; o terrorismo, esta novidade apenas aparente na geopolítica, a crescente violência e seus deslocamentos de eixos; a expansão do Império norte-americano. Todos os escritos são permeados por discussões sobre guerra, paz, segurança, nacionalismo, globalização, economia e ordem pública. Há também considerações significativas sobre o futebol, relacionado com criatividade a alguns dos temas mencionados.

Eric Hobsbawm nasceu em Alexandria, em 1917, e educou-se na Áustria, na Alemanha e na Inglaterra. Historiador contemporâneo, recebeu o título de doutor honoris causa em universidades de diversos países. Lecionou até se aposentar no Birkbeck College, da Universidade de Londres, e posteriormente na New School for Social Research, de Nova York. Publicou no Brasil obras como Era dos Extremos (1995), Ecos da Marselhesa (1996), Sobre História (1998), O Novo Século (2000) e Tempos Interessantes (2002).

Embora não deixe de mencionar exemplos sobre guerra, globalização e terrorismo em um punhado variado de países nos cinco continentes, as conferências selecionadas para o livro concentram-se nas políticas norte-americana e britânica. Hobsbawm deixa claro sua crítica e contrariedade ao expansionismo do governo de George W. Bush (2000-2008). O historiador põe em perspectiva comparada os fenômenos que fizeram desses países – EUA e Inglaterra – grandes impérios, ao mesmo tempo em que apresenta suas diferenças. Tratando-se da Grã-Bretanha, centro da economia mundial no século XIX, Hobsbawm explica que suas pretensões expansionistas eram, e são, sobretudo comerciais. Dos anos 1800 até a primeira metade do século XX, o império britânico era o maior exportador de produtos manufaturados, ainda detentor de uma força naval incomparável e, embora tenha encontrado um forte concorrente tecno-industrial (EUA) no século seguinte, reestruturou-se no mercado investindo ainda mais em instituições financeiras, bancos e exportação de capitais.

Os EUA também têm um vasto mercado-mundo tecno-industrial e sua frota aérea não enxerga concorrentes. Entretanto, sua política externa expansionista pautada em parte na exportação do chamado “modelo americano de ser”, e mais incisivamente pela ocupação militar de países mais fracos, valendo-se da ideologia que Hobsbawm classifica de “uma missão imperial (…) a implicação messiânica da convicção fundamental de que sua sociedade livre é superior a todas as demais e está destinada a tornar-se o modelo global”, difere em muito dos ideais britânicos de superioridade. O reconhecimento de seus limites e da não interferência nas políticas internas dos países “ocupados” economicamente pela Grã-Bretanha, impedem-na de cair na megalomania messiânica americana.

A ênfase que Hobsbawm confere às discussões sobre as hegemonias norte-americana e britânica se justifica pelo fato de que, diante das crises mundiais, – principalmente as que emergiram com o fim da “Guerra Fria” – apareceram pequenos Estados independentes e internamente conflituosos. Isto facilitou o acesso de grupos terroristas a armamentos mais sofisticados, aumentou da violência e inflacionou as guerras civis (as guerras larvais em “países sem importância” para os falcões do exército americano são o melhor exemplo disto). O mundo Pós-Guerra Fria experimentou histerias diante de catástrofes (aquecimento global), pandemias (AIDS, gripe aviária) e viu, pela TV e Internet, a ascensão da propaganda do terrorismo. Por isto, o historiador afirma que é urgente a necessidade que os povos têm de um sistema governamental que interfira positivamente como agente promotor da ordem global. Seriam os EUA, potência mundial militar e tecnológica, tal agente? Esta questão permeia toda a obra do autor, especialmente os capítulos seis a oito.

O conceito atual de democracia-liberal, muito distante dos seus ideais originais, tem sido desculpa para as “intenções” messiânicas americanas. O autor ressalta que esta proposta estadunidense não resolve os problemas, tampouco está ali o modelo de governo a ser seguido pelas nações do mundo. As diferenças culturais, as necessidades de cada povo e as variadas concepções de mundo dentro das culturas, elegem qual modelo de governo adéqua-se melhor aos problemas das diversas sociedades.Neste sentido, a ânsia de um governo adequado às necessidades de um grupo ou a resposta a algum tipo de imperialismo, tem alimentado a crescente onda de terrorismo. A análise de Hobsbawm sobre os agentes do terror e os elementos que lhe dão embasamento é provocativa. Ele considera que este não se concentra em grupos ativistas específicos como, por exemplo, ETA, IRA, Al-Qaeda, Hamas, Al Fatah, Jihad Islâmica da Palestina, Hezbollah, Tigres Tâmeis, Partido dos Trabalhadores do Curdistão etc., mas acentuadamente está presente em Estados (autoritários ou liberais), nas suas táticas de coerção e “controle”.

Em suma, Globalização, Democracia e Terrorismo traça vividamente um painel do cenário político internacional analisando a situação mundial e os problemas mais agudos com que nos confrontamos atualmente. Mais do que uma mera apresentação da situação mundial, o autor deixa claro sua oposição às intervenções armadas como desculpa para resolver questões internacionais. Condena fortemente as pretensões imperialistas e hegemônicas, aceleradoras da violência e, sobretudo, demonstra sua preocupação com o colapso no qual o mundo se encontra atualmente. Em época de guerras, falências e forte crise econômica, uma obra como esta pode nos auxiliar a observar de maneira crítica as ondas rápidas dos acontecimentos no tempo presente.

Karla Karine de Jesus Silva – Graduanda em História pela Universidade Federal de Sergipe. Bolsista PIBIC/CNPq. Integrante do Grupo de Estudos do Tempo Presente – GET.

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Mujeres e imaginarios de la globalización (reflexiones para una agenda teórica global del feminismo) – AMORÓS (REF)

AMORÓS, Celia. Mujeres e imaginarios de la globalización (reflexiones para una agenda teórica global del feminismo). Argentina: Homo Sapiens Ediciones, 2008. 338 p. Resenha de: LEÓN, María Antonia García de. Celia Amorós, o la maestría de uma filosofa feminist. Revista Estudos Feministas, vol. 18, no. 3, setembro-dezembro – 2010, pp. 952-956.

No parece ocioso mencionar la llamada de atención en pro de la teoría que hace la conocida feminista mexicana, Marta Lamas, en una obra reciente,1 la cual se suma al esfuerzo de reflexión de las teóricas feministas, entre las cuales, sin duda, destaca la maestría de Celia Amorós, en este libro que reseñamos, como en tantas otros, de su ya fecunda producción. La ilustración es la fuente de la que bebe Amorós: la Ilustración francesa, en sentido estricto, y la ilustración que proviene del gran arsenal de lecturas clásicas y modernas que articula con sabiduría nuestra autora.

La distancia y la crítica son el quid del oficio intelectual. Sin crítica, ni balances, no avanza el conocimiento ni la causa feminista. La maestría de Amorós nos ofrece una excelente ración de todo ello. La obra que reseño es un auténtico compendio de autoras/es revisados y “digeridos” por un buen paladar, además está escrita con claridad expositiva y gracejo. ¿Se puede pedir más? Leia Mais

América Latina: identidades em construção – das sociedades tradicionais à globalização | Maria T. T. Lemos

O livro América Latina: identidades em construção – das sociedades tradicionais à globalização, organizado por Maria T. Toríbio Lemos (Professora da UERJ), tem o objetivo central de realizar um amplo estudo sobre a cultura latino-americana. Fruto das pesquisas realizadas pelo Núcleo de Estudos das Américas (NUCLEAS) e pelo Laboratório de Estudos das Américas (LEPAS) do Programa de Pós Graduação em História da Universidade do Estado do Rio de Janeiro, coordenados pela Professora Toríbio Lemos e pelo Professor Paulo Seda, reúne oito artigos de diferentes pesquisadores e de distintas abordagens da história da América Latina, unidos entre si pela preocupação com as questões atinentes à identidade latino-americana. Em síntese, os textos revelam a inquietude e a particularidade de cada pesquisador ao debruçar-se sobre as adversidades e problemas presentes nas sociedades sulamericana e caribenha “como a violência, a pobreza, a educação, a exclusão social, as grandes diferenças sociais entre ricos e pobres, além dos problemas políticos e econômicos dos diversos países” (p.7).

A obra se desdobra em dois blocos, Sociedades tradicionais e Modernidade e globalização, que dão ao leitor a dimensão espaço-temporal sobre a qual os estudos se lançam. O primeiro bloco, constituído por três artigos, transita “pelas práticas culturais e representações das sociedades tradicionais”, trazendo à luz discussões acerca da alteridade, exercício do poder, mitologia, cerimônias e festividades; já o segundo bloco, composto por cinco textos, transcende os aspectos primários das sociedades ditas “tradicionais”, atingindo “a complexidade das estruturas modernas das sociedades ocidentais” (p.7), abordando as relações da religião e do poder, a efemeridade do tempo presente, a educação e a pluralidade cultural, a economia global e, por fim, o contexto da América Latina no processo das migrações internacionais.

Após essa concisa apresentação da obra, antes de olhar minuciosamente cada artigo, convém lembrar que a questão da identidade mostra-se fundamental nos estudos culturais, na medida em que examinam os contextos dentro e por meio dos quais tanto os indivíduos quanto os grupos constroem, negociam e protegem sua identidade. Desse modo, os estudos culturais valem-se das interpretações que defendem a identidade como uma resposta para algo externo e diferente dela, a alteridade. Notadamente, o reconhecimento dessa identidade como algo que não é somente construído, mas também dependente da existência de um outro, abriu um lócus para grupos marginalizados e oprimidos historicamente objetarem e renegociarem as identidades que lhes foram impostas no processo de dominação. Este entendimento de identidade é a chave para a leitura da obra ora resenhada.

Ao longo do primeiro capítulo, Mundo Novo e Paraíso Terrestre: O Transe dos Viajantes na Conquista da América, Alexandre Belmonte expõe os encontros e confrontos entre culturas a partir de fontes como os registros dos viajantes (exploradores e conquistadores), da cartografia européia do século XV e de obras literárias. Destarte, contextualiza o período, discorrendo sobre a complexidade e as dificuldades em se realizar uma viagem de longo curso para o “Mundo Novo”, sobretudo pela onerosidade de cada aventura e pela necessidade de se conseguir financiamentos que, em geral, provinham do Estado, do clero ou da ascendente burguesia, quando não por todos ao mesmo tempo. Além disso, segundo o autor, havia no imaginário europeu a herança da mentalidade medieval que fomentaria uma perspectiva pessimista em relação às viagens, representada pelos mitos do além-mar.

Todavia, o eixo central deste capítulo começa a ser delineado a partir do retorno dos viajantes para a Europa, visto que “o retorno evocava uma „operação escrituraria‟ […] em que a alteridade era definida por um corte que marcava a diferença” (p.16). Eis o ponto. Para Belmonte não interessa tanto os modos de ser e viver dos ameríndios, pois “são muito mais interessantes as próprias possibilidades discursivas dos europeus sobre a alteridade representada pelos indígenas do Mundo Novo do que o modus vivendi destes” (p.17). Assim, o olhar europeu transcrito nos relatos e narrativas dos viajantes, permite ao pesquisador observar as cosmovisões e os imaginários que colocaram o europeu em contato com a alteridade cultural de forma abrupta e total.

A constatação do alto grau de organização e desenvolvimento dos Astecas, feita pelos espanhóis quando da chegada ao México, é explorada pelo professor Paulo Roberto Gomes Seda. Este os ordena a partir da influência da religião praticada pelos Astecas do período arcaico e pelos remanescentes da civilização Tolteca. Guerra, religião e poder entre os Astecas, assim chama-se o segundo capítulo, no qual o autor mostra com muita perspicácia que o contato, o conflito e a conjugação de costumes, tradições, ritos e mitos, ocorridos na peregrinação dos “bárbaros” Astecas para as regiões das cidades do lago, onde aconteceu o choque com as tribos que ali viviam, transformaria definitivamente a história desses povos, alçando os Astecas à condição de herdeiros das brilhantes civilizações do México central, tornando-os senhores de um vasto império.

O cerne do trabalho de Seda imperiosamente se coloca na exposição da organização e do exercício do poder entre os Astecas, ocorrida progressivamente a partir da religião e de uma dualidade por ela forjada que, em menos de dois séculos, intensificou-se e espraiou-se para todos os âmbitos da vida pública e privada deste povo, altamente ritualístico e crente. De um lado, o culto aos deuses guerreiros Huitzilopochtl e Tezcatlipoca, respectivamente, o grande deus solar e o deus do céu noturno, das trevas e do vento da noite; de outro, a incorporação dos deuses da terra e da água das civilizações sedentárias: Tláloc, deus camponês; e Quetzalcoatl, deus padroeiro dos sacerdotes. O paradoxo assinalado pelo autor incide justamente na questão da religião, pois esta mesma construção identitária, religiosa, dicotômica, que elevou os Astecas à hegemonia do Altiplano central, também foi, segundo ele, um dos fatores capitais para a derrocada dos Astecas frente aos conquistadores espanhóis, uma vez que essa religiosidade “contribuiu para modificar profundamente a hierarquia de valores reconhecidos por uma civilização dividida em si mesma pela dualidade de suas origens. […] dualidade presente, inclusive, diante dos conquistadores (deuses ou humanos), levando à posição vacilante do imperador e da própria sociedade” (p.53).

Dando continuidade às questões religiosas, mitológicas e ritualísticas das sociedades tradicionais, o estudo de caso intitulado Mitos e ritos andinos – Wana kawri Waka – Percursos entre as tradições orais e a contextualização dramatizada da história, apresentado pela professora Maria Teresa Toríbio B. Lemos, encerra o primeiro bloco do livro. Neste terceiro capítulo, a autora descreve aspectos das práticas culturais e representações simbólicas da antiga sociedade quéchua em homenagem ao deus Wana Kawri, considerado pelos camponeses da região andina “um deus protetor e reprodutor, que fertiliza o solo e multiplica a produção naquela região árida dos Andes” (p.56). Nesta parte, Lemos acentua a importância dos mitos para essas sociedades, distinguindo-os do rito e da cerimônia, e busca no relato de Felipe Guaman Poma de Ayala – um dos principais cronistas do Vice-Reino do Peru no século XVII – a recuperação histórica das narrativas míticas e ritualísticas quéchuas, fontes valiosas para “o conhecimento desses dois universos em confronto, o da sociedade nativa quéchua e o do dominador espanhol na América” (p.59). Ao fim e ao cabo, Maria Lemos discorre sobre a estratégia praticada pelos espanhóis na conquista da região andina e aponta para a importância do cristianismo, da evangelização mediada pela aproximação e identificação das divindades indígenas, como poderoso mecanismo de aculturação desses povos. Dessa forma, à medida que se desqualificavam os deuses indígenas, impunha-se legitimamente o Deus cristão e, por conseguinte, a cultura européia. Para além destas questões, o estudo se justifica pela tenacidade desses mitos que, ainda hoje, são reproduzidos, ressignificados e reelaborados pelo imaginário e pela memória coletiva dessas comunidades durante as festas agrícolas e folclóricas na região andina do Peru, Bolívia e Equador.

O quarto capítulo inaugura o segundo bloco e traz como principal discussão as relações de poder, expressadas, neste caso, pela instituição religiosa e/ou pelas “autoridades” religiosas. Sob o título Religião e Poder na América Latina: Um breve estudo sobre a religião como forma de controle social no Brasil, Gilberto Angellozi recorda que as relações de poder se estabelecem em todos os níveis, formal ou informal, por um determinado período ou perpetuamente. Igualmente, enfatiza que violenta ou não, a coerção não deixa de existir e aquele que a exerce ou faz uso dos seus mecanismos adquire poder sobre o outro e isso lhe dá prazer. Ocorre que, para o autor, o poder religioso passa por esse mesmo princípio e “o exercício do poder se estabelece ainda hoje como forma de libertação, especialmente nos meios religiosos, onde os fundamentalismos, sejam de direita ou de esquerda, tendem a reproduzir estruturas de dominação” (p.70). Nesse momento, o leitor tem a falsa impressão de que determinados segmentos religiosos, menos radicais, não estariam submetidos aos mecanismos do poder e aos sistemas de coerção anteriormente descritos como presentes “em todos os níveis” da vida social. É possível que essa afirmação derive da própria influência religiosa do autor que, entre outras formações, é teólogo. Talvez por isso acredite internamente em alguma forma de religião não dominadora. Afora esta crítica pontual, o estudo revela-se desvelado de uma ideologia cristã. Aliás, notoriamente, Angellozi apresenta a religião como fonte de poder e dominação, assinalando no desrespeito ao próximo, ao diferente, um dos principais causadores dos problemas sociais do passado e do presente, pois “sempre que alguém usa alguém para garantir o alicerce de um projeto pessoal, a figura do outro desaparece. Ocorre assim o desrespeito pela vida, que se traduz em destruição da natureza e das relações sociais e políticas” (p.80).

No quinto capítulo intitulado Pós Modernidade – O Sólido se Desmancha – O Eterno é Provisório e o Futuro é Presente, Raimundo Lopes Matos propõe uma análise prospectiva da Pós-Modernidade e ressalta a importância da mudança de paradigma ao observar as suas influências e conseqüências na vida do homem nos seus múltiplos domínios. Antes de tudo, o autor conceitua e situa historicamente a Pós-Modernidade, tarefa que lhe ocupa boa parte do texto. Também utiliza outros conceitos fundamentais para o entendimento deste tempo presente como, por exemplo, a globalização e a desterritorialização. Conclui afirmando que todos, em todos os âmbitos, estão envolvidos na cultura do consumismo, do veloz, do instantâneo e do on-line, “celebrando uma nova época”, “resultando em uma pluralidade de fragmentos complexos e um fluir de uma presentidade inarredável” (p.94).

Luiz Henrique Nunes Bahia, Maria Cristina Leal e Célia Linhares, escrevem conjuntamente o sexto capítulo denominado Debate sobre o pluriculturalismo na Gestão da Educação Pública: Estado do Rio de Janeiro e Rede Municipal de Nova Iguaçu. Dentro da conjuntura atual, os autores entendem que há uma pluralização da cultura urbana como resultado direto do confronto de múltiplas mensagens e ideais dispersos na sociedade globalizada. Essa dinâmica é projetada para as relações de poder e dominação de grupos e instituições, onde os pesquisadores exploram “os contrastes e tensões entre culturas políticas manifestas nos depoimentos de professores e demais segmentos da comunidade escolar” (p.99). Especificamente, nesta pesquisa, fez-se a análise comparativa entre duas regiões e contextos distintos: a rede pública estadual de ensino (RJ) e a rede pública municipal (Nova Iguaçu/RJ). Analiticamente, observaram que a pluralidade cultural encontrada hoje nas cidades mantém as hegemonias do centro decisor maior, mas conserva lugares ainda de natureza local que permitem entender as formas hegemônicas de poder.

O sétimo capítulo, As negociações no âmbito da Organização Mundial do Comércio e o papel do Mercosul, de Aléxis Toríbio Dantas, esboça sucintamente a evolução do Mercosul e suas ações nas negociações recentes, de maneira especial, frente à OMC, sublinhando a importância dos acordos regionais para os países emergentes, garantia de maior poder de barganha destes países perante os Estados Unidos e à União Européia. Já no último capítulo, intitulado Movimentos sociais da América Latina e a construção de novas identidades, Maria Luzia Landim trata da questão imigratória no nordeste do Brasil e reflete sobre as dinâmicas geradas nos processos de adaptação e estabelecimento físico destas pessoas, especialmente, no que concerne aos sentimentos de perda de identidade, imediatamente compensados pela procura ou criação de novos contextos e retóricas identitárias.

Finalmente, se, pelo exposto, pode-se ter uma noção sobre a questão identitária na América Latina, o conjunto de artigos apresentados mostra a amplitude e a pluralidade de temas que emergem desse recorte temático, bem como deixa muito claro que este não é um debate estanque, inexorável, mas sim uma discussão que se renova e se amplia a cada dia. Portanto, o principal mérito do livro reside na proposta abrangente e aberta dos autores de trazerem à luz assuntos polêmicos sem a pretensão de oferecer respostas definitivas, sem dúvida, instigando o leitor mais inquieto a buscar suas próprias conclusões.

Fábio Bastos Rufino – Licenciado em História pela Universidade Federal do Rio Grande do Sul. Mestrando em História pela Pontifícia Universidade Católica do Rio Grande do Sul – Bolsista CAPES.


LEMOS, Maria Teresa Toríbio (org.). América Latina: identidades em construção – das sociedades tradicionais à globalização. Rio de Janeiro: 7 Letras, 2008. Resenha de: RUFINO, Fábio Bastos. Aedos. Porto Alegre, v.2, n.5, p. 146- 151, jul. / dez., 2009.

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Desafios Brasileiros na Era dos Gigantes | Samuel Pinheiro Guimarães

O atual secretário-geral de relações exteriores do Brasil, embaixador Samuel Pinheiro Guimarães escreve uma obra fundamental para compreendermos os principais dilemas do desenvolvimento nacional frente ao cenário já consolidado da Globalização enquanto processo no qual o Brasil está irremediavelmente inserido. É interessante localizar este trabalho, para entendermos melhor as suas motivações e apurarmos a nossa leitura.

Nos seus mais de 30 anos de carreira, Guimarães assistiu às diversas transformações na política externa brasileira, incluindo-se atuação na SUDENE e na Embrafilme durante o regime civil-militar. Foi um dos principais advogados da não-entrada do Brasil na Área de Livre Comércio das Américas ao longo dos últimos 10 anos. Contudo, a notoriedade do trabalho do autor só ganhou espaço devido com a guinada nas relações exteriores do Brasil que ocorre inicialmente em 2003 e, mais notadamente, no segundo mandato do governo Lula. Leia Mais

Brasil e China na Globalização | Marcos Cordeiro

O texto coloca a diferença de inserção do Brasil e da China no contexto neoliberal principalmente no período de 1980 a 2006, onde o primeiro cresceu cerca de 2,5% (Produto interno) e o segunda 10% (Produto interno). No Brasil, além da crise da dívida externa e crise fiscal foram adotadas as políticas neoliberais, que consistiam na liberalização do mercado, privatização de empresas, resultando em estagnação, nesse contexto o Brasil seguia o “Consenso de Washington”. Na China foi implementado um acelerado e moderno crescimento, mecanismos de mercado, tais como o investimento externo, também uma estratégia de liberalização, esses sob o controle do Estado, o modelo chamado de “Consenso de Pequim”, o mesmo também foi analisado por Joshua C Ramo, ex diretor da revista Times, que antes encontrou estruturas políticos sociais importantes por de trás de uma estratégia de desenvolvimento econômico. Leia Mais

Relações internacionais: visões do Brasil e da América Latina | Estevão Chaves de Rezende Martins || A construção da Europa: a última utopia das relações internacionais | Antônio Carlos Lessa || Relações internacionais: economia política e globalização | Carlos Pio || Relações internacionais: teorias e agendas  | Antônio Jorge Ramalho da Rocha || Cooperação/ integração e processo negociador: a construção do Mercosul | Alcides Costa Vaz || Relações internacionais: cultura e poder | Estevão Chaves de Rezende Martins || Relações internacionais da América Latina: velhos e novos paradigmas | Amado Luiz Cervo || Relações internacionais e temas sociais: a década das conferências | José Augusto Lindgren Alves || Relações internacionais: dois séculos de história | José Flávio Sobra Saraiva

Com a publicação de mais quatro volumes, completa-se a coleção “Relações Internacionais”, do Instituto Brasileiro de Relações Internacionais (Ibri), organizada pelo diretor desse, José Flávio Sombra Saraiva. Com o apoio da Fundação Alexandre de Gusmão (Funag) e o patrocínio da Petrobrás, a coleção vem ao encontro e confirma, ao mesmo tempo, a maturidade que tem alcançado a produção acadêmica brasileira na área de relações internacionais.

O volume organizado por Estevão Chaves de Rezende Martins, Relações internacionais: visões do Brasil e da América Latina, reúne uma série de trabalhos sobre diversos temas importantes, escritos por especialistas brasileiros, argentinos e europeus. O livro é uma bela e mais do que merecida homenagem a Amado Luiz Cervo, editor desta Revista, que tem uma produção acadêmica notável no âmbito da história das relações internacionais, particularmente da política externa brasileira. Leia Mais

Disposable People: New Slavery in the Global Economy – BALES (CSS)

BALES, Kevin. Disposable People: New Slavery in the Global Economy. Berkeley: University of California Press, 1999. 289p. Resenha de: LEWIS, Magda. Canadian Social Studies, v.37, n.2, 2003.

Reading the book Disposable People: New Slavery in the Global Economy by Kevin Bales is like lifting the covers off what we already know about the seamy side of globalization, but would rather not look at. From his comprehensive introduction to the concluding chapter that calls the reader to action, Bales insists that we look the effects of our western/northern privilege in the eye and hold it in our gaze long enough to be appropriately horrified without being numbed. As we look on, the global economy runs rampant, touching down in the lives of communities and individuals just long enough to grab the efforts of their labour, leaving poverty and human devastation in its wake. Each chapter of Disposable People stops the frame and puts flesh on the bones and runs blood through the veins of the statistics on global poverty and human misery wrought by corporate profits and EuroWestern self-satisfaction with our standard of living.

Bales offers the term new slavery as the conceptual framing for the relationship between power and human indenturement, between profits and poverty, and between violence and economic dependence. In this passionately conceived work, Bales defines new slavery as the lived relationship between big profits and cheap lives (p. 4), in a context where efficiency is allowed to override responsibility and decency on a global scale. And in so doing, Bales invokes an appropriate sense of horror at the uses and abuses of power, wealth and privilege. Indeed, in holding up to view new slavery as the other side of globalization, each chapter in this well written book disabuses the reader from believing that this fresh century’s view of development and progress are as global as the economy that drives it.

The statistics on global poverty, destitution and hunger are not news. For most of the twentieth century it has been evident that the conditions of suffering of the world’s poor are not primarily a function of the lack of capacity of the planet to sustain life, but of the ever-increasing distance between the resources of the rich and of the poor. This is not to say that the world’s resources are limitless and infinitely supportive of an ever-increasing population oblivious to conservation. However, it is the case that inequitable life circumstances and commodity production for profit create and exacerbate the unequal sharing and protecting of what resources there are. These, Bales points out, are not natural conditions of inequality but, rather, constructed relations of power.

I found this book difficult to read, not because it lacks style or grace in its prose, nor because it lacks passion in its intentions. I found this book difficult to read because the descriptions, as Bales provides them, of the daily lives of people in five different countries (Thailand, Mauritania, Brazil, Pakistan and India), enslaved by the circuitous and complex web of the global economy, cannot be read as separate from the commodification of human lives that is the basis of advanced global capitalism. It was also difficult to read because, in exposing the template-magnified so we can see it better-of the workings of power, Disposable People illuminates both how narrow self-interest can turn human beings into fearsome monsters as well as the extent to which the corporate language and ideology of globalization has entered our shared discourse and our collective consciousness inviting us to myopia.

While Bales uses examples of particular places it would be a mistake to exoticize the economic relations he describes as peculiar to those places. He continually reminds us that those enforcing and benefiting from the free and indentured labour of others are not more monstrous than what we collectively are willing to bear. This is a point to which Kevin Bales returns again and again. In this regard, he is not pointing fingers but, rather, imploring all of us in northern and western nations, to take cognizance of the human cost of the consumerism we so often take for granted.

As hard as it is to read, more than anyone, young people, as young as senior high school students, need to read this book with the help of teachers committed to teaching for social justice. There is no question that it is only a change in ideology and practice that will turn cultures and nations toward a commitment to equity and humanity. Kevin Bales’ book gives us good reason to take this commitment seriously.

Magda Lewis, Ph.D. – Queen’s University. Kingston, Ontario.

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Global Systems – REES; JONES (CSS)

REES, David J.; JONES, Michael G. Global Systems. Edmonton: Arnold Publishing Ltd. 1999. 486p. Resenha de: BOYD, Kenneth. Canadian Social Studies, v.37, n.1, 2002.

As an educator I believe that students need to better understand the world they live in. In order to do this they have to be able to critically examine the political and economic systems that have brought about 20th century societies. If you are looking for a textbook to help students do this, then Global Systems is the one. Right from the beginning, Rees and Jones set out to explain the book’s purposes and make it very easy for the reader to understand what things they want to bring out.

Global Systems examines four political and economic issues with which 20th century societies are confronted. Part I traces the development of contemporary political and economic systems in theory. It accomplishes this by examining the values, beliefs, ideologies and thoughts upon which they are based. Models are used to assist in the understanding of these interrelationships and simple charts visually show the relationships between ideas. Part II looks at 20th century political and economic systems using case studies. These apply the theory and models used for understanding political and economic systems to case studies of different real-world democratic and non-democratic systems. The eight case studies deal with Canada, the United States, Sweden, Japan, Nazi Germany, the Soviet Union, the Russian Federation and China. After reading any one of these case studies the reader will have a very good understanding of all the issues. Interestingly, when certain points are raised in one case study they are compared to similar points in Canada. Models are used again, relating ideologies to political systems and economic systems and then relating political and economic systems to political economies. Part III deals with the challenges of the 21st century. The authors look at some contemporary issues and ideas including the examination of concepts such as nationalism, globalization, technology and information, global disparities, population growth and aging along with environmental protection.

Throughout the textbook the reader will find supplemental information, in the form of model icons, charts and related curriculum content, in the margins. The titles are coded by size, type and colour. This enables the reader to easily identify how the content is organized. Teachers will be able to easily create topic outlines of chapter content simply by following the hierarchy of headings. Review pages at the end of each chapter include a chapter summary along with questions and activities to assist learning. There are four pages of summary material inside the front and back covers for quick reference.

The Appendix provides the reader with a variety of ideas for studying, making notes, critical thinking, analyzing sources, essay writing and preparing for and writing exams. Some graphic organizers are provided as sample formats for organizing and learning new material. This textbook even has a web site dedicated to parts of it; readers simply key in a code supplied with the textbook. Overall the textbook is well written and the layout is exceptional with full colour. I highly recommend Global Systems for use as a classroom textbook or for one’s own reference.

Kenneth Boyd – Rosetown Central High School. Rosetown, Saskatchewan.

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Uma estranha ditadura – FORRESTER (RBH)

FORRESTER, Viviane. Uma estranha ditadura. São Paulo: Editora da Unesp, 2001. 187p. Resenha de: CARDOSO, Heloisa Helena Pacheco. Revista Brasileira de História, São Paulo, v.22, n.43, 2002.

Desemprego nos EUA é o maior em 4 anos: 113 mil é o número de postos de trabalho cortados pela economia americana em agosto1. Manchetes como esta continuam a nos assustar. Elas provocam uma sensação de instabilidade, porque questionam aquilo que acreditamos ainda ser vital para a sobrevivência ¾ o emprego. As matérias publicadas na imprensa cotidianamente tentam fazer uma análise da crise econômica que tem afetado o mundo nessas últimas décadas, mostrando os seus reflexos sociais (mesmo porque eles não podem ser negados, dada a sua objetividade) e os caminhos possíveis para a sua superação: a capacidade das empresas de apresentarem produtividade e competitividade no mercado. A lógica deste caminho acena para a possibilidade de uma retomada do crescimento econômico pelas empresas, o que geraria frutos positivos para o conjunto da população, com a diminuição do desemprego e com a melhoria das condições de vida. Questionar esta lógica é o eixo central da análise feita por Viviane Forrester em Uma estranha ditadura, livro escrito em 1999, lançado na França no ano seguinte e publicado no Brasil em 2001, pela editora da UNESP.

Neste livro, a autora retoma reflexões feitas em O horror econômico 2, sobre o momento atual do capitalismo, caracterizado pelo liberalismo absoluto, pela globalização e pela desregulamentação. O modelo que se instala, sob o signo da automação ou das tecnologias revolucionárias, não tem vínculo com o mundo do trabalho, embora esta categoria, sob a roupagem do emprego, continue a ser sustentáculo da sociedade. O trabalho, ou o emprego, transforma-se em mito, em algo constantemente buscado, embora em extinção; e o desemprego ¾ sua negação ¾ continua sendo objeto de promessas de solução, principalmente nos projetos de desenvolvimento e nas plataformas políticas.

Ao trabalhar com temas atuais, como globalização, ultraliberalismo, competitividade, produtividade, Viviane Forrester levanta questões que estão no cerne das reflexões não só de historiadores, economistas, cientistas políticos, mas também nas discussões cotidianas das pessoas que vivem a pressão da mídia, que as conclama para o sacrifício individual na busca de soluções para as economias nacionais, e a sedução das propostas governamentais que, em nome da competitividade nos mercados internacionais, acenam com a flexibilidade dos empregos e dos direitos sociais. Aliás, esta palavra vem adquirindo uma conotação mágica ao ser usada para caracterizar uma pseudomodernidade do capitalismo.

Em Uma estranha ditadura, o conceito de ultraliberalismo é privilegiado. Esse conceito é tratado pelos dirigentes da economia como globalização. Esta identificação tem um sentido político importante, na medida em que o termo globalização, que possui conteúdo histórico, transmite a idéia de um processo irrefutável, que aconteceria de qualquer forma e que, portanto, seria inquestionável. Mas é o próprio estatuto da História, que se constrói na transformação, que nos possibilita resistir a essa idéia:

(…) na verdade, vivemos em um de seus momentos mais efervescentes, que não vêm acompanhados por crises sociais, mas pela mutação de uma civilização até aqui fundada no emprego, o qual está em contradição com a economia especulativa atualmente dominante3.

Vinculando o desemprego às políticas ultraliberais dos últimos decênios, a autora questiona a chamada economia de mercado que se movimenta em um universo virtual, na qual os assalariados e os consumidores não têm importância.

O título do livro ¾ no original Un étrange dictature ¾ é uma referência à nova ordem do capitalismo, identificada com a globalização, um sistema despótico que acredita poder se dar ao luxo, graças à sua força, de suportar a moldura democrática. Essa estranha ditadura, que mais se assemelha a uma ideologia totalitária, assenta-se em uma contradição básica, que se manifesta na diferença entre o discurso que consagra a economia de mercado como modelo único de sociedade e as políticas concretas adotadas pelas empresas, onde se associam lucro e especulação e a acumulação se liga às flutuações virtuais da especulação, de suas apostas alucinantes.

Duas reflexões básicas se destacam neste livro. A primeira diz respeito ao surgimento dos working poors, referência aos que vivem abaixo do nível de pobreza mesmo trabalhando e que, por isso, não aparecem nas estatísticas sobre desemprego. Assistimos hoje à substituição do welfare ( o conceito de bem- estar social) pelo workfare (trabalho forçado), uma tarifa do trabalho só possível depois que os trabalhadores são desprovidos de todos os recursos, gerando a submissão, que os leva a aceitar quaisquer condições de trabalho e de vida. O workfare consiste, sob pretexto de inserção, em forçar as pessoas a aceitar qualquer trabalho. Esse processo expõe a relação, ainda muito forte, que existe entre dignidade e emprego, e seu efeito imediato, visível na divisão entre assalariados e desempregados, o que possibilita a dominação.

Outra reflexão que nos faz repensar em nossos conceitos sobre as relações sociais hoje é a sobre educação dos jovens. Por que formar jovens para profissões julgadas parasitárias e muito dispendiosas? No que empregá-los? O sistema educacional em todos os países está falido. As profissões que não têm vínculo com o mercado especulativo são consideradas supérfluas. Em nome do controle dos gastos públicos, postos de trabalho essenciais, como de professores, enfermeiras, médicos, vigias de museus, entre outros, são suprimidos, anunciando um futuro sombrio para as próximas gerações. Não estaríamos vivendo agora uma nova exploração desenfreada, que a história já registrou para o século XIX, apenas com uma nova roupagem?

Embora o texto apresentado por Forrester tenha o caráter de ensaio, naquilo a que a autora se propôs, ou seja, refletir sobre os caminhos que trilhamos hoje para superá-los, ele cumpre o seu papel. Poderíamos, talvez, cobrar uma análise teórica mais profunda, assentada em uma pesquisa documental mais consistente. Isto significaria desconhecer a trajetória da autora, romancista, crítica literária do jornal Le Monde, atividades que possibilitaram, por outro lado, a comunicabilidade que ela transmite pela escrita. A pergunta inicial proposta no texto, a respeito do ultraliberalismo, já cria um clima de envolvimento do leitor: De onde vem o fato de suas atividades prosseguirem com a mesma arrogância, de seu poder tão caduco continuar a se consolidar e de seu caráter hegemônico ampliar-se cada vez mais?4 Ao analisar esta questão, a autora chama a atenção para a propaganda que, ao indicar falsas premissas, encobre os verdadeiros problemas.

Vivemos hoje no mundo da comunicação acelerada. Recebemos cotidianamente uma avalanche de informações. Ao ler o jornal, ao assistir o noticiário na televisão, somos bombardeados com uma série de dados e eles nos exigem um posicionamento crítico diante dos acontecimentos. Como sujeitos dessa história presente, recebemos uma chuva de notícias, cujos pingos vão nos atingindo de forma isolada, com o objetivo de nos transmitir uma postura positiva a respeito dos despropósitos do mundo atual que, espera-se, possamos assimilar. Ser sujeito desta história é complicado: nossa capacidade de discernimento e análise vê-se prejudicada não só por sermos sujeitos na cena contemporânea, mas também pela velocidade e multiplicidade das informações que nos são repassadas a todo momento, onde se mesclam as imagens do avanço tecnológico e da saúde das empresas com as da pobreza e da violência urbana.

Ao tratar esta realidade, Uma estranha ditadura ultrapassa o objetivo de análise das relações econômicas e sociais contemporâneas e assume o caráter de denúncia. Denúncia das estratégias de convencimento que visam ocultar a realidade das propagandas, que buscam o consentimento para as políticas destruidoras feitas em nome da globalização, esse apanágio para todos os males.

Acompanhando todas as reflexões feitas pela autora, uma pergunta vital não poderia deixar de ser feita: ¾ existe futuro? Ou melhor, existe a possibilidade de um outro futuro? Para enfrentar a ditadura da economia de mercado é necessário desmantelar a impostura, construir formas de resistência, e a opinião pública pode ter um papel fundamental, forçando seus representantes políticos a mudar de direção. Hobsbawm5, em artigo onde analisa a falência da democracia, observa como a opinião pública tem se tornado poderosa, graças aos meios de comunicação de massa, e como ela tem influído nas instâncias decisórias superiores. O poder desta opinião pública é a outra marca deste mundo globalizado, onde os governos têm que conviver com a vontade dos cidadãos, que não avaliam projetos, mas resultados.

Mais recentemente, afirma o autor, as manifestações em Seattle e Praga demonstram a eficácia da ação direta bem dirigida, conduzida por grupos pequenos, mas cientes de como agir diante das câmaras, mesmo quando agem contra organismos erguidos para serem imunes aos processos políticos democráticos, tais como o FMI e o Banco Mundial.

Se a pressão da opinião pública é o caminho, é necessário definir em que sociedade queremos viver. Transformar a sociedade atual é resolver a questão da repartição, jogando por terra as prioridades da economia ultraliberal, centradas no lucro, colocando as pessoas no centro dessas prioridades. Esta é uma operação realizável, como afirma Viviane Forrester, porque afinal o ultraliberalismo nada tem de irreversível.

Notas

1 “Desemprego nos EUA é o maior em 4 anos.” Folha de S. Paulo, 8 set. 2001, p.B1.

2 FORRESTER, Viviane. O horror econômico. São Paulo: UNESP, 1997.

3 FORRESTER, Viviane.Uma estranha ditadura. São Paulo: UNESP, 2001, p.15.

4 Idem, p. 5.

5 HOBSBAWM, Eric. “A falência da democracia”. In Folha de S. Paulo. Caderno Mais!, 9 set. 2001, pp. 4-7.

Heloisa Helena Pacheco Cardoso – Universidade Federal de Uberlândia/ Projeto PROCAD.

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Sistema Mundial y Mercosur: Globalización, Regionalismo y Políticas Exteriores Comparadas | Raúl Bernal-Meza

Bernal-Meza irrompeu nos meios acadêmicos, em 1994, com o livro América Latina en la economía política mundial (Buenos Aires: GELA) na contracorrente da comunidade epistêmica liderada por Carlos Escudé, que advogava de forma acrítica para a Argentina os parâmetros do neoliberalismo. Nesse novo livro, com pensamento vigoroso, o autor amplia o escopo da análise e aprofunda o tema, utilizando a evolução da teoria nos últimos anos e a expansão da base empírica de observação que a experiência de inserção internacional latino-americana engendrou. Mais do que isso: percorrendo o caminho do geral ao particular, expõe os parâmetros da ordem global, vincula-os aos países da região, para situar no conjunto – mundial e local – o processo de integração do Cone Sul. Nada de tão ambicioso em seu escopo acadêmico observou-se até o momento quanto esse tratado do Mercosul, de 480 páginas, escrito pelo docente-pesquisador, cuja atuação se espraia por várias Universidades e centros de estudo da Argentina.

O livro desenvolve quatro temas distintos, os quais, juntos, dão progressão à construção do pensamento: sistema mundial, América Latina, Mercosul e relações entre Brasil e Argentina. O ponto de partida do texto é fornecido pela análise das conseqüências da globalização, medidas pelo estudo da natureza e da trajetória do sistema mundial. A reflexão contorna, nesse intuito, as divergentes concepções de mundo e de ordem internacional que se apresentam. E interpreta o atual sistema mundial a partir de seus subsistemas, o econômico, o político e o eidético-cultural, trabalhando a identificação das tendências e das mudanças no cenário internacional. Leia Mais

Hegemonia dos Estados Unidos no novo milênio – PETRAS; VELTMEYER (RBH)

PETRAS, James; VELTMEYER Henry. Hegemonia dos Estados Unidos no novo milênio. Petrópolis: Vozes, 2000. 268 pp. Resenha de: RAMPINELLI, Waldir José. Revista Brasileira de História, São Paulo, v.21, n.40, 2001.

Se em meados dos anos 80 muito impacto causou à sociedade estadunidense o livro de Paul Kennedy Ascensão e queda das grandes potências, com certeza maior apreensão trará, hoje, para as comunidades organizadas da América Latina, o trabalho de James Petras e Henry Veltmeyer A hegemonia dos Estados Unidos no novo milênio. Kennedy defendia a tese de que o poderio de Washington estava em decadência devido a uma “excessiva extensão imperial”. Isto é, a soma total dos interesses e das obrigações dos Estados Unidos no mundo se tornara muito maior que a capacidade que o país apresentava de defendê-los simultaneamente. Assim sendo, houve um aumento desproporcional entre tais interesses e obrigações e o seu crescimento econômico, empurrando-o obrigatoriamente para o descenso. Cabe lembrar, diz o autor, que essas foram as causas da queda de grandes impérios, como o espanhol e o britânico.

Mas os autores, ao contrário, demonstram como o imperialismo estadunidense – e também o europeu – ressurge com muita força neste limiar de milênio. A melhor explicação para a prosperidade das economias norte-americana e européia e a crise do Terceiro Mundo, segundo os autores, encontra-se na teoria do imperialismo, que focaliza o “Estado-nação” imperial como o centro de poder e tomada de decisão, e também como beneficiário de relações desiguais. Enquanto ocorrem melhoras de alguns indicadores macroeconômicos em determinados países pobres, os macrossociais caem vertiginosamente para as classes assalariadas. Atualmente, na América Latina, apenas entre 15% e 20% de sua população desfrutam de um estilo de vida de “Primeiro Mundo”.

A obra também analisa o uso irrestrito do poder militar pelos Estados Unidos para impor sua hegemonia, bem como a investida euro-americana contra toda tentativa de países do Terceiro Mundo de limitar sociopoliticamente a expansão empresarial multinacional.

O bombardeio da Iugoslávia pela OTAN/EUA, os ataques aéreos ao Iraque, o lançamento de mísseis contra a Somália e o Afeganistão, a ampliação do grupo de membros da OTAN para incluir países que limitam com a Rússia, a incorporação na OTAN de 23 novos integrantes como associados na paz, a incontestada hegemonia dos EUA sobre a Europa Ocidental, exercida mediante a OTAN, são sinais de crescente militarização e exercício unilateral do poder de polícia mundial pelos EUA. Este poder imperial ressurgente está intimamente relacionado com o formidável crescimento do domínio econômico norte-americano nos anos 90.1

Diante disso, conclui que há um governo global a partir de uma nova ordem mundial centrada em Washington e Wall Sreet, enquanto potências européias e asiáticas se subordinam a instituições militares e econômico-financeiras dominadas pelos EUA. Por isso, para uma classe capitalista mundial, especialmente a estadunidense, a década que passou foi sem dúvida a melhor de todo o século, em termos de acumulação. E conclui que está em marcha para todo o Terceiro Mundo um novo projeto de colonização. A Lei Helms-Burton e o depósito feito direto ao Tesouro dos Estados Unidos pelos compradores internacionais do petróleo mexicano são dois exemplos deste processo.

O livro está dividido em três partes muito concatenadas: Parte I: A economia do imperialismo; Parte II: Estratégia e ideologia do imperialismo; Parte III: Política do imperialismo.

Na primeira parte os autores analisam como o capitalismo, nas duas últimas décadas, tem causado tantos estragos à América Latina e, ao mesmo tempo, um período de prosperidade jamais visto para os bancos e corporações multinacionais estadunidenses. É o capitalismo chegando a seu estágio superior: o imperialismo. Esta nova ordem imperial se ergue sobre cinco pilares básicos: a) pagamentos de juros da dívida externa, b) maciças transferências de lucros provenientes de investimentos diretos e de ações e títulos, c) aquisição de empresas públicas; d) rendimentos provenientes de royalties; e e) balanços de contas correntes favoráveis.

E assim desmistificado o conceito de globalização apresentado como único e irreversível, e afirma que desde o início (século XVI) ela esteve associada ao imperialismo assim como a uma configuração específica de classe. Analisa igualmente a política agrícola estadunidense para a América Latina como uma estratégia de venda de máquinas e de insumos básicos produzidos por suas multinacionais bem como uma política agro-exportadora.

Na segunda parte são trabalhados os mecanismos ideológicos utilizados pelo império estadunidense para dominar o Terceiro Mundo – sem rebeliões –, que sofre o efeito do “ajuste estrutural”. Aqui desempenha papel relevante o Banco Mundial. O Estado imperial também se utiliza de outras vias, tais como as políticas de combate ao narcotráfico na América Latina, as estratégias da “cooperação para o desenvolvimento”, a política utilizada pela direita e, finalmente, o papel das ONGs como subsidiárias das políticas imperiais. Neste capítulo, o autor faz uma crítica muito pertinaz a essas “organizações governamentais” que, com raríssimas exceções, estão a serviço da implementação das políticas neoliberais. E distingue, com muita clareza, o que é solidariedade para um onguista e para um marxista.

A terceira parte é dedicada a temas mais especificamente políticos, tais como a democracia imperialista, a globalização e a cidadania, bem como a revolução socialista e a globalização. Descreve, por exemplo, como os regimes populares, democraticamente eleitos, foram derrubados pela classe capitalista ou por uma potência hegemônica simplesmente porque tentaram transformar ou reformar o sistema de relações de propriedade existente.

À pergunta reforma ou revolução? para enfrentar todos estes problemas gerados por uma classe capitalista internacional que tem nas elites de cada país do Terceiro Mundo os seus mais fiéis colaboradores, os autores respondem que a reforma não tem dado conta de resolver tais problemas, cabendo, sim, à revolução as grandes mudanças estruturais de nosso continente. E, ato seguido, analisa alguns exemplos revolucionários e suas conquistas, bem como os movimentos sociais radicais que começam a se fortalecer cada vez mais em toda a região.

Hegemonia dos Estados Unidos no novo milênio é um livro polêmico, contundente e sem meias palavras. Pela força de sua argumentação e de seus dados, merece ser lido e estudado.

Notas

1 PETRAS, James & VELTMEYER Henry. Hegemonia dos Estados Unidos no novo milênio. Petrópolis: Vozes, 2000, p. 15.

Waldir José Rampinelli – Universidade Federal de Santa Catarina.

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Globalization and the Challenges of a New Century: A Reader – O’MEARA et al (CSS)

O’MEARA, Patrick; MEHLINGER, Howard D.; KRAIN, Matthew. Eds. Globalization and the Challenges of a New Century: A Reader. Bloomington: Indiana University Press, 2000. 483p. Resenha de:MEYER, John R. Canadian Social Studies, v.37, n.1, 2002.

One of two volumes, Globalization and the Challenges of a New Century is a collection of 36 articles written between 1991 and 1998 by notable USA scholars. This reader resulted from a national conference held in Washington, D.C., April 1998, to celebrate the 40th Anniversary of Title VI of the Higher Education Act. The theme globalization is treated from interdisciplinary perspectives including political science, economics, security, history, business, technology, environmental studies, and future studies. There are 10 parts with 3 to 6 articles in each part. A summary introduction is provided for each part as well as a concluding resource bibliography, a list of contributors, and an index. The editors indicate that the book is intended for a general audience interested in world affairs and add that teachers and students at different levels in higher education will also find it useful [as an] introductory or capstone course in international studies (p. xiv). I will limit my review, out of mandate, to a select few of the 36 articles and to my occasional comments on ideas that seem more relevant to our readers.

In Part 1, Huntingdon, Barber, and Kaplan speculate about future power distributions between state and society. They suggest that sources of conflict will be based on one or more of the following: cultural divisions; retribalization; global disintegration vs. homogenization; scarcity; crime; ethnic conflict; overpopulation; and, disease. These will give rise to conflicts between nations and groups of different civilizations (p. 3), between culture against culture and tribe against tribe, or between one commercially homogenous global network and global anarchy and regionalism. Barber opts for a vision of a confederal union of semi-autonomous communities smaller than nation-states (p. 33) where politics would implement the adage ‘think globally, act locally’. He also urges new democratic practices because democracy remains both a form of coherence as binding as McWorld and a secular faith potentially as inspiriting as Jihad (p. 33). This article, along with those by Zakaria (pp. 181-195) and Kaplan (pp. 196-214) in Part 5, deals with aspects of democracy that could be useful for courses in civics and in government.

Kaplan (Part 1) reminds us of the potential for the dissolution of nation states due to demographic and environmental stresses. A well-travelled journalist, Kaplan provides examples of many existing nations in turmoil, particularly in the Middle East where colonial borders are contrary to reality, noting that hard Islamic city-states or shantytown-states are likely to emerge (p. 53). He goes on to claim that henceforth the map of the world will never be static it will be an ever-mutating representation of chaos (p. 57). Kaplan seems to think that the USA will be less a nation even as it gains territory following the peaceful dissolution of Canada (p. 59). A smaller Quebec will demonstrate North American regionalism.

These three authors present the broader, speculative picture and then in Part 2 are rebutted by three other authors who claim that the original three, in fact, distort and over-simplify reality by missing crucial details. These details ultimately confirm that many of the collection’s authors take the position that economic globalization or globalization of financial capital will determine the future shape of the global map: This globalization with economies of scale leads to oligopolization of the world market, inviting strategic trade rather than free trade (p. 74).

If one accepts the vision that nation-states will weaken and that national borders will take on a new structure, then articles in Part 3 present some implications for such a vision. I find two of the articles in Part 4 provocative and relevant though equally challenging to comprehend.

The first, Redefining Security: The New Global Schisms (pp. 131-139), is by Michel T. Klare who noted in 1996 that the major international schisms of the twenty-first century will not always be definable in geographic terms (p. 133). Klare nicely clarifies the causes (i.e., poverty, ethnic and religious strife, population growth in low or stagnant economic growth areas, and environmental degradation) of these schisms. He writes that a successful quest for peace must entail strategies for easing and erasing the rifts in society, by eliminating the causes of dissension of finding ways to peacefully bridge the gap between mutually antagonistic groups (p. 139).

The second article, Postmodern Terrorism by Walter Laquer, was written for Foreign Affairs in 1996. Terrorism has a long history but according to Laquer little political impact. Obviously, with the events of September 11, 2001, acts of terrorism on such a massive scale have now significantly changed that history and the initiative has passed to the extreme right (p. 150). Although written in the mid-90s, the relevance of this article to the current terrorism emanating particularly from the Middle East is copious: state-sponsored terrorism has not disappeared ; terrorists caused disruption and destabilization in other parts of the world ; [and] terrorism’s prospects are improving as its destructive potential increases (pp. 151-152). Laquer writes about the new weapons of terrorism, such as chemical weapons, and claims that fanatical Muslims consider the killing of the enemies of God a religious commandment and Allah’s will (p. 154). We have become vulnerable to a new type of terrorism in which the destructive power of both the individual terrorist and terrorism as a tactic are infinitely greater (p. 156). With prophetic insight Laquer’s concludes: the single successful one [terrorist act] could claim many more victims, do more material damage, and unleash far greater panic than anything the world has yet experienced (p. 157).

Economic globalization (Part 6) continues to be the most discussed, complex, and dominant form of globalization. Dani Rodrik’s article (pp. 227-239) is informative and will provide the occasion for a lengthy class discussion or cooperative learning activity, particularly in an economics’ class. He acknowledges the positive effects though the negative ones seem to be the most controversial: globalization does exert downward pressure on the wages of underskilled workers in industrialized countries, exacerbate economic insecurity, call into question accepted social arrangements, and weaken social safety nets (p. 238). A meaningful discussion could easily include topics on the Free Trade debate, marketization, the shrinking of social obligations, deregulation, and the potential effects on the social network in Canadian federal and provincial jurisdictions. Rodrik offers several positive remedies to the deficits of globalization.

In light of the events of September 11, 2001, we are now faced with some of the results of various forms of globalization. The strike against the heart of economic globalization has had an enormous ripple effect on world markets, multinational corporations, trade and security, employment, transportation, and governance. It has also reaffirmed our connectedness to many nation states as expressed in coalitions to fight terrorism, in solidarity events and efforts, in a revival of religious roots, and in expressions of patriotism.

Other complimentary articles in Part 5 on Globalization and the Evolution of Democracy, Part 9 on Think Global, Act Local: The Environment, and Part 10 on An Emerging Global Culture?, are tedious and difficult but worth reading. Most teachers will be challenged to make some of these seminal readings relevant and compatible to the comprehension abilities and discussion skills of their students.

For teachers at the senior secondary level, I would recommend this reader as a resource book for the serious student who might be required to or who wishes to wrestle with one or more articles in a specific section on a given topic. Once read and analyzed, the student might then locate a more recent article on the same topic by the same author in order to determine if there has been change in that author’s position. There is a gap of some years since either this collection was published or the authors’ original publications appeared. Creative teachers will be able to find ways to use some of these readings in meaningful learning activities in their advanced courses. (For a recent website resource see C.F. Risinger (October 2001) Teaching Economics and the Globalization Debate on the World Wide Web, Social Education 65, pp. 363-365.) Many of the readings will be useful for the professional knowledge base of senior secondary/high school teachers involved in teaching politics, sociology, economics, and allied social sciences. Seeds of wisdom and thought-provoking ideas abound but, admittedly, a few of the readings should be a challenge for only the advanced post-secondary student, the graduate student, or the professor.

John R. Meyer – Ph.D. Retired, Faculty of Education. University of Windsor. Windsor, Ontario.

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Europa y la globalización. Tendencias, problemas, opiniones | Víktor Sukup

A nova obra do austríaco que se fez latino-americano, nas expressões de Aldo Ferrer no prólogo de Europa y la globalización, evidencia o ângulo de quem, há mais de dez anos, trocou a Áustria pelo Extremo Ocidente. A Europa é revisitada por meio de uma linguagem solta, sem as amarras do excesso de rigor da pesquisa documental do historiador das relações internacionais e com a desenvoltura da tradição ensaísta da América Latina. O europeu converte-se às hostes daqueles que buscam, por intermédio da vontade integradora da explicação e do uso de uma certa sociologia das relações internacionais, uma maneira toda especial de ver a Europa na passagem do milênio.

O norte da obra é o da relação da Europa com o fenômeno da globalização. Encontrará a Europa um lugar próprio na ordem global? Vem a Europa explorando as oportunidades abertas pelas novas rotas produtivas e financeiras mundiais? Há riscos para a inserção competitiva na Europa, particularmente diante da hegemonia norte-americana neste final de século? São essas algumas perguntas essenciais, abordadas por Sukup com elegância e vontade de intervir no espaço das decisões políticas do seu tempo. Leia Mais

A miragem da pós- modernidade: democracia e políticas sociais no contexto da globalização | Silvia Gerschman e Maria Lúcia Werneck Vianna

Este livro é uma coletânea de 12 ensaios apresentados originalmente num seminário realizado na Fundação Oswaldo Cruz (Fiocruz), em julho de 1995. O livro inovou ao ressaltar os efeitos políticos e sociais da globalização econômica, rompendo com a tradição economicista predominante nesta área. Os artigos convergiram para três preocupações: o futuro da democracia, os rumos do setor público e a natureza das políticas sociais na época da globalização. Cada tema aglutinou quatro artigos em uma média de 15 páginas.

O primeiro bloco, intitulado ‘Globalização, democracia e questão social’, inclui os artigos teóricos de Schmitter, Reis, Gerschman e Viola. Phillippe Schmitter ressalta a consolidação do sistema político democrático como o fato mais conclusivo da globalização. O mundo aderiu à democracia e assumiu seus mecanismos de representação. Schmitter acredita que o futuro desta sociedade “será incrivelmente tumultuado, incerto e muito acidentado”. Surpreendentemente, o grande desafio à globalização viria das “democracias liberais consolidadas” (DLCs). Países recém-democratizados, ou “neodemocracias recentes” (NDRs), são seguidores de modelos e, naturalmente, não dispõem de condições objetivas para mudar os rumos. Muitas das NDRs são ordenações políticas oligárquicas que se aproveitam do sistema democrático para manter seu domínio. O retrato dado pelo autor é de pioneiros democratas, de um lado, e de seguidores autoritários, de outro, forçados a assumir o sistema de representação por acidente do destino. A verdadeira mudança social sempre acontecerá nos países pioneiros, enquanto os países em desenvolvimento estarão confinados às “democraduras”. Leia Mais

Relações internacionais e política externa do Brasil: dos descobrimentos à globalização | Paulo Roberto de Almeida || A política externa do regime militar brasileiro: multilateralização/ desenvolvimento e construção de uma potência média (1964-1985) | Paulo G. Fagundes Vizentini || Mercosul: fundamentos e perspectivas | Paulo Roberto de Almeida

As relações internacionais enquanto objeto de estudo vêm desenvolvendo-se de maneira amplamente satisfatória nos últimos anos no Brasil, com o acúmulo quantitativo e o progresso qualitativo dos trabalhos divulgados nesse campo. Muito desse avanço é devido ao surgimento de cursos de pós-graduação – nem todos stricto sensu – que colocam as relações internacionais de modo geral e a inserção externa do Brasil de modo particular no centro das preocupações de pesquisa e de elaboração de monografias. Outro tanto pode ser visto como o resultado de iniciativas propriamente editoriais, com a tradução de bons livros publicados no exterior e a publicação, isoladamente ou em coleções especializadas, dos trabalhos produzidos por cientistas sociais e historiadores do Brasil.

Os dois primeiros livros aqui resenhados inauguram, precisamente, uma nova coleção editorial, a “relações internacionais e integração” da UFGRS, ao passo que o terceiro é veiculado por uma editora mais tradicional no campo das letras jurídicas. Os dois autores militam, um de modo pleno, o outro em tempo parcial, nas pesquisas e na docência acadêmica, combinando a interpretação sociológica com uma visão histórica das relações internacionais do Brasil. Essa visão histórica é mais centrada no caso da pesquisa de Paulo Vizentini, enfocando a política externa do regime militar no Brasil entre 1964 e 1985, e mais dispersa no caso de Paulo Almeida, indo dos séculos XV-XVI (“diplomacia dos descobrimentos”), passando pela emergência do multilateralismo contemporâneo, a partir do século XIX, até o recente surgimento (1995) da Organização Mundial de Comércio (“diplomacia do desenvolvimento”). Leia Mais

Hechos y ficciones de la globalización – Argentina y Mercosur en el sistema internacional | Aldo Ferrer

A globalização econômica, ao contrário do enfoque amplamente difundido nos meios acadêmicos, não anularia a liberdade dos países em desenvolvimento de estabelecerem e implementarem suas políticas de inserção ativa no sistema internacional. Essa é a proposição principal defendida por Aldo Ferrer quando analisa o comportamento da Argentina e do Mercosul frente à economia mundial, no livro Hechos y ficciones de la globalizácion – Argentina y el Mercosur en el sistema internacional.

Existiriam, basicamente, duas visões sobre o fenômeno da globalização. A primeira, denominada fundamentalista, sugere que o problema clássico do desenvolvimento não mais existe, uma vez que caberia aos agentes transnacionais, e não aos Estados, o poder de decisão sobre o destino da economia e das finanças. A inserção dos países nesse sistema dar-se-ia de forma passiva por meio da adoção de políticas neoliberais. Tais políticas permitem o mínimo de interferência estatal no mercado pois defendem as privatizações, a abertura econômica e a desregularização dos mercados. A visão fundamentalista refletiria a racionalização dos interesses em jogo dos centros de poder. Os países em desenvolvimento teriam que manter políticas amistosas com o mercado mundial sob o risco de sofrerem uma fuga maciça de capitais especulativos de curto prazo e de verem sua credibilidade abalada. No plano interno, haveria a exigência de flexibilização dos sistemas de seguridade social, o equilíbrio macroeconômico e a estabilidade dos preços. As resistências à ratificação de tais medidas são tidas como uma manifestação de ingovernabilidade democrática. O enfoque fundamentalista seria uma poderosa ferramenta de colonização cultural imposta aos países periféricos. Leia Mais

Relações internacionais contemporâneas. Da construção do mundo liberal à globalização (de 1815 a nossos dias) | José Flávio Sobra Saraiva

Essa coleção de nove ensaios, escritos por quatro especialistas qualificados da Universidade de Brasília, cobre quase dois séculos de história universal, desde o Congresso de Viena até os umbrais do século XXI. Redigidos de forma acessível e coerente – não mostram, como os de tantas obras coletivas, diferenças de qualidade ou de enfoque que alteram a coesão do conjunto –, apresentam um quadro sumamente completo e complexo da história da humanidade nestes 180 anos. Cabe destacar que os autores conseguem escapar de maneira notável ao duplo perigo de uma visão euro ou “ocidentalocêntrica” e de uma postura dogmaticamente “terceiro-mundista”, combinando a universalidade de diversos enfoques originários do mundo industrializado, europeu em particular, com uma reflexão original a partir de um posto de observação no Brasil. Cada época é analisada com ênfase lógica, e obviamente decrescente, na história européia, mas trata também, de maneira bastante equilibrada e competente, dos países e regiões periféricas, não apenas das potências ascendentes (Estados Unidos, União Soviética e Japão), como também das vastas regiões do que se costuma chamar, ou ainda se denomina, Terceiro Mundo em seus três componentes: América Latina, África e Ásia. Reflete, assim, uma visão universalista que nesta forma seria difícil encontrar fora do Brasil. Não apenas por esta razão, mas igualmente pela qualidade da análise, o estilo ao mesmo tempo científico e compreensível, e o acervo impressionante de dados históricos e estruturais que contém, este livro pode servir com grande utilidade a um público amplo interessado no tema, no Brasil e em qualquer outro país, sem cair por isso, salvo excepcionalmente, em simplificações suscetíveis de serem criticadas por leitores atentos mais especializados. Leia Mais

A época das perplexidades. Mundialização/Globalização e Planetarização: novos desafios | René Armand Dreifuss

O novo livro do Professor Dreifuss oferece uma oportunidade de observar as características principais da complexa interdependência econômica que marca este fim de século. Ao mesmo tempo, coloca em questão o papel do Estado Nacional e da democracia no mundo após a queda do muro de Berlim. A análise é bem característica desse fim de século: atesta uma possível perda de soberania decisória dos Estados, que tendencialmente passariam a ter presença menor em várias áreas da vida social.

A característica básica das novas análises em ciências sociais, como a de Dreifuss – o que parece configurar-se como padrão recorrente no mundo todo – é a grande inquietação acerca dos planejamentos estratégicos e das concepções de inserção internacional dos diversos Estados, nessa década final do milênio. Sabe-se que com o fim da Guerra Fria, concomitantemente ao “nebuloso” fenômeno conhecido como globalização, os tempos mudaram, trouxeram novos perigos, novos desafios e demandas. Entretanto, difícil mesmo torna-se definir e chegar a um consenso sobre quais seriam pontualmente essas mudanças. Leia Mais