Posts com a Tag ‘Fondo de Cultura Económica (E)’
La Contraofensiva: el final de Montoneros | Hernán Confino
En la segunda mitad de 1979, el poeta y militante Juan Gelman escribió algunas de sus famosas Notas (Calella de la Costa/París/Roma), entre cuyos versos se encuentra el que da título a esta reseña. Pocos meses antes, junto a Rodolfo Galimberti y otros compañeros difundieron su alejamiento de Montoneros en el periódico francés Le Monde, cuestionando el rumbo emprendido por su Conducción. El trabajo de Hernán Confino, enfocado en la historia de la organización y de sus militantes entre la salida orgánica del país y la llamada Contraofensiva, me recordó a esa imagen de los pedacitos rotos que construyó la “Nota XII”. Por un lado, porque ese sueño revolucionario al que refería Gelman está presente en las páginas de La Contraofensiva: el final de Montoneros, junto a la historia de las decenas de compañeros caídos en el camino. Por otro, porque la investigación de Confino debió lidiar con la fragmentación de las memorias y la dispersión de documentos que un sueño como aquel dejó al romperse. Leia Mais
ESMA. Represión y poder en el centro clandestino de detención más emblemático de la última dictadura argentina | Marina Franco, Claudia Feld
ESMA. Represión y poder en el centro clandestino de detención más emblemático de la última dictadura argentina parte de un interrogante central: ¿por qué la ESMA? Por todas las preguntas abiertas más allá de, y gracias a, testimonios de sus sobrevivientes, procesos judiciales y numerosos trabajos previos sobre este centro clandestino que funcionó en la ciudad de Buenos Aires, durante toda la última dictadura argentina (1976-1983). Leia Mais
La Contraofensiva: el final de Montoneros | Hernán Confino
A pesar de la abundante bibliografía dedicada a diversos aspectos de la trayectoria de las organizaciones armadas revolucionarias, la Contraofensiva Estratégica, puesta en marcha por Montoneros, no había sido estudiada en profundidad. Precisamente, esto es lo que realiza Hernán Confino en su reciente libro, fruto de una tesis doctoral defendida en 2018, en la Universidad Nacional de San Martín. La Contraofensiva: el final de Montoneros se adentra, entonces, en un terreno que ha sido retratado, en forma casi exclusiva, por memorias militantes y obras periodísticas, incluyendo trabajos académicos que lo hicieron tangencialmente, en donde primaron las lecturas condenatorias y retrospectivas que la tildaron, indistintamente, de “locura”, “suicidio”, “aventura mesiánica” o “deriva militarista”. La apuesta del investigador se centra, en cambio, en reconstruir la densa trama histórica que la explica y le otorga sentido. Para cumplir con su tarea, se nutre de una variada triangulación de fuentes: documentos partidarios (tanto boletines internos como prensa, especialmente Evita Montonera y Vencer), testimonios de exmilitantes (editados, disponibles en archivos orales y recogidos por el propio autor) e informes de inteligencia (militar y policial). Leia Mais
Historia conceptual en el Atlántico ibérico: lenguaje, tiempos, revoluciones | Javier Fernández Sebastián
Javier Fernández Sebastián | Imagem: Web UNSAM
En las últimas dos décadas, el campo de la historia intelectual en el mundo iberoamericano ha sufrido una renovación disciplinar impresionante. La recepción de una serie de novedosas metodologías para el estudio del pensamiento, conceptos y lenguajes políticos, como la escuela alemana de historia conceptual (Begriffsgeschichte), el enfoque contextualista de la llamada “Escuela de Cambridge” y la vertiente francesa de historia conceptual de lo político han sido claves en este sentido. En el ambiente académico iberoamericano, el historiador español Javier Fernández Sebastián ha desempeñado un rol decisivo en dicho proceso, especialmente a través del liderazgo de la red Iberconceptos (Proyecto Iberoamericano de Historia Conceptual), que aglutina a más de un centenar de investigadores e investigadoras y que ha sido el responsable de una obra de referencia clave en la disciplina: el monumental Diccionario político y social del mundo iberoamericano, publicado entre 2009 y 2014, donde se abordan en distintos ámbitos nacionales y comparados una veintena de conceptos políticos claves de la modernidad, tales como democracia, pueblo, nación, constitución, libertad, civilización, soberanía, etc. Dicha actividad, sumada a su diálogo permanente con proyectos y asociaciones europeas, le ha permitido construir una visión amplia de los problemas político-intelectuales del mundo iberoamericano en el tránsito del siglo XVIII al XIX, abordando patrones comunes y diferencias con el resto de Europa. Leia Mais
Laboratorios en la selva: campesinos mexicanos/proyectos nacionales y la creación de la píldora anticonceptiva | Gabriela Soto Laveaga
Gabriela Soto Laveaga | Imagem: Duke University
La producción global de hormonas esteroides sintéticas entre las décadas de 1940 y 1970 alteraron de manera profunda la medicina moderna, posibilitaron importantes avances en la terapéutica de diferentes enfermedades y permitieron que millones de mujeres asumieran el control de su reproducción debido a la fabricación de anticonceptivos orales. En este cuidadoso y original estudio, publicado por primera vez en inglés en 2009, Gabriela Soto Laveaga analiza con detalle y detenimiento cómo múltiples actores formaron parte de la búsqueda, comercialización, traslado y transformación del barbasco en la materia prima para la producción de hormonas esteroides a nivel global durante buena parte del siglo pasado. Presta cuidadosa atención a las labores, disputas y negociaciones entre diferentes laboratorios y compañías farmacéuticas mexicanas e internacionales, estudia los trabajos realizados por químicos, biólogos, botánicos, médicos y otros científicos de diferentes nacionalidades en torno al barbasco y las hormonas esteroides sintéticas, y sobre todo, destaca la cotidiana y creciente participación de miles de campesinos procedentes de algunos de los estados más pobres de México, los que durante años buscaron, recolectaron y comercializaron el barbasco.
Un argumento central de este importante estudio es que los cambios y las innovaciones científicas en torno a los esteroides sintéticos difícilmente habrían acontecido sin la participación de los habitantes de las regiones húmedas y tropicales de los estados de Veracruz, Tabasco, Chiapas, y en particular los de Oaxaca. La autora narra y expone con claridad cómo los campesinos de esos estados conocían las condiciones del suelo, los ciclos de crecimiento del barbasco y, en ocasiones imperceptibles, las distinciones entre las diferentes especies de tubérculos que crecían abundantemente en esos estados. Lo anterior la llevó a cuestionar la centralidad que la historia de la ciencia ha otorgado al trabajo al interior del laboratorio y a la investigación científica en general, así como a destacar la importancia que reviste considerar y analizar el “poder social maleable y transformativo de la ciencia una vez que deja los confines del laboratorio” ( Soto Laveaga, 2020 , p.24). Asimismo, y a lo largo de su estudio, cuestiona una afirmación de larguísima historia: la “ciencia solo se podía copiar, más no producir en América Latina, una región que para muchos se encontraba en el mejor de los casos en la periferia de la generación de conocimiento” ( Cueto, 1989 , p.18). Leia Mais
El concepto de Estado y otros ensayos | Reinhart Koselleck
El concepto de Estado y otros ensayos reúne cuatro trabajos de Reinhart Koselleck, seleccionados por Elías Palti y Claudio Ingerflom, en su traducción al español. Los primeros tres ensayos, que conforman la primera parte del libro, versan sobre los principios teóricos que subyacen a la labor histórica de Koselleck. El último trabajo, que integra la segunda parte del libro, es una traducción de la voz “Estado” del Geschichtliche Grundbegriffe: Historisches Lexikon zur politisch-sozialen Sprache in Deutschland (GG), diccionario de conceptos históricos fundamentales en lengua alemana editado por Otto Brunner, Werner Conze y el propio Koselleck. Leia Mais
Historia conceptual en el Atlántico ibérico. Lenguajes/ tiempos y revoluciones | Javier Fernández Sebastián
Si algo distingue a Javier Fernández Sebastián en su quehacer historiográfico es su capacidad de situarse cómodamente en un carrefour entre disciplinas, autores y experiencias “cruzar las fronteras de su especialidad y abrirse a otras disciplinas” (p. 209), como el mismo lo manifiesta. Este libro es una muestra cabal de los distintos momentos de esos cruces y encuentros en torno a la definición de un objeto de estudio, la historia conceptual (en particular en su desarrollo iberoamericano), al ras de los acontecimientos y las experiencias. Leia Mais
Las conexiones del mundo y el Atlántico/ 1450- 1850 | Marcello Carmagnani
El libro Las conexiones del mundo y el Atlántico, 1450- 1850, es una novedad editorial de la pluma de Marcello Carmagnani. En español, es una coedición de El Colegio de México, el Fideicomiso Historia de las Américas y el Fondo de Cultura Económica. 1 Es una contribución necesaria de una interpretación de la historia mundial que toma como escenario central el océano Atlántico. Lo hace mediante una serie de elementos que se constituyen en ejes de análisis de un problema extenso, complejo, diverso, con diferentes aristas y de gran aliento. Se ocupa de un espacio de amplias dimensiones, en el que se involucran de manera directa, tradiciones culturales de varios orígenes como las europeas, africanas y americanas; pero junto con ellas, también, las del continente asiático, sin dejar de ver las especificidades. Leia Mais
La red de los espejos. Una historia del diario Excélsior/1916-1976 | Arno Burkholder
Los análisis históricos sobre la prensa como objeto de estudio han aumentado en los últimos años. La mayor parte se refiere a las actividades de los impresos y su peso específico en el espacio público, entre el período de la Independencia y los inicios del siglo XX. Sin embargo, los trabajos sobre los diarios modernos de distribución masiva aún son escasos, por lo que resulta de interés la obra de Arno Burkholder sobre Excélsior de México, que lo examina en tres ámbitos: como empresa, como periódico y como actor político. Leia Mais
Una historia de la verdad en Occidente: ciencia, arte, religión y política en la conformación de la cosmología moderna | Mauricio Nieto Olarte
Un destacado historiador de la ciencia es el autor de este libro, un colombiano quien previamente había producido valiosos análisis sobre las expediciones científicas y el naturalismo en España y América en las postrimerías del período colonial ( Nieto Olarte, 2006 , 2007 ). En este ambicioso trabajo analiza el desarrollo del conocimiento racional y la emergencia del eurocentrismo político, cultural y científico a partir del siglo XVIII. La mayoría de los 21 capítulos de este estudio se concentran en los saberes producidos en Europa durante la Edad Moderna (1492-1789). Es decir, se ocupan de temas como el Renacimiento italiano, la astronomía de Galileo, el empirismo de Francis Bacon y la física de Isaac Newton. Los capítulos iniciales se remontan a las discusiones filosóficas de Platón y Aristóteles sobre los límites y la esencia del conocimiento, así como a la noción de una única verdad del monoteísmo cristiano. En sus capítulos finales aborda la construcción del carácter enciclopédico de la obra de Alexander von Humboldt y hace un recuento del positivismo de Auguste Comte. Para encontrar una obra de envergadura parecida en América Latina es necesario remontarse a Aldo Mieli (1952) , el inmigrante italiano que publicó en varios volúmenes una historia de la ciencia europea en la Argentina de los años 1950. Luego de este esfuerzo, la mayoría de los historiadores latinoamericanos de la ciencia y de la medicina nos ocupamos de la recepción, la negociación y la participación de investigadores latinoamericanos en circuitos internacionales del conocimiento. Leia Mais
El final del silencio. Dictadura, sociedad y derechos humanos en la transición (Argentina, 1979- 1983) | Marina Franco
Acostumbrados/as a textos problematizadores, otra vez más, la historiadora Marina Franco nos acerca una nueva contribución que complejiza el conocimiento de diferentes aspectos de la sociedad argentina reciente. En esta oportunidad, con un estudio que se centra en la emergencia, configuración y visibilización del accionar de la represión y de la violación a los derechos humanos en el último tramo de la dictadura militar de 1976-1983.
La propuesta analiza un lapso que ha concitado el interés de las ciencias sociales en las últimas décadas. A decir verdad, la periodización del libro reconoce su inicio en la emergencia política del problema represivo, que toma como hito la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos a Argentina en 1979 y señala como corte la autoamnistía militar y las elecciones de 1983. En ese marco temporal, la investigación aborda la trayectoria de los principales actores que participaron, de algún modo visible, en la cuestión represiva. Si bien el acento principal está puesto en la Junta Militar y las Fuerzas Armadas, también la mirada se detiene en los partidos políticos, los medios de prensa, la iglesia católica, el Poder Judicial y las organizaciones de derechos humanos. Leia Mais
¡Nunca más esclavos! Una historia comparada de los esclavos que se liberaron en las Américas | Aline Helg
Basado principalmente en bibliografía especializada producida en inglés, francés y español durante los últimos treinta años, este libro de la historiadora Aline Helg estudia la capacidad de acción política de quienes sufrieron la esclavitud en las Américas. Para ello, analiza los esfuerzos de los esclavos para alcanzar la libertad. La obra explora el periodo previo a la consolidación de las doctrinas y políticas abolicionistas del siglo XIX, llevando a los lectores por un recorrido de más de tres siglos entre 1492 y 1838. Si bien las sociedades esclavistas mejor conocidas (Cuba, Brasil, el Sur de Estados Unidos y Haití) cumplen papel protagónico, Helg entra también en detalle sobre las menos estudiadas (incluye a Colombia, Guadalupe, Barbados y Demerara). Se trata, por lo tanto, de una síntesis histórica comparada sobre hombres y mujeres cautivos que “por la fuerza, el sacrificio, la astucia, la paciencia o el azar, consiguieron obtener su libertad” (p. 10). Leia Mais
La história como campo de batalla: interpretar las violencias del siglo XX / Enzo Traverso
Enzo Traverso / Foto: Estaeslalibreria /
A violência é um fio condutor viável para se compreender a historização do século XX? E ainda: o “campo de ruínas” em que consiste o século em questão oferece condições para a produção de conhecimento, enquanto fonte para reflexões no âmbito da Teoria da História?
As perguntas com que esta resenha se inicia podem ser respondidas por meio do livro La História como campo de batalla: interpretar las violencias del siglo XX, de Enzo Traverso, publicado originalmente L’histoire comme champ de bataille: interpréter les violences du XXe siècle, em Paris, em 2011, sem ainda tradução para o português. Objeto de investigação de um variado número de historiadores, o século XX se recusa a uma definição final: “A era dos extremos” (HOBSBAWM, 1995), “o tempo das crises” (REIS FILHO; FERREIRA ZENHA, 2000), “o século esquecido” (JUDT, 2010), “o século sombrio” (TEIXEIRA DA SILVA, 2004) são algumas das definições cunhadas pela historiografia recente. Traverso não destoa dessas acepções, definindo-o, sobretudo, como a era da violência, das guerras totais, das revoluções que naufragaram e das utopias que desmoronaram (TRAVERSO, 2012, p. 325).
Enzo Traverso é um historiador italiano – professor de Ciência Política na Universidade Cornell em Nova Iorque – conhecido, principalmente, por trabalhos acerca da primeira metade do século XX e de seus regimes totalitários. O livro objeto desta resenha é uma compilação de artigos de origens distintas que se relacionam por abordarem um mesmo objeto: os debates historiográficos em torno das violências do mundo contemporâneo, tendo como pano de fundo as interpretações globais do século XX como a idade das guerras, dos totalitarismos e dos genocídios. Desse modo, o autor problematiza os fenômenos político-ideológicos que influenciaram o desenrolar do conjunto de experiências que definem o status calamitoso desse século, como as Revoluções de 1789 e 1917, o Holocausto judaico e os movimentos anticolianiais.
O ponto de partida do historiador é o ano 1989, que, em seu critério analítico, não se inscreve na continuidade de uma temporalidade linear; ao contrário, indica um limiar, finaliza uma época para dar início à outra. A queda do muro de Berlim constitui um momentum de uma época de transição que mudou radicalmente a paisagem intelectual e política do mundo, modificando vocabulários e substituindo antigos parâmetros. Assim, conclui que 1989 alterou não apenas a geopolítica europeia, mas a maneira de interpretar e escrever a história do século XX (TRAVERSO, 2012, p. 15).
Entre as alterações mais significativas na operação historiográfica, o autor destaca três: o auge da História Global, o retorno do acontecimento e o surgimento da memória. São esses três momentos que estruturam os oito capítulos do livro. A História Global, ele explica, não é uma história das relações internacionais que analisa a coexistência e os conflitos entre Estados soberanos, mas um campo historiográfico que observa o passado como um conjunto de interações, de intercâmbios materiais e transferências culturais que estruturam as diferentes partes do mundo em um conjunto de redes. O retorno do acontecimento como foco de atenção dos historiadores, por sua vez, é apontado como um epifenômeno do fim da Guerra Fria em contraponto à sua redução a uma “agitación da superficie” levada a efeito pela perspectiva de longa duração. Finalmente, no período pós-Guerra Fria, vê-se a eclosão de uma infinidade de memórias, fruto das experiências pessoais das vítimas dos diferentes conflitos ocorridos ao longo do século, que assumirão um espaço privilegiado nas novas abordagens, tanto como fonte quanto como objeto de investigação histórica.
Estruturalmente, o “campo de batalha”, a que Traverso se refere no título da obra, forma-se no âmbito teórico de, pelo menos, dois modos: por um lado, Traverso evidencia que a verdade histórica está em constante tensão com a realidade; por outro, atesta a emersão de perspectivas conflitantes com as teorias tradicionais de interpretação dos fenômenos do século XX. Por exemplo, o entendimento que define as potências europeias como “centro do mundo” é relativizado, sugerindo reconsiderar o papel dos outros continentes no desenrolar dos eventos que marcaram o século XX.
No entanto, para o autor, escrever, tendo como ponto de partida metodológico a História Global, não significa simplesmente conceder maior importância ao mundo extra europeu em relação com a historiografia tradicional, mas sim mudar de perspectiva, multiplicar e cruzar pontos de observação (TRAVERSO, 2012, p. 17). Embora essa seja a defesa do autor, ele mesmo encontra certa dificuldade de pô-la em prática, visto que a centralidade de sua investigação está circunscrita à Europa, com exceção de algumas poucas passagens em que aborda algum aspecto relativo aos Estados Unidos. Mesmo o cruzamento de pontos de observação, como sugeriu, continua seguindo uma lógica essencialmente europeia, o que se revela, de algum modo problemático, no tratamento de um tema tão global quanto a violência.
No que diz respeito ao que considera outra mudança significativa, defende que o fim da Guerra Fria permite um paralelo entre a mudança geopolítica e o que se esboça ao mesmo tempo na historiografia. Traverso refere-se, nesse momento, à reavaliação do acontecimento na escrita da história. No livro, questiona a perspectiva de continuidade, alertando para a importância de se recuperar as inflexões da história. Para ele, o século XX se revelou como a idade das rupturas repentinas, fulminantes e imprevisíveis. As tendências estruturais criam as premissas de bifurcações, crises, cataclismos históricos (guerras, revoluções, violência em massa), mas não predeterminam seu desenvolvimento ou fim. A turbulência da Europa em 1914, a Revolução Russa, a chegada de Hitler ao poder, o colapso da França em 1940, o colapso do “socialismo real” no outono de 1989 representam rupturas que mudaram o curso do mundo, mas cuja emergência não era inevitável (TRAVERSO, 2012, p. 17).
Esses questionamentos colocados pelo historiador são nítidos nos capítulos dedicados ao nazismo e à comparação dos genocídios, acontecimentos que, de acordo com suas proposições, condensam várias ordens de temporalidade. Se o caráter repentino da Shoah põe em questão os paradigmas da história estrutural; o extermínio nazista, como um ponto culminantemente paroxístico de um conjunto de tendências que remontam ao século XIX, exige uma abordagem fundamentada na análise de longa duração. Isso fez, consoante argumenta o autor, com que os investigadores fossem obrigados a renovar sua reflexão sobre a articulação das temporalidades históricas (TRAVERSO, 2012, p. 18).
Além do que já fora mencionado em relação às suas contribuições à Teoria da História, ou seja, a História Global e o retorno do acontecimento, a violência que atua como fio condutor das experiências históricas do século XX pode levar a historiografia a uma série de outros questionamentos. Entre eles, a implicação subjetiva do historiador, a localidade do discurso, o distanciamento entre o historiador e o objeto, e a intersecção entre história e memória.
No capítulo “Exilio e Violencia”, Traverso defende que uma história do pensamento crítico não pode ignorar a contribuição dos intelectuais exilados, pois eles são “sismógrafos sensibles” dos conflitos que atravessam o planeta (TRAVERSO, 2012, p. 237). Em 2004, já havia proposto algo semelhante sobre a contribuição dos exilados para a História do século XX. Na ocasião, salientou que um dia a história do século XX teria de ser relida por meio do prisma do exílio; do exílio social e político, mas também e, sobretudo, do intelectual (TRAVERSO, 2004, p. 05), tarefa à qual tem também se dedicado.
A posição de estrangeiros, de apátridas ou desarraigados resulta em um observatório privilegiado dos cataclismos que afetam o mundo. A distância, nesse entendimento, modifica as perspectivas, acentua ou neutraliza a empatia e o olhar crítico dos observadores. Em razão disso, o efeito do “estranhamento” pode revelar-se frutífero (TRAVERSO, 2012, p. 238), perspectiva explorada também por Carlo Ginzburg na obra “Olhos de madeira: nove reflexões sobre a distância”, em que propõe uma espécie de “hermenêutica da distância”.
A transformação de perspectiva gerada pela distância afeta a escrita da história, uma vez que modifica a própria concepção de história do autor. Ademais, faz com que ele reconheça a impossibilidade de desassociar a interpretação do passado de uma luta inscrita no presente, a partir da constatação de que “no hay historiador sin principio y sin visión del mundo” (TRAVERSO, 2012, p. 240).
Uma observação semelhante seria feita por Estevão Martins em um ensaio publicado em 2006 em que se dedicou a analisar o século XX. Martins aponta que tem-se no século XX três grandes veios de afirmação da elaboração teórica da história como ciência: 1) a primeira, até o início da década de 1930, que se dedica à legitimação da história diante do paradigma das ciências naturais experimentais; 2) a segunda, que vai da fundação dos Annales em 1929 aos anos 1960, que se imerge na pesquisa empírica, sem se embaraçar de considerações epistemológicas e 3) uma terceira, que nos interessa aqui, desde há cerca de meio século, que articula a fundamentação teórica com a realização prática, independente da filiação doutrinária eventual (MARTINS, 2006, p. 3). O itinerário da legitimação do conhecimento histórico em seu formato científico, defende Martins, é o desafio e a aventura da historiografia do século XX (MARTINS, 2006, p. 2).
Para Traverso, a concepção de história como um exercício puramente científico é questionável, já que a interpretação do passado acontece em relação com a condição social do historiador. Sobre esse tema, analisando a historiografia alemã, italiana e espanhola, o autor conclui que no exílio, por exemplo, “las fronteras entre el erudito y el militante se vuelven porosas” (TRAVERSO, 2012, p. 243). A consequência disso é que a condução da escrita da história como um “dever político” pode obstaculizar uma reconstrução mais profunda, bem como crítica do passado, embora seja capaz de revelar a maneira como as escolhas políticas e as experiências individuais dos historiadores interferem nas suas interpretações.
Por fim, Traverso propõe-se à recorrente e, ainda necessária, reflexão acerca dos pontos de convergência e divergência entre história e memória. A intersecção entre os dois conceitos se dá em razão de que tanto a memória como a escrita da história são modalidades de elaboração do passado. No entanto, não se tratam de conceitos iguais: a memória é um conjunto de recordações individuais e de representações coletivas do passado; enquanto que a história consiste em um discurso crítico do passado, uma reconstrução de acontecimentos passados tendente à exame contextual e à interpretação. As relações entre história e memória se tonaram mais complexas, às vezes difíceis, mas sua distinção nunca foi questionada, e seguem sendo uma conquista metodológica essencial nas ciências sociais (TRAVERSO, 2012, p. 282).
A dificuldade em separar história e memória caracteriza nossa época enquanto encruzilhada de diferentes temporalidades, lugar de olhos cruzados em direção a um “acontecido” vivo e arquivado ao mesmo tempo (TRAVERSO, 2012, p. 284). Além disso, caracteriza o historiador do tempo presente, que ora é testemunha, ora é investigador de um mesmo tempo. A escrita da história do século XX, reflete Traverso, é um exercício de “equilíbrio sobre uma corda suspendida entre estas duas temporalidades”. Por um lado, seus atores adquiriram, por sua qualidade de testemunhas, um status inquestionável de fonte para os investigadores; por outro, estes últimos trabalham sobre uma matéria que interroga constantemente suas vivências pessoais, questionando sua própria posição (TRAVERSO, 2012, p. 284).
Conclui o autor que, no cenário devastado que é o século XX em decorrência de guerras, totalitarismos e genocídios, a vítima passa a assumir a centralidade, dominando a nossa visão da história. Nessa reatualização de fontes, sujeitos e escritores, o passado e o futuro se cruzam, criando-se e reinventando-se se mutuamente. (TRAVERSO, 2012, p. 284).
Cabe-nos lembrar que é nesse mesmo século como defendeu Martins (2006, p. 2) “que se realiza a dupla afirmação do campo da história: 1) como capaz de produzir conhecimento confiável 2) porque dotou-se de um a sustentação teórica sólida”, em que pese o caráter mediado da experiência histórica. E ainda, é nele que vê-se crescer a “abordagem sistemática da historiográfica como objeto de pesquisa”. O século XX, na sua condição de campo de ruinas, provou-nos Traverso, é, sem dúvidas, produtor de conhecimento no âmbito da Teoria da História, e a violência um dos fios condutores possíveis (e recomendável) para compreensão dessa era devastada.
Referências
HOBSBAWM, Eric. Era dos extremos: o breve século XX. São Paulo: Cia das Letras, 1995.
FERREIRA, Jorge; REIS FILHO, Daniel Aarão; ZENHA, Celeste (orgs) O século XX. Rio de Janeiro: Civilização Brasileira, 2000.
GINZBURG, Carlo. Olhos de madeira: nove reflexões sobre a distância. São Paulo: Companhia das Letras, 2001.
MARTINS, Estevão de Rezende. História e Teoria na Era dos Extremos. Revista de História e Estudos Culturais, vol III, ano III, n. 2, abril/maio/junho 2006.
TEIXEIRA DA SILVA, Francisco Carlos (org). O século sombrio. Rio de Janeiro: Campus, 2004.
TONY, Judt. Reflexões sobre um século esquecido 1901-2000. Rio de Janeiro: Objetiva, 2010.
TRAVERSO, Enzo. Cosmópolis figuras del exilio judeo-alemán. México: UNAM, 2004.
Thais Rosalina de Jesus Turial –Doutoranda pelo Programa de Pós-graduação em História da Universidade de Brasília (PPGHIS-UnB). Currículo Lattes: <http://lattes.cnpq.br/5421508661749527>. E-mail: turial.thais@gmail.com.
TRAVERSO, Enzo. La história como campo de batalla: interpretar las violencias del siglo XX. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2012. Resenha de: TURIAL, Thais Rosalina de Jesus. A História é um campo de batalha. Em Perspectiva, Fortaleza, v.6, n.2, p.237-242, 2020. Acessar publicação original [IF].
Chile Constitucional | Juan Luis Ossa Santa
Desde el día 25 de noviembre de 2019 en que se pactó por los partidos políticos el «Acuerdo por la paz social y la nueva Constitución», se ha intensificado la producción de una rica literatura en torno al debate constitucional que ha vivido Chile durante los últimos años. Sin duda, uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta durante los llamados «momentos constitucionales» 1 debe ser la identidad cultural de una nación. Las Constituciones tienden a ser herramientas cuyo articulado va moldeándose a través de los años, y como lo demostró hace poco el profesor de la Universidad de los Andes, Jaime Arancibia2, la Constitución de la República actual tiene integrado elementos que atraviesan toda nuestra historia como nación independiente. Y eso sólo en cuanto a nuestro escriturado constitucional, porque aún se mantienen vivas muchas prácticas y principios que vienen desde tiempos de la colonia y que siguen formando parte de nuestra idiosincrasia en el día a día.
La obra que reseño materializa un buen intento de rescatar lo anterior, en cuanto a tener presente el hecho de que cada generación contribuyó con lo suyo en la conformación de nuestra institucionalidad vigente. El historiador Juan Luis Ossa aporta con un trabajo importante para esta discusión, teniendo como objetivo «contextualizar los cuatro grandes procesos constituyentes de la historia de Chile (1828, 1833, 1925, 1980)» (p.12), los cuales erigieron los pilares de la arquitectura política chilena. A buena hora su intención se materializó en la realidad, ya que al comienzo del libro el autor cuenta que se encontraba en Londres investigando y escribiendo sobre el Chile de 1820 —período del cual nos hizo la promesa de un nuevo libro—, cuando recibió una llamada de Leonidas Montes, director del CEP (Centro de Estudios Públicos), quien lo animó a escribir el libro en cuestión. Trabajando a contra presión con el motivo de que la obra estuviese lista antes del plebiscito, y teniendo en cuenta la dificultad del tema, Ossa cumplió, y lo hizo de buena forma. Así, hoy Chile Constitucional se instala como una lectura referente para este proceso en el cual nos adentramos. Leia Mais
Educación para el siglo XXI. El desafío latinoamericano | Mario Waissbluth
Mario Waissbluth escoge un texto de Andrés Bello, escrito en 1836, para abrir su ensayo. Este epígrafe es interesante, ya que evidencia la coexistencia de dos modelos educativos: uno pensado para instruir a las clases menesterosas, y otro diseñado para educar a los sectores acomodados. Según la dialéctica que expone Bello, las escuelas que instruyen a las clases trabajadoras no debiesen ofrecer mayores proyecciones a sus estudiantes, pues una mejor preparación podría alejar a estos muchachos del trabajo productivo; a su vez, las clases acomodadas, cuyas profesiones requieren una instrucción más exigente, habrán de educarse en colegios que fueron diseñados para formar a las elites (Waissbluth, p.11).
El texto de Andrés Bello contextualiza la problemática que aborda Mario Waissbluth en Educación para el siglo XXI. El desafío latinoamericano [1] (2018). Este ensayo, de lectura amena y sencilla, analiza los niveles de exclusión y segregación educativa existentes en América latina, dificultades que impiden a los sistemas educativos de estos países enfrentar los desafíos del mundo globalizado. Leia Mais
La história como campo de batalla: interpretar las violencias del siglo XX | Enzo Traverso
A violência é um fio condutor viável para se compreender a historização do século XX? E ainda: o “campo de ruínas” em que consiste o século em questão oferece condições para a produção de conhecimento, enquanto fonte para reflexões no âmbito da Teoria da História?
As perguntas com que esta resenha se inicia podem ser respondidas por meio do livro La História como campo de batalla: interpretar las violencias del siglo XX, de Enzo Traverso, publicado originalmente L’histoire comme champ de bataille: interpréter les violences du XXe siècle, em Paris, em 2011, sem ainda tradução para o português. Objeto de investigação de um variado número de historiadores, o século XX se recusa a uma definição final: “A era dos extremos” (HOBSBAWM, 1995), “o tempo das crises” (REIS FILHO; FERREIRA ZENHA, 2000), “o século esquecido” (JUDT, 2010), “o século sombrio” (TEIXEIRA DA SILVA, 2004) são algumas das definições cunhadas pela historiografia recente. Traverso não destoa dessas acepções, definindo-o, sobretudo, como a era da violência, das guerras totais, das revoluções que naufragaram e das utopias que desmoronaram (TRAVERSO, 2012, p. 325). Leia Mais
En los márgenes. Rhodakanaty en México | Carlos Illades
Dentro de la historiografía mexicana, en lo que se refiere al siglo XIX, la mayor parte de los estudios se concentran en los primeros años del siglo antepasado y en los procesos que han configurado al Estado nación, es decir: en los últimos años del dominio del imperio español sobre el territorio de la Nueva España; en el “bienio crucial” (1808-1810), del cual se desprendería el germen del movimiento independista; en el propio proceso de independencia; en la formación territorial, jurídica, simbólica y política de la incipiente nación; y, ya más avanzado el siglo, en las disputas entre liberales y conservadores; pasando por las grandes gestas de la historia oficial que han dotado de significado el sentimiento pátrio. Leia Mais
¿Realmente es necesario cortar la Historia en rebanadas? | Jacques Le Goff
En el 2014 Jacques Le Goff publica su última obra, en este libro vuelca varias ideas sobre un debate que llevan problematizando la mayoría de las humanidades, las ciencias sociales y demás áreas de conocimiento: el tiempo. Es entonces una cuestión que a la Historia concierne directamente, no solo por su clara relación al estudiar los procesos a corto, mediano o largo plazo, sino también porque estos mismos a través del tiempo se convierten en relatos y eventualmente quedan vestigios contados desde y como discursos particulares, que al final no son tan objetivos como se presumían. La Historia de un pueblo es contada por quien domine la escritura de esta, quien también puede imponer su forma de entender el tiempo. Es entonces posible ver también a la periodización y cómo se divide la Historia, como relatos que ahora pueden ser contrastados y evaluados, así como encontrar o vislumbrar discursos que antes eran solo ruido. Leia Mais
Educación para el Siglo XXI. El desafío latino-american | Mario Waissbluth
El libro Educación para el Siglo XXI. El desafío latinoamericano fue escrito por Mario Waissbluth y publicado a mediados de 2018 por el Fondo de Cultura Económica. Debido a que desde la creación de Fundación 2020 el autor se ha posicionado como una de las voces más influyentes en la discusión sobre políticas educativas en Chile, la lectura de este texto resulta imprescindible para quienes estén interesados en aportar al debate educativo y contribuir a mejorar la calidad y la equidad de la educación en Latinoamérica.
En el capítulo I, el autor advierte que las decisiones que se tomen hoy en materia de política pública educativa impactarán a lo largo del siglo XXII, lo cual requiere enfrentar con urgencia los deficientes desempeños educativos que presentan los niños, jóvenes y adultos de la Región. En reiteradas oportunidades el relato recuerda que, pese a los avances en cobertura, los estudiantes y adultos no comprenden lo que leen ni pueden realizar operaciones aritméticas sencillas. Leia Mais
Dibujar la nación. La Comisión Corográfica en la Colombia del siglo XIX | Nancy P. Appelbaum
Este libro fue originalmente publicado en inglés con un título diferente, Mapping the Country of Regions. The Chorographic Commission of NineteenthCentury Colombia (The University of North Carolina Press, 2016), y recibió en 2017 el Premio Iberoamericano al Libro Académico sobre el siglo XIX de la Latin American Studies Association (LASA). Reflejo de una política editorial que procura una mayor circulación para un libro importante, el nuevo título refiere a una práctica que fue común a varias de las nacientes repúblicas latinoamericanas: cartografiar el territorio sobre el que pretendían ejercer soberanía. lo cual, con el fin de prestigiar esa labor y justificar el alto costo que esas expediciones exigían, se contrataron muchas veces expertos extranjeros para dirigirlas, como fue el caso de Claudio Gay (1830-1841) en Chile, o del propio Agustín Codazzi, primero en Venezuela (1830-1840) y luego en la República de Nueva Granada (1850- 1859). Leia Mais
Acuerdos y desacuerdos. La DC italiana y el PDC chileno: 1962-1973 | Raffaele Nocera
Nos marcos de uma história política transnacional,2 certamente podemos incluir o livro Acuerdos y desacuerdos. La DC italiana y el PDC chileno: 1962-1973, do historiador italiano Raffaele Nocera, como uma importante e necessária referência, sobretudo para os estudiosos de uma história recente chilena. Percebermos na obra do historiador latino-americanista da Universitá di Napoli “L’Orientale” reflexões sobre as experiências da Democracia Cristã chilena e italiana em suas zonas de contato e reciprocidade, de influências, intercâmbios e interesses mútuos – embora nem sempre equânimes. A escrita do autor evidencia tons que tendem ao descritivo, com uma clara preocupação em apresentar uma história que certamente se torna ainda mais rica e complexa se compreendida de maneira conjunta e conectada, contemplando uma narrativa preocupada com uma abordagem que considere a simetria e as influências de situações de coexistência.3
Raffaele Nocera estabelece como objetivo central em Acuerdos y desacuerdos analisar as relações ítalo-chilenas a partir de contatos frequentes estabelecidos entre os personagens de relevo da política nacional dos dois países, enfatizando as relações entre dois partidos, a Democrazia Cristiana Italiana (DC) e o Partido Demócrata Cristiano no Chile (PDC), no contexto de organização e atuação da Internacional Democracia Cristã, que integrava formações políticas similares de várias partes do mundo, destacando-se Venezuela e Chile na América Latina. Dentre os principais líderes dos partidos salientados pelo autor estiveram, pela DC, Amintore Fanfani, Aldo Moro, Mariano Rumor e Giulio Andreotti, e pelo PDC, Eduardo Frei Montalva, Radomiro Tomic, Patricio Aylwin e Gabriel Valdés Subercaseaux. A escolha do autor pelas duas formações políticas ocorre pela sua então centralidade na política nacional de seus respectivos países durante boa parte da segunda metade do século XX, inseridos em redes internacionais e conformando fortes vínculos ideológicos, e mesmo de amizade, entre seus membros dada certa similitude cultural e de base doutrinária. Leia Mais
Agonística: Pensar el mundo politicamente – MOUFFE (EL)
MOUFFE, Chantal. Agonística: Pensar el mundo politicamente. Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2014. Resenha de: BONIN, Joel Cezar. Eleuthería, Campo Grande, v. 1, n. 1, p. 83-87, dez. 2016/mai. 2017.
A obra em relevo é uma das últimas publicações em espanhol da pensadora política Chantal Mouffe, datada de 2014, com o título de Agonística, pensar el mundo políticamente. A versão utilizada para esta resenha foi traduzida por SoledadLaclau e publicada pelo “Fondo de Cultura Económica de Argentina S.A”, sendo que a versão original em inglês, foi lançada em 2013 com o título de Agonistics, Thinkingthe World Politically pela editora “Verso”. A obra está dividida em sete capítulos fundamentais, a saber: I –O que é política agonista?; II – Que democracia para um mundo agonista multipolar?; III – Uma aproximação agonista para o futuro da Europa; IV – A política radical hoje; V Política agonista e práticas artísticas (incluindo introdução e conclusão) e mais uma entrevista com a autora. O trabalho aqui desenvolvido se propõe em abordar, em linhas gerais, a temática fundamental do texto, a saber, o agonismo político e assinalar os principais interlocutores de Mouffe em sua pesquisa política.
Diante disso, se faz assaz necessário destacar que a autora em tela é professora de Teoria Políticado “Centro para Estudos da Democracia” da Universidade de Westminster, Londres e autora de vários livros que abordam a temática política dentro do cenário contemporâneo. Sua linha de pensamento pode ser denominada de “agonística”, pois sua visão contempla a ideia de que, para além dos dilemas antagonistas inerradicáveis da política, devemos ponderar e considerar um cenário agonista, no qual não se vê o outro como um opositor/inimigo, mas como um adversário que luta agonisticamente por uma democracia radical e vibrante. Ela aponta para um viés que não é unânime e nem tampouco uníssono, contudo, em suas obras nota-se que o caráter dissensual das disputas políticas é visto como algo salutar para o desenvolvimento de um senso político crítico e sagaz, dissociado de vicissitudes dialéticas entre esquerda/direita ou entre burguesia/proletariado. Dessa maneira, a resenha desse livro visa, diante disso, mostrar as ideias fulcrais da autora e o modo como a mesma desenrola o novelo epistemológico e filosófico de seu pensamento agonista.
De início, no primeiro capítulo, Mouffe tenta demonstrar como já fizera em outras obras132, o que significa, de fato, uma política agonista. Por este prisma, sua abordagem revela o papel preponderante da ideia de hegemonia. Segundo ela, “denominamos ‘praticas hegemônicas’ aquelas práticas de articulação mediante as quais se cria uma determinada ordem e se fixa o significado das instituições sociais. Segundo este enfoque, toda ordem é a articulação temporária e precária de práticas contingentes. As coisas sempre poderiam ser diferentes e toda ordem se afirma sobre a exclusão de outras possibilidades. Qualquer ordem é sempre a expressão de uma determinada configuração de relações de poder. O que em um determinado momento se aceita como a ordem ‘natural’, junto com o sentido comum que a acompanha, é o resultado de práticas hegemônicas sedimentadas” (MOUFFE, 2014, p. 22).
Essa citação nos leva a reflexão de que o conceito de hegemonia é resultado de uma eleição de práticas, isto é, tal assertiva nos leva a ponderação de que aquilo que decidimos como político/antipolítico/apolítico é o resultado de uma criteriosa definição de prioridades que são “optadas” como as mais aceitáveis ou mais eloquentes para o convencimento de um modo de pensar e agirque é mais “forte diante dos outros”. Contudo, nos fica evidente que a configuração das práticas hegemônicas não é algo que ocorre de modo casuístico. O que definimos como hegemonia, segundo os moldes de Mouffe, é algo definido pela maioria ou pelo ato democrático de uma escolha. Porém, essa definição não é permanente e não é definitiva. Ela é volátil e contingente e, por sua vez, sempre suscetível a mudanças.
Diante disso, é essencial que entendamos que o pensamento de Mouffe nos orienta a uma prática de dissenso, pois diante de práticas hegemônicas podemos apresentar condutas contrahegemônicas justamente porque aquilo que consideramos como hegemônico está provisoriamente posto. Além disso, Mouffe compreende que as práticas que envolvem o universo político estão sempre em conflito e essa é a “natureza própria” desse universo, mesmo que cindido em dois: “‘O político’ se refere a essa dimensão de antagonismo que pode adotar diversas formas e que pode surgir em diversas relações sociais. É uma dimensão que nunca poderá ser erradicada. Por outro lado, ‘a política’ se refere a um conjunto de práticas, discursos e instituições que busca estabelecer uma certa ordem e organizar a coexistência humana em condições que sempre são potencialmente conflitivas, já que estão afetadas pela dimensão ‘do político'” (MOUFFE, 2014, p. 22).
Diante do exposto, nos faz necessária uma indagação: mas afinal o que Mouffe quer dizer com essa ideia de antagonismo e agonismo? Se lermos com atenção o parágrafo anterior, podemos compreender o seguinte: o olhar “político” é o olhar do dissenso, da diferença e da antagonia. Esse fato é impossível de ser dirimido ou subsumido no universo dos interesses pessoais, das contendas pelo poder. Contudo, o espaço da “política” é o espaço no qual essas ideias não suplantadas pelo exercício racional do discurso ou da “boa vizinhança”. Eles permanecem, porém, o modo como essas questões são encaradas se modifica. É aqui que o agonismo ganha importância e valor. Se no primeiro conceito, ve-se o outro como um inimigo a ser massacrado ou destruído, no segundo momento, verifica-se a noção da luta de interesses mediados por uma “cadeia de equivalências” nas quais todos possuem o direito à diversidade e à multipolaridade de intenções. Dito de outro modo, se trata de se pensar o mundo para além de uma visão cosmopolita que por inúmeras vezes, se reveste de uma perspectiva eurocêntrica. Parafraseando Mouffe, não se pode pensar o mundo apenas como um universo, como um pluriverso de interesses, todos eles legitimáveis e consideráveis. É nesse ponto que Mouffe critica veementemente a postura liberal de que o campo político é um campo neutro, onde os ditames da razão são os únicos esteios orientadores do debate. As paixões nunca foram e nunca serão eliminadas, pois no campo da disputa pelo poder sempre emergem vozes e atitudes que, supostamente teriam sido superadas pela evolução racionalizada do pensamento e do agir humano.
Segundo a pensadora belga, não vivemos mais os tempos de Maquiavel e Kant, contudo, isso não quer dizer que as vicissitudes de outrora não ecoam mais em nosso tempo. Por isso, ela afirma – com base em Carl Schmitt, uma ideia importante na relação entre amigos/inimigos ou entre nós/eles: “De fato, muitas relações nós/eles são meramente uma questão de reconhecer as diferenças. Porém significa que existe a possibilidade de que esta relação ‘nós/eles’ se converta em uma relação de amigo/inimigo. Isso ocorre quando os outros, que até o momento eram considerados simplesmente como diferentes, começam a ser percebidos como questionando nossa identidade e como uma ameaça a nossa existência. A partir desse momento, como assinalou Carl Schmitt, toda forma de relação nós/eles – seja religiosa, étnica ou econômica – se converte em um locusde antagonismo” (MOUFFE, 2014, p. 24-25).
No decorrer do texto, Mouffe faz vários “links” entre o seu pensamento e de outros pensadores políticos contemporâneos como Badiou, Connolly, Habermas, Virno,Hardt, Negri, etc. Contudo, gostaria de delinear uma visão um pouco mais aprofundada da relação do pensamento mouffeano com os de Virno e Hardt/Negri. No capítulo no qual ela trata da “política radical hoje”, ela aponta os pontos essenciais do trabalho de Antonio Negri e Michael Hardt (Império, Multidão e Commonwealth), que tentam demonstrar que o “império” como fonte de acumulação do capital não está mais territorializado, pois ele se manifesta em todos os cantos do mundo por meio de um modo de apreensão da vida na qual a disciplina se dá de modo biopolítico. É um controle muito mais profundo pois envolve toda a vida das pessoas, desde suas práticas mais comezinhas até o mundo do trabalho. Contudo, se trata de extrapolar esse modo de controle sobre a vida pois visto que não há mais territorialidade e sim conectividade ao redor do mundo que pode-se pensar em alternativas que rompam com esse modelo de controle, por meio de um contra-império, no qual a criatividade e a inventividade busquem formas concretas de viver o mundo político. As ONGs, as associações de grupos minoritários133 são modelos de como isso pode acontecer, pois ligados a ambientes virtuais de debate, nascem os modelos contrahegemônicos de inserção e discussão social. Isto posto, pode-se dizer que a interconexão virtual engendra mudanças reais na análise de “visão de mundo” de seus participantes. Se, contudo, tais possibilidades de ação prática não se fazem possíveis, a “saída pela tangente” deve ser o êxodo e a deserção, como meios de distanciamento da vida pública.
Por outro lado, o pensamento do filósofo italiano Paolo Virno opõe-se em alguns aspectos ao pensamento de Negri e Hardt, pois ele não consegue vislumbrar outra alternativa para a vida social que não seja a deserção. “[…] Se na era disciplinária, a sabotagem constituía a forma fundamental de resistência, […] na era do controle do império, esse papel é desempenhado pela deserção. De fato, considera que é por meio da deserção – mediante a evacuação dos espaços de poder – que se podem ganhar as batalhas contra o império. A deserção e o êxodo constituem […] uma forma poderosa de luta de classes contra a pósmodernidade imperial” (MOUFFE, 2014, p. 81).
Entretanto, a análise de Mouffe é bem diferente nesse quesito, pois o que ela considera como fundamental não é a deserção dos espaços de poder, mas a sua verdadeira e legítima posse por parte de todos os envolvidos como se vê na nota de rodapé da página anterior. Antes ainda, afirma Mouffe, faz-se necessário que uma visão renovada do papel e do valor dos espaços públicos de democracia. E aqui ela volta ao ponto inicial: é preciso que haja
dissenso, luta, desentendimento se preciso for, pois somente por meio desse movimento contínuo de retorno ao debate democrático, por vezes consensual, mas mais ainda dissensual que os conflitos podem encontrar um espaço adequado de desenvolvimento. Contudo, ela reitera: a extinção, deserção ou eliminação do Estado não é o caminho que levará as sociedades à plenitude de uma democracia vibrante e radical. Em verdade, a única radicalidade conclamada por Mouffe é a da participação dissensual agonista. Dito de outro modo, trata-se de repensar as possibilidades políticas de nosso tempo por um viés constantemente rechaçado por políticas liberais ou neoliberais, o de que só possível a vivência plena da política num ambiente que seja capaz de “incluir o outro na sua diversidade”: eis um caminho possível, segundo Mouffe, para uma vida política que aponta possibilidades, pois já compreende de antemão a impossibilidade de uma erradicação total do antagonismo, mas que nas brechas, nos interstícios do sistema político-econômico luta (agoniza134, no sentido grego do termo) por uma vida democrática onde todos são iguais e dignos dessa igualdade.
Notas
132 É fundamental lembrar também que a obra em relevo é uma “revisitação” e atualização de outras obras por ela publicadas, tais “En torno a loPolitico” e “El retorno delo Político”.
133 […] Não se pode definir o adversário em termos amplos e gerais como “império” ou “capitalismo”, senão em termos de pontos nodais de poder que devem ser atacados e transformados com o fim de criar as condições de uma nova hegemonia. Se trata de uma “guerra de posição” (Gramsci) que deve ser lançada em uma multiplicidade de lugares e isto exige uma sinergia entre uma pluralidade de atores: movimentos sociais, partidos e sindicatos. (MOUFFE, 2014, p. 85, grifo meu).
134 Nesse ponto, Mouffe aponta uma ideia fundamental de William Connolly e se apropria dela: “Connolly está influenciado por Nietzsche e tentou tornar compatível a concepção nietzscheana do ‘agón’ com a política democrática”. Reclama uma radicalização da democracia, que resultará do cultivo por parte dos cidadãos de um novo ethosdemocrático de compromisso, que os levará a entrar em uma disputa agonista a fim de impedir toda forma de fechamento. Para esta perspectiva resulta central a ideia do ‘respeito agonista’ que Connolly percebe surgindo da condição existencial compartilhada da luta pela identidade e moldada pelo reconhecimento de nossa finitude. O respeito agonista representa para ele a virtude cardeal do pluralismo profundo e é a virtude política mais importante em nosso mundo pluralista contemporâneo. (MOUFFE, 2014, p. 31, grifos no original)
Joel Cezar Bonin – Pontíficia Universidade Católica do Paraná (PUC-PR).
[DR]
El legado escrito de los mayas | Mercedes de la Garza
En El legado escrito de los mayas, la historiadora mexicana Mercedes de la Garza realiza una presentación sistemática y un breve análisis del corpus de los llamados “libros mayas”, incluyendo en este grupo textos en lenguas mayas y caracteres latinos producidos en el período colonial. Excluye los textos en escritura jeroglífica del período Clásico, así como documentos administrativos, eclesiásticos, y textos escritos por los conquistadores y evangelizadores del siglo XVI. Es clara y necesaria la descripción de la autora a la hora de explicitar sus criterios de conformación del corpus. Este libro es de consulta básica para quien desee conocer la trayectoria histórica maya desde el Clásico hasta fines de la Colonia, y para quienes investigan y enseñan temáticas relacionadas a las religiones y literaturas precolombinas, la historia de la Conquista de América, la evangelización y la resistencia. Quienes investigan períodos precolombinos hallarán aquí un material de referencia para contextualizar los documentos coloniales producidos por las autoridades españolas, así como los relatos míticos (en especial el Popol Vuh) que se utilizan para interpretar la iconografía del Clásico y el Postclásico. Un punto débil del trabajo es la falta de un aparato erudito completo y de referencias precisas en las citas de textos mayas y de otros autores mencionados. Leia Mais
El Hilo y las Huellas. Lo verdadero, lo falso, lo ficticio | Carlo Ginzburg
El libro de Carlo Ginzburg debe ser considerado un referente para los investigadores y estudiosos de la historia. Su grandeza reside en una valiosa teoría interpretativa para el oficio del historiador y una manera de pensar la vida cotidiana. Sus 492 páginas representan un compendio de ensayos con temas muy diversos unidos por el relato (hilo) y la búsqueda permanente de las zonas opacas de documentos (huellas). Su importancia está en exponer las múltiples relaciones entre la verdad histórica, lo falso; lo real y lo ficticio como categorías que se entrelazan y retroalimentan. Porque “lo verdadero es un punto de llegada, no un punto de partida” (p.18). Enfrentando de manera categórica el escepticismo y relativismo posmoderno. En la presentación del libro, Ginzburg, se define como un seguidor de Bloch. En cuanto le interesan los relatos escritos (memorias) de personajes “santos” de la Edad Media, que dejan dilucidar la mentalidad o subjetividad de quien registra la información. Asimismo, su pasión por leer a contrapelo (W. Benjamin) los textos. Es decir, aquellas voces no controladas o que están fuera de la intención del autor (p.13:14). Esto sería lo opaco, las huellas de los textos y pequeños fragmentos que se van uniendo durante el proceso de la investigación. Leia Mais
Cómo escribir la historia del Nuevo Mundo: Historiografías/epistemologías e identidades en el mundo del Atlántico del siglo XVIII | Jrge Cañizares Esguerra
Em um dossiê cuja proposta focalize a circulação de ideias e as redes de conhecimento ligadas ao continente americano, a obra de Jorge Cañizares Esguerra torna-se uma importante referência, não apenas pelo olhar singular do autor em relação a fontes anteriormente analisadas por diversos historiadores e por refletir sobre as condições de possibilidades dos testemunhos no processo de construção da história do Novo Mundo ao longo do período moderno, em especial, durante o emblemático século XVIII, mas justamente em razão à reconstrução feita por esse autor dos múltiplos diálogos formados nos dois lados do Atlântico em um período de intenso debate intelectual sobre o continente americano.
Jorge Cañizares Esguerra é atualmente professor da Universidade do Texas (Austin) e tem se dedicado à temática da História da Ciência, especialmente no que concerne ao conhecimento ibérico e em suas possessões. É autor de diversos artigos e obras, entre as quais se destacam Puritan Conquistadors (CAÑIZARES ESGUERRA, 2001) e Nature, Empire and Nation (CAÑIZARES ESGUERRA, 2006). Publicado originalmente em 2001 em inglês com o título How to write the history of the New World. Histories, Epistemologies and Identities in the Eighteenth-Century Atlantic World, o trabalho do historiador equatoriano foi vencedor de diversos prêmios nos Estados Unidos, entre eles a premiação concedida pela American Historical Association ao melhor livro sobre a história da Espanha, de Portugal e da América. A tradução em espanhol, Cómo escribir la historia del Nuevo Mundo, somente foi impressa em 2007 2. No entanto, sua obra ainda permanece desconhecida entre os historiadores brasileiros. Leia Mais
El genocidio como práctica social. Entre el nazismo y la experiencia argentina – FEIERSTEIN (Ph)
FEIERSTEIN, D. El genocidio como práctica social. Entre el nazismo y la experiencia argentina. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2008. Resenha de: MARTÍNEZ, Horacio Luján. Philósophos, Goiânia, v.14, n. 1, p.211-218, jan./jun., 2009.
O autor deste estimulante e também inquietante livro é Daniel Feierstein, professor da disciplina “Análisis de las prácticas sociales genocidas”, na Faculdade de Ciências Sociais da Universidad de Buenos Aires, e diretor do Centro de Estudios sobre Genocidio e do Mestrado em Diversidad Cultural na Universidad de Tres de Febrero. O livro procura compreender o genocidio como o “aniquilamento de coletivos humanos”: um modo específico de destruição e reorganização das relações sociais. Isto é, trata-se de observar esses processos de aniquilamento não como uma exceção na história contemporânea, mas como uma tecnologia de poder peculiar. O conceito de “tecnologia de poder” é entendido aqui como uma forma peculiar de estruturar – seja através da criação, destruição ou reorganização – as relações sociais em uma sociedade determinada, os modos em que os grupos se vinculam entre si e consigo mesmos e os através dos quais constroem sua própria identidade, a identidade de seus semelhantes e a alteridade dos outros. Isso não implicará, como veremos, em dizer que o genocídio é somente um modo de reorganização de relações sociais, nem que esta somente opere através de práticas sociais genocidas. Pode-se dizer que há consenso entre os historiadores acerca de que o termo “genocídio” surge como um neologismo criado pelo jurista Raphael Lemkin. Dito neologismo se estrutura com o sufixo latino cidio (aniquilamento) e o prefixo grego genos, que tem dado muito mais lugar à discussão, uma vez que não parece fácil decidir se remete a uma origem tribal comum, à comunhão de características genéticas (raciais) ou às simples características comuns compartilhadas por um grupo. Esses dois últimos significados se acham presentes no termo grego genos e em seu herdeiro latino gens, ligado aos clãs familiares. O trabalho de Feierstein pretende esboçar a possibilidade de que o genocídio – pelo menos na sua forma mais ou menos recente – constitui uma prática social característica da modernidade (de uma modernidade que poderia ter os seus antecedentes ao final do século XV – 1492, talvez –, mas cuja aparição definitivamente moderna se centra nos séculos XIX e XX). Assim, não se trata somente do “aniquilamento de populações”, mas do modo peculiar com que isso é levado a cabo. Os tipos de legitimação a partir dos quais se logra consenso e obediência, as consequências que produz – a morte ou a sobrevivência – nos grupos vitimizados e também as consequências nos mesmos perpetradores e testemunhas, que veem modificadas suas relações sociais a partir da emergência dessa prática.
A ideia de conceber o genocídio como uma prática social evita aquelas perspectivas que tendem a coisificar os processos genocidas, equiparando-os a fenômenos climáticos naturais (ou que formariam parte de certa natureza do homem) e que seriam algo assim como um “exabrupto” nessa natureza. Uma prática social implica um processo levado a cabo por seres humanos e requer modos de treinamento, aperfeiçoamento, legitimação e consenso que diferem de sua prática automática ou espontânea. Uma prática social genocida, então, é tanto aquela que tende e/ou colabora no desenvolvimento do genocídio como aquela que o realiza simbolicamente através de modelos de representação ou narração dessa experiência. Essa ideia permite conceber o genocídio como um processo que se inicia muito antes do aniquilamento e que se encerra muito depois, mesmo que as ideias de início e conclusão sejam relativas a uma prática social. O conceito de genocídio, embora apareça pela primeira vez no nível legal na Convenção para a Prevenção e a Sanção do Delito de Genocídio aprovada pelas Nações Unidas em dezembro de 1948, tem sua história iniciada no direito internacional um par de anos antes, com a resolução 96 (I) das Nações Unidas, pela qual se convocava os Estados membros a reunir-se para definir esse novo tipo penal, como consequência direta dos assassinatos massivos levados a cabo pelo nazismo. Essa resolução declara que:
El genocidio es la negación del derecho a la existencia de grupos humanos enteros, como el homicidio es la negación del derecho a la vida de seres humanos individuales; tal negación del derecho a la existencia conmueve la conciencia humana, causa grandes pérdidas a la humanidad en la forma de contribuciones culturales y de otro tipo representadas por esos grupos humanos y es contraria a la ley moral y al espíritu y los objetivos de las Naciones Unidas. Muchos crímenes de genocidio han ocurrido al ser destruidos completamente o en par-te grupos raciales, religiosos, políticos y otros. El castigo del crimen de genocidio es cuestión de preocupación internacional. (FEIERS-TEIN, 2008, p.38)
Cabe destacar que o genocídio de grupos políticos se encontrava presente nessa resolução, e o que resulta ainda mais importante, se definia o crime em analogia com o homicídio, estabelecendo as características do fato pela tipologia da ação (morte coletiva frente à morte individual) e não pelas características da vítima. Essas características são citadas apenas para dar um exemplo: raciais, religiosas, políticas e outras, onde o termo “outras” completa a tipificação ao estabelecer que não é a identidade da vítima a que especifica o delito, senão as características da ação material cometida. Porém, no marco das discussões às que deu lugar o tratamento desse projeto, foi o próprio Raphael Lemkin quem expôs suas dúvidas acerca da inclusão dos grupos políticos entre aqueles que deviam ser protegidos pela Convenção, dado que se afirmava que esses grupos “carecem da persistência, firmeza ou permanência que outros grupos oferecem”. Muitos dos próprios estados que assinavam a Convenção disseram que a inclusão dos grupos políticos poderia pôr em risco a aceitação desta por parte de grande quantidade de estados, porque estes não queriam envolver a comunidade internacional nas suas lutas políticas internas. Outras posições sustentaram que a inclusão dos grupos políticos abriria portas para a proteção de outros grupos, como os econômicos e profissionais. Apesar das propostas prévias postularem o contrário, os grupos políticos foram finalmente excluídos da definição na sua última versão, na qual culminou a passagem de uma primeira definição “extensiva” a uma cada vez mais restritiva. Por outra parte, a restrição estabelecida finalmente na Convenção resultou arbitrária, ao incluir-se dentro dos “grupos protegidos” a quem possui uma “ideologia religiosa”, mas não a quem compartilha uma “ideologia política”, quando – salienta Feierstein – ambos constituem, para além de suas importantes diferenças, dois sistemas de crenças. Assim, chegamos à definição de genocídio:
1) se chamará genocídio pré-estatal toda prática social genocida vinculada à destruição de um grupo humano, realizada antes da existência dos Estados-nação modernos. Genocídio moderno:
2) Genocídio constituinte: se refere à aniquilação cujo objetivo é a conformação de um Estado-Nação, o qual requer o aniquilamento de todas aquelas frações excluídas do pacto estatal, tanto as populações originárias como núcleos políticos opositores ao novo pacto estatal.
3) Genocídio colonialista: é o que envolve a aniquilação de populações autóctones, basicamente como necessidade de utilização dos recursos naturais dos territórios que ocupam e/ou como estratégia de subordinação da população originária, seja para tolerar a espoliação ou para utilizá-los como mão de obra.
4) Genocídio pós-colonial: se refere especificamente ao aniquilamento da população produto da repressão às lutas de liberação nacional.
5) Genocídio reorganizador: remete à aniquilação, cujo objetivo é a transformação das relações sociais hegemônicas ao interior de um Estado-Nação preexistente.
Este último tipo – o genocídio reorganizador – logra agir especificamente sobre as relações sociais no contexto de uma sociedade existente, com o objetivo de clausular aquelas relações que geram fricção ou mediações ao exercício do poder – contestatárias, críticas, solidárias – e substituí-las por uma relação unidirecional com o poder, através do procedimento da delação e da desconfiança. A ruptura das “relações de reciprocidade” entre os seres humanos constitui o objetivo central desta modalidade genocida que opera “reorganizando” a sociedade, estruturando outro tipo de vínculos hegemônicos. As mortes do genocídio reorganizador cobram, por isso, o seu caráter de meios e já não de fins. O desaparecimento daqueles que encarnam determinadas relações sociais é condição necessária, mas não suficiente, para a clausura de tais relações. Na verdade, o processo se encontra dirigido ao conjunto social. O terror, nesta modalidade genocida, não opera tão somente sobre as vítimas, mas, fundamentalmente, sobre o conjunto social, buscando desterrar e clausular determinadas relações sociais e, ao mesmo tempo, fundar outras. Nesse sentido, o nazismo traz uma nova modalidade na prática do genocídio: “Ya no sólo el surgimiento de un nuevo Estado, ya no sólo una política colonialista, sino que ahora el genocidio se estructura como un modo de transformar un Estado preexistente” (FEIERSTEIN, 2008, p.99-100). O nazismo tinha um arquétipo da vítima ideal, que não era somente o judeu, mas o “judeu bolchevique”. Desse modo, se combatia o comunismo – o que favoreceu a conivência de tantos países no começo do Terceiro Reich – mas esse comunismo tinha caraterísticas raciais, isto é, originárias, radicais e inassimiláveis. O aparelho retórico do nazismo, que se apoiava no biológico, tornava a dissidência política um caso patológico. É esse modelo degenerativo que repete o terrorismo de Estado na Argentina da ditadura de 1976-1983. Tanto a “judeidade” na Alemanha dos anos 30 e 40 quanto o caráter “subversivo” na Argentina da década de setenta atentavam contra um modo de vida considerado tradicional e, pior, irreversível. Não é difícil pensar que o roubo sistemático de filhos de militantes desaparecidos, levado a cabo na Argentina por famílias militares, teve a cínica justificativa de uma salvação da criança por uma “reversão” da semente subversiva.
A comparação dos dois casos, o alemão e o argentino, realizada pelo autor, superou o que se chamou de a “unicidade” (uniqueness) do genocídio nazista. Esse caráter único outorgado ao holocausto, ou shoá, somente isolou essa experiência, declarando-a quase que ontologicamente irreproduzível.
Nos dois casos comparados, tão importante quanto a aniquilação material do inimigo é sua aniquilação simbólica. É isso o que representa a negação da shoá. O que nunca deveu ser – a existência do “judeu bolchevique” –, nunca foi. Portanto, as câmeras de gás nunca existiram.
Na Argentina, o processo de negação se encarna na demonização absoluta dos que participaram da repressão. Tornar ao outro um monstro, torná-lo o “Outro absoluto”, o afasta da vida cotidiana. Mais uma vez, como no caso da “unicidade” do genocídio nazista, o que aconteceu foi o delírio sádico de alguns poucos, contra a vontade e a credulidade geral. O que coroa esse mecanismo de negação é a “angelização” da vítima: assim, o desaparecido na Argentina “não tinha feito nada”. Ao massacre absoluto só corresponde a inocência absoluta. Feierstein chama a atenção para o fato de que, desse modo, o genocídio cumpre seu objetivo: a negação simbólica das práticas de resistência políticas (FEIERSTEIN, 2008, p.129).
As leituras de Hanna Arendt e Michel Foucault ecoam claramente no livro. A noção de um poder produtivo com uma ideologia do terror como argumento de coesão e coerção social não é algo tão estranho para nós nestes tempos chamados de “terrorismo globalizado”.
Sabemos que os números e a política sempre mantiveram uma relação perversa da qual a estatística é seu filho bobo. Talvez seja importante pensar que, considerando o genocídio uma prática que procura a reorganização de uma sociedade, aquilo torna algo um massacre premeditado não é o número de suas vítimas, senão as características destas.
Isto é importante sobretudo no Brasil, onde todo debate sobre desaparecimento e tortura na última ditadura é rapidamente abafado com a magra escusa, que mal esconde uma ameaça, de que nos países vizinhos foi muito pior
Referências
FEIERSTEIN, D. El genocidio como práctica social. Entre el nazismo y la experiencia argentina. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2008. 405p.
Horacio Luján Martínez – Professor-adjunto do Departamento de Filosofia da Universidade Estadual do Oeste do Paraná (Unioeste), Cascavel, Paraná. E-mail: horacio4@hotmail.com
El Cono Sur. Una historia común | Mario Rapoport e Amado Luiz Cervo
Relançado em edição revista e ampliada pela Editora Fondo de Cultura Económica, El Cono Sur.Una historia común (História do Cone Sul. Rio de Janeiro: Revan, 1998) amplia a oportunidade oferecida ao público das relações internacionais de conhecer uma nova história da América Latina, contada de forma conjunta por alguns dos mais renomados pesquisadores brasileiros e argentinos, como Amado Luiz Cervo, Mario Rapoport, Luiz Alberto Moniz Bandeira, Eduardo Azcuy Ameghino, Edmundo A. Heredia e Francisco Doratioto.
No momento em que mudanças políticas e econômicas fundamentais surpreendem os principais países latino-americanos, os trabalhos apresentados pelos autores servem como uma resposta às indagações muitas vezes feitas pelos tomadores de decisão a respeito da importância da renovação e aprofundamento dos laços de integração regional como forma de recuperação dos rumos do desenvolvimento. Leia Mais
Supermadre: la mujer dentro de la política em América Latina | Elsa M. Chaney
CHANEY, Elsa M. Supermadre: la mujer dentro de la política em América Latina. Mexico: Fondo de Cultura Económica, 1983. Resenha de: NADER, Maria Beatriz. Dimensões. Vitória, n.8, p.133-137, 1999. Acesso apenas pelo link original [DR]
Hechos y ficciones de la globalización – Argentina y Mercosur en el sistema internacional | Aldo Ferrer
A globalização econômica, ao contrário do enfoque amplamente difundido nos meios acadêmicos, não anularia a liberdade dos países em desenvolvimento de estabelecerem e implementarem suas políticas de inserção ativa no sistema internacional. Essa é a proposição principal defendida por Aldo Ferrer quando analisa o comportamento da Argentina e do Mercosul frente à economia mundial, no livro Hechos y ficciones de la globalizácion Argentina y el Mercosur en el sistema internacional.
Existiriam, basicamente, duas visões sobre o fenômeno da globalização. A primeira, denominada fundamentalista, sugere que o problema clássico do desenvolvimento não mais existe, uma vez que caberia aos agentes transnacionais, e não aos Estados, o poder de decisão sobre o destino da economia e das finanças. A inserção dos países nesse sistema dar-se-ia de forma passiva por meio da adoção de políticas neoliberais. Tais políticas permitem o mínimo de interferência estatal no mercado pois defendem as privatizações, a abertura econômica e a desregularização dos mercados. A visão fundamentalista refletiria a racionalização dos interesses em jogo dos centros de poder. Os países em desenvolvimento teriam que manter políticas amistosas com o mercado mundial sob o risco de sofrerem uma fuga maciça de capitais especulativos de curto prazo e de verem sua credibilidade abalada. No plano interno, haveria a exigência de flexibilização dos sistemas de seguridade social, o equilíbrio macroeconômico e a estabilidade dos preços. As resistências à ratificação de tais medidas são tidas como uma manifestação de ingovernabilidade democrática. O enfoque fundamentalista seria uma poderosa ferramenta de colonização cultural imposta aos países periféricos. Leia Mais
El experimento de Cádiz en Centroamérica 1808-1826 | Mario Rodríguez
El autor Mario Rodríguez es profesor de la University of Southem California e investigador en temas de Historia Centroamericana, sobre los cuales ha escrito otros dos libros: “A Palmerstonian Diplomat in Central América: Frederick Chatfield” y “La Conspiración de Belén en Nueva Perspectiva”.
En el libro que ahora comentamos podrá el lector interesado en la Historia Americana, en general, y Centroamericana en particular, encontrar el relato pormenorizado del proceso de Independencia de esa región y los esfuerzos por encontrar nuevas formas de organización del Estado que resultasen aceptables para todos los pueblos de Centroamérica, tratando de evitar la ruptura de unidad, permanentemente amenazada por el espíritu localista, que se había desarrollado ampliamente durante la permanencia en la Monarquía Española. Leia Mais